Cristiano Ronaldo, Iñigo Onieva y Manuel Campos lanzan una cadena de clubs privados

Nueva aventura empresarial de Mabel Capital. Tras el divorcio amistoso de sus tres socios fundadores, Rafa Nadal, Abel Matutes y Manuel Campos, este último se quedó con el negocio de restauración, Grupo Tatel, una actividad que ahora relanza de la mano de nuevos socios.

Junto a Íñigo Onieva y Cristiano Ronaldo, el empresario ultima el lanzamiento de Vega Private Members Club, un club social privado, al que solo se podrá acceder por invitación o recomendación de algún socio, y cuyas dos primeras ubicaciones estarán en las millas de oro de Madrid y Marbella.

En la capital, Mabel ha elegido la calle Lagasca para dar el pistoletazo de salida a este nuevo proyecto. Asesorado por Torit Allocation, el grupo se ha hecho con el local ubicado en el número 88 de esta cotizada arteria, justo en la esquina con Ortega y Gasset, junto a la tienda de Chanel.

Se trata de un espacio de algo más de 700 metros cuadrados donde Campos reabrirá la cadena Totó. Como adelantó El Confidencial, el pasado febrero, este restaurante de comida italiana apagó los fogones que tenía en los números 36-38 del Paseo de la Castellana y traspasó el negocio al peruano Osaka.

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Para entonces, Mabel ya estaba trabajando en este nuevo concepto de club privado, que siempre apostará por juntar en un mismo espacio diferentes ambientes y ofertas gastronómicas. En Lagasca, además de Totó también estará Casa Salesas, el restaurante que lidera Onieva en la calle Fernando VI y que abrirá así en el barrio de Salamanca.

Además, Vega Private Members Club Lagasca contará con tres barras de coctelería, diferentes espacios de trabajo, salas de reuniones, salones para celebrar eventos y conferencias. Esta propuesta de combinar en un mismo espacio varias ofertas será replicado en Marbella, donde Campos y sus socios preparan su desembarco en las instalaciones del histórico Villa Tiberia.

Antes de la separación de Nadal, Matutes y Campos, estaba proyectado abrir en Marbella un restaurante Tatel, el buque insignia de Mabel Hospitality. Pero, tras la reorganización societaria que han llevado a cabo los antiguos socios, se ha redefinido el proyecto.

La ubicación marbellí es una enorme finca, rodeada de jardínes, donde la idea es contar con las tres marcas de restauración del grupo: Tatel, Totó y Casa Salesas, según han asegurado a este medio fuentes conocedoras.

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C. V.

Suma y sigue, porque los planes de Mabel Hospitality pasan por seguir creciendo con su nuevo concepto de club privado en más ubicaciones e, incluso, dar el salto internacional a ciudades como Lisboa (Portugal) y Milán (Italia).

Onieva, quien ya lleva las riendas de Casa Salesas, es también el director del proyecto de estos nuevos clubs privados, mientras que Rafa Tapia, director de operaciones de Mabel Hospitality, es quien lidera la parte operativa.