Grupo Salvaje alquila a Barings el mayor local del centro de Madrid para lanzar su nueva marca

Nuevo concepto de restauración de lujo en el corazón del Barrio de Salamanca. Grupo Salvaje se ha hecho con el que, probablemente, sea el mejor escaparate gastronómico del centro de Madrid: el número 64 de la calle Velázquez. Este local fue durante años una oficina estrella del Banco Popular, pero, tras la resolución de la entidad y su venta a Santander, bajó la persiana hace un año.

Entonces, el dueño del espacio, el fondo estadounidense Barings, encargó a Cushman & Wakefield (C&W) y Savills la búsqueda de un nuevo inquilino, proceso que despertó el apetito de numerosas cadenas de restauración extranjeras y nacionales. Una concurrida puja en la que ha terminado imponiéndose Salvaje, grupo que ha contado con el asesoramiento de la consultora inmobiliaria Torit Allocation.

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Se trata de una operación que tiene todos los ingredientes para hacer un plato estrella. Los 1.850 metros cuadrados diáfanos de local son una excepción en el barrio de Salamanca, el distrito más cotizado de Madrid y la nueva milla de oro de la restauración de lujo, donde el maridaje de gastronomía y espectáculo exige contar con espacio y, si es todo en una misma planta, mejor. Aquí se viene a comer, pero también a ver, y a dejarse ver. Y Velázquez 64 contará con capacidad para casi 300 comensales.

El picante de la operación lo pone la renta pactada, que las fuentes consultadas aseguran que es una de las mayores de Madrid, en línea con los nuevos referentes que están marcando operaciones icónicas como el desembarco de Zuma en Castellana. Sin embargo, lo que ha terminado inclinando la balanza no ha sido el precio, sino el proyecto de Grupo Salvaje.

Barings ha llegado a recibir ofertas todavía más suculentas, en términos de ingresos por alquiler, de otros grupos internacionales, pero la firma dirigida en España por José Carlos Torres ha apostado por Salvaje al convencerle su propuesta de negocio por encima del resto. Velázquez 64 verá nacer el tercer concepto gastronómico del grupo, tras Salvaje y Arrogante, un nuevo restaurante que busca ser una vuelta a lo primitivo, a lo nómada.

Frente a la alta cocina japonesa de Salvaje y la propuesta italiana de Arrogante, este nuevo restaurante, cuyo nombre sigue siendo un misterio, apuesta por las brasas y una cocina basada en materias primas, fundamentalmente carnes, al fuego. Además, contará con raw bar (barra de crudos) y showcooking, construyendo la atmósfera de estimulación de todos los sentidos y cocina-espectáculo que caracteriza a este grupo.

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Este futuro espacio, que espera abrir sus puertas en 2023, será vecino del restaurante de Salvaje en el Hotel Bless, y estará a apenas cuatro manzanas de Arrogante, lo que permitirá al grupo de restauración desarrollar una estrategia de mancha de aceite en el barrio preferido por los turistas internacionales con alto poder adquisitivo. En la capital, Salvaje también está presente en Galería Canalejas y La Moraleja.

Tras arrancar su nuevo concepto en Madrid, la idea del grupo es sumar esta nueva marca al plan de expansión por todo el mundo en el que está inmerso. Actualmente, cuenta con 15 restaurantes operativos repartidos por nueve países y está en obras en otros 10.