Colonial eleva un 11% los ingresos y advierte de más ajustes en el mercado de oficinas

Colonial, la mayor socimi de oficinas del mercado español, ha cerrado el primer trimestre de 2023 con un fuerte crecimiento del 11% de sus ingresos por rentas, hasta 90 millones de euros, y del 13% del beneficio bruto operativo (ebitda), hasta 65 millones. Esta sólida evolución le ha permitido ganar 38 millones, un 5% más que en el mismo periodo del pasado ejercicio. Si se excluye el impacto de las desinversiones, el crecimiento del resultado neto recurrente es del 14%.

Juan José Bruguera, presidente de Colonial, ha señalado que tanto el incremento de ingresos como de ebitda de la socimi "se sitúa por encima de la media de las compañías del sector y de las cotizadas europeas”. Por su parte, Pere Viñolas, consejero delegado de la compañía, ha destacado que la compañía "sigue marcando récords de contratación y capturando rentas por encima de la media del mercado, y llevando la ocupación a un récord histórico del 97%”, casi 150 puntos porcentuales más de los arrojados en diciembre.

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Durante el primer trimestre del ejercicio 2023, Colonial ha formalizado 25 contratos de alquiler correspondientes a 45.860 metros cuadrados, cifra que se ha situado por encima de la firmada en el último trimestre del ejercicio anterior. Un 60% del esfuerzo comercial (27.294 metros cuadrados) ha correspondido a nuevos contratos; mientras que los otros 18.566 metros cuadrados han sido renovaciones, destacando la plaza de Madrid con 9.829 metros.

En términos comparables, lo que se conoce en la jerga del sector como like for like, la compañía ha logrado un crecimiento del 10% de los ingresos brutos por rentas. Por lo que respecta a los ingresos netos de gastos (ebitda rentas), han aumentado un +12%, y en términos comparables like for like, un 11%. En términos económicos (metros cuadrados formalizados multiplicados por rentas firmadas), ha formalizado contratos por un importe anualizado de rentas de 17 millones de euros.

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De cara al futuro, Viñolas ha advertido que "estamos en una fase de transición que no se ha acabado". Su pronóstico es que 2023 continuará siendo un ejercicio de ajuste, ya que el mercado se enfrenta a tener que "acomodar las yields (rentabilidad) de los edificios a una financiación distinta", al haber pasado los tipos del 0% al 4% en apenas un año. "Este fenómeno todavía no se ha agotado", ha apuntado el consejero delegado de Colonial.

La socimi ha sido una de las compañías más activas en desinversiones en el último año, ventas que ha aprovechado para mejorar su pasivo, reduciendo la deuda bruta en 336 millones, con la cancelación de unos préstamos bilaterales, y el aumento de la liquidez hasta 2.473 millones, entre caja y líneas disponibles. Esto ha permitido mejorar el ratio de endeudamiento (LTV) en 189 puntos básicos, hasta situarlo en el 36,81%, con el 100% de su deuda contratada a tipo de interés fijo o cubierto.

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Entre los hitos del trimestre, destaca la entrega del proyecto de Plaza Europa 34, en Barcelona, edificio completamente alquilado al Grupo Puig, con un contrato de obligado cumplimiento de 10 años. Además, de la cartera de ocho proyectos que tenía la empresa, únicamente quedan por finalizar dos de ellos: Méndez Álvaro en Madrid y Louvre Saint Honoré en París. Este último mantiene su previsión de entrega entre finales del 2023 y principios de 2024.

Respecto al edificio de IBM en Madrid, que se quedará vacío a finales de año, Viñolas ha reconocido estar estudiando todas las alternativas, tras haber recibido muestras de interés para su compra por parte de algunos actores. "En IBM estamos en fase de estudio de alternativas y da mucho juego", ha reconocido el directivo, quien ha señalado que ya cuando incorporaron este activo a su cartera, hace siete años, lo hicieron "muy interesados en la capacidad de usos alternativos, oficinas y viviendas", que permite hacer distintas configuraciones", desde un complejo mixto, hasta todo residencial o mantener la oferta de despachos.

Por lo que se refiere a los nuevos perfiles de demanda, ante el auge del teletrabajo, y el papel que están jugando fenómenos como las oficinas compartidas o los edificios mixtos, el directivo ha señalado que "el coworking está jugando un rol, pero no es disruptivo". En el caso de Colonial, representa un 5% de su actividad, magnitud que lo convierte en "una parte de la oferta que tenemos que ofrecer, una parte de la cadena de valor", pero no la esencia del negocio. En cambio, para Viñolas, "lo que sí es disruptivo es la polarización", entre los mejores edificios y los secundarios. "Los clientes de oficinas buscan cada vez más las mejores oficinas, y eso es algo de lo que se beneficia Colonial", ha concluído.