El País Vasco incrementa las multas por portar una navaja en el ocio nocturno
El importe puede aumentar todavía más si el infractor se encuentra bajo la influencia del alcohol, las drogas, exhibe el arma o amenaza con ella
Exhibir una navaja en una discoteca del País Vasco, va a salir muy caro. Tras el incremento de denuncias por portar armas blancas que se ha registrado desde el inicio de 2023, con un centenar de casos tramitados por la Ertzaintza solo en enero, el Gobierno Vasco tiene la intención de ponerle freno.
En este sentido, el Grupo de Trabajo integrado por el Gobierno vasco, Eudel, y los municipios de más de 50.000 habitantes, han decidido endurecer la cuantía de las multas cuando se tramiten denuncias por posesión de armas blancas dentro de la horquilla que permite la Ley de Seguridad Ciudadana.
Con las nuevas cuantías, La sanción por portar una navaja o cuchillo legales –con un filo inferior a 11 centímetros, no automáticas y sin doble filo– pasará de los 602 a los 1.000 euros. Pero si se incauta en un espacio de ocio nocturno o en un botellón se incrementará directamente un 100% y llegará a los 2.000 euros.
Detectores de metales en el ocio nocturno
Por otro lado, si el infractor se encuentra bajo la influencia de las bebidas alcohólicas o de las drogas, está en estado violento, exhibe el arma o amenaza con ella, el importe aumentaría otro 100%. Si confluyen todas ellas, la sanción podría alcanzar los 6.000 euros. Y si se trata de un arma prohibida, la suma de las sanciones podría irse hasta los 9.000 euros.
Las medidas para acabar con la violencia en el ocio nocturno son diversas. Desde los cacheos preventivos en las grandes ciudades, la posible implantación de detectores de metales en el ocio nocturno o la próxima obligación para que las discotecas contraten seguridad privada. Y es que, según los datos provisionales, el pasado año la Ertzaintza interpuso 440 denuncias por portar armas blancas en situaciones no permitidas. Esta cifra, unida a la de las policías locales (528 denuncias), hace un total de 968 de denuncias en Euskadi, un 19% más que en 2019.
En el caso de los menores de edad, la normativa directamente prohíbe que puedan portar armas blancas, pero también se endurecerá de tal forma que su uso pasará a considerarse infracción grave y la sanción subirá de los entre 100 y 600 euros actuales a los entre 300 y 600 euros.
Exhibir una navaja en una discoteca del País Vasco, va a salir muy caro. Tras el incremento de denuncias por portar armas blancas que se ha registrado desde el inicio de 2023, con un centenar de casos tramitados por la Ertzaintza solo en enero, el Gobierno Vasco tiene la intención de ponerle freno.
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