Adiós al cloro: esta empresa desinfecta el agua de las piscinas con datos y modelos predictivos
Hacia un futuro mejor por Ec Brands
Geodesic ha desarrollado una tecnología que ofrece alternativas sin químicos para el tratamiento del agua. Se aplica en varios sectores, desde procesos industriales hasta torres de refrigeración y condensadores evaporativos de grandes edificios
En 1908, Jersey City (Estados Unidos) se convirtió en una de las primeras ciudades en utilizar cloro para desinfectar el agua potable, lo que redujo significativamente enfermedades como el cólera y la fiebre tifoidea. Desde entonces, se utiliza para tratar el agua de piscinas en todo el mundo. Las ventajas son evidentes: elimina rápidamente bacterias, virus y algas a un precio competitivo. Aunque también tiene algunos contras, como la posible irritación en piel, ojos y mucosas, o el daño a los ecosistemas si el agua se vierte sin tratamiento.
En el mercado, ya existen empresas que ofrecen alternativas sin químicos, como la startup madrileña Geodesic Innovations. “En piscinas públicas climatizadas de uso intensivo reducimos significativamente el consumo de agua, energía y químicos, pero nuestra tecnología tiene aplicaciones más amplias”, explica su fundador y CEO, Luis Miguel Botija. También se emplea en procesos industriales, como el lavado de frutas y hortalizas, la pasteurización de envases, y en torres de refrigeración y condensadores evaporativos de grandes edificios.
Pero, ¿en qué consiste exactamente su tecnología? Para desinfectar el agua sin químicos, utiliza campos eléctricos que generan un desequilibrio electro-osmótico en las membranas celulares de las bacterias, eliminándolas sin necesidad de otros aditivos. La compañía gestiona los procesos a través de una plataforma de gestión remota basada en la nube: “Hemos creado sistemas que, con datos y modelos predictivos, entienden qué pasa con el agua en tiempo real, detectan problemas y ajustan el tratamiento para que sea eficiente”. De esta manera, añade Luis Miguel, “conseguimos un ahorro significativo del agua en piscinas y torres de refrigeración, al reducir la necesidad de renovar el agua y los lavados de filtros”.
La compañía nació en 2011, aunque no comenzó a comercializar sus productos en el mercado hasta 2017. “Tuvimos que hacer muchas pruebas”, recuerda. Luis Miguel es ingeniero de Montes y estuvo vinculado durante muchos años al mundo empresarial. Cofundó una compañía enfocada en la gestión ambiental, obras y servicios relacionados con el medio ambiente: “Durante esa época comenzó a apasionarme el sector del agua, sin embargo, la estructura de la empresa que lideraba no era la ideal para iniciar un proyecto innovador desde cero. Este tipo de iniciativas requieren una gran inversión en investigación y desarrollo. Había que sentar bien las bases”.
Sus primeros proyectos fueron en una de las Torres Kío en Madrid y en una depuradora del Gobierno valenciano. “Nuestra tecnología se adapta al caso concreto: desde reutilizar agua en depuradoras hasta enfriar edificios en torres de refrigeración, usando algoritmos distintos para cada caso”. Geodesic no vende sus equipos, sino que se encarga de llevar a cabo la instalación y la gestión, manteniendo sus sistemas con contratos de cinco a 12 años.
En este camino, señala el CEO, Banco Santander ha jugado un papel clave: “Justo después de la pandemia, coincidiendo con una pequeña ronda de financiación que cerramos ese año, se sumaron al proyecto con una inversión de dos millones de euros, una aportación absolutamente clave en un momento en que la pandemia había paralizado casi por completo nuestras operaciones. Nos han ayudado a seguir desarrollando nuestras soluciones sostenibles más allá de nuestras fronteras”.
De España a México
Actualmente, la empresa opera en España, Portugal, México y EEUU. Este año, además, se expandirá también por Italia y Suiza. “La internacionalización es un proceso complejo y gradual”, afirma. Por poner el ejemplo de uno de sus mercados más importantes, “México enfrenta problemas críticos de abastecimiento de agua, agravados por su población de casi 130 millones de habitantes, zonas desérticas o semiáridas y grandes urbes como Ciudad de México, donde la escasez de agua es un desafío urgente”.
Ante esta situación, tal y como explica, lo identificaron como un mercado estratégico y comenzaron a operar allí en septiembre de 2022, contratando a un responsable de marketing para desarrollar el mercado. “Ya hemos instalado nuestros primeros equipos en clientes mexicanos, empezando por piscinas de uso público, seguido de colaboraciones con cadenas hoteleras y, más recientemente, con la industria”.
A raíz de la entrada en el país latinoamericano, llegó la expansión a Miami “gracias a un importante proyecto inmobiliario”. Ahora, se plantea varios objetivos. En primer lugar, consolidar su presencia en los mercados actuales y captar más clientes dentro de los sectores donde opera. Y en segundo lugar, seguir adentrándose en el water positive: “Es un concepto que promueve un consumo de agua sostenible, incluso eliminándolo, para contribuir al desarrollo global. Más allá de la tecnología, esto requiere el compromiso de empresas y organismos”. En un futuro próximo, concluye, “presentaremos nuevos proyectos para no quedarnos atrás tecnológicamente. Esperamos anunciar avances significativos a finales de 2025”.