Sí al deporte pero no al permiso a niños: el 32% de los vascos rechaza sus salidas a la calle

El 26 de abril, marcó un punto de inflexión para muchos niños... y familias. Ese día, más de siete millones de menores de 14 años se echaron a la calle en España para abrazar el primer permiso oficial para abandonar de forma temporal el confinamiento derivado del estado de alarma decretado por el Gobierno el 14 de marzo. Pero esta hora de libertad al día que se mantiene vigente desde entonces, para alivio de los más pequeños y los padres, no es del gusto de todos y, en el caso de Euskadi, cuenta con el importante rechazo de uno de cada tres ciudadanos, en contra de la concesión de este permiso diario a los más pequeños.

Así lo pone de manifiesto el último estudio realizado por el Gabinete de Prospección Sociológica del Gobierno vasco, que ha abordado las opiniones y actitudes de la ciudadanía vasca ante la crisis sanitaria provocada por el coronavirus, su percepción de las medidas adoptadas por las instituciones para hacer frente a la pandemia y las perspectivas a futuro a nivel personal y económico. El 32% de los participantes en la encuesta rechaza de uno u otro modo este 'privilegio' de una hora en la calle otorgado a los menores de 14 años, ya que el 23% considera que la norma aprobada por el Gobierno que permite abandonar a los más pequeños la reclusión durante 60 minutos debería ser "menos permisiva" y el 9% se opone de manera frontal a que puedan abandonar el hogar durante la vigencia del estado de alarma.

El 23% cree que el permiso otorgado a los niños debe ser "menos permisivo" y el 9% se opone a que puedan abandonar el hogar en el estado de alarma

No a los niños en la calle, pero sí a la práctica de deporte de forma individual y a los paseos. Porque, entre la ciudadanía vasca, existe una reseñable mayor tolerancia a que se pueda salir del domicilio para hacer ejercicio físico o estirar las piernas que a la presencia de los niños en la calle. Tan solo un 13% de los vascos es contrario a que las personas adultas puedan abandonar el confinamiento de forma temporal para salir a pasear o hacer deporte. Esta posibilidad todavía no era una realidad en el momento en que se llevó a cabo la encuesta, entre el 27 y el 29 de abril —esto es, nada más entrar en vigor el permiso para los niños—, si bien era una opción que estaba con fuerza en las quinielas para formar parte del siguiente permiso otorgado por el Gobierno central dentro de la flexibilización del estado de alarma —de hecho, el Ejecutivo vasco defendía que se abriera la puerta a los paseos y a la práctica del ejercicio individual al mismo tiempo que a los niños—.

El estudio que evidencia este sentir se fundamenta en los datos recogidos en un total 750 entrevistas realizadas de forma telefónica individual a personas mayores de edad nada más entrar en vigor el permiso para salir a la calle a los menores de 14 años, una medida que es avalada sin condicionantes por el 57% de los encuestados. El mayor rechazo a esta medida se da entre la juventud, en el tramo de edad comprendido entre los 18 y 29 años, donde se impone la oposición a este 'privilegio'. Sí el 41% la avala, el 40% opina que la norma debería ser "menos permisiva" y el 12% la rechaza de plano. Por el contrario, son los mayores de 65 los más permisivos con las salidas de los niños, ya que el rechazo a la norma cae al 19%.

El mayor rechazo al permiso a los niños se da entre la juventud, en el tramo de edad de 18 a 29 años, donde se impone la oposición a este 'privilegio'

Se avala de forma mayoritaria que se permita pasear y hacer deporte y, además, sin condicionantes de edad. El 66% se muestra partidario de no imponer ninguna limitación por este motivo, frente al 10% que apoya esta medida solo para los menores de 65 años y el 8% que defiende que solo se permita esta posibilidad a las personas en edad de jubilación. En este ámbito, igualmente, las personas de entre 18 y 29 años son las menos partidarias de que el abanico del deporte y el paseo se abra de forma general sin limitaciones, ya que solo lo respalda el 47%. De igual modo, esta franja de edad es la que más defiende que los mayores de 65 años se queden fuera de este permiso.

El sondeo también interpela por el cumplimiento del confinamiento y de las demás “normas y medidas impuestas para frenar el avance del coronavirus”. En todo caso, las posibles respuestas no se centran en el si se respeta o no lo dictado dentro del estado de alarma, sino que aluden al grado de cumplimiento de lo impuesto. Y a este respecto, y en ausencia de la opción de ‘total cumplimiento’, el 76% afirma que “mucho”, el 22% asegura que “bastante” y el 2% admite que “poco”.

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Las diferencias surgen cuando hay que valorar a los demás. En este caso, los porcentajes en relación con las actitudes negativas del entorno se incrementan, ya que el 13% de los encuestados estima que la ciudadanía vasca está cumpliendo “poco” o “nada” las normas y recomendaciones dictadas. Además, se impone el sentir de que a medida que la situación de confinamiento se alarga se acentúa la relajación en el cumplimiento de las medidas decretadas por parte de la población. Así lo opina el 60% de los encuestados, frente al 26% que considera que “nada ha cambiado” o el 11% que sostiene que los ciudadanos cumplen de forma "más estricta" con el estado de alarma con el paso del tiempo.

El estudio refleja que se cumple con las normas de forma mayoritaria y que también es mayoritario el apoyo a la idoneidad de las mismas. El 88% de los vascos asegura que está “muy” o “bastante” convencido con las medidas decretadas para hacer frente al coronavirus, frente al 10% que muestra su oposición.

El 84% de la población vasca permanece confinado en sus hogares con familiares, el 13% de los ciudadanos lo hace solo y el 3% con otras personas

La encuesta también muestra la fotografía del confinamiento en Euskadi, donde el 84% de la población permanece recluido con familiares, el 13% de los ciudadanos lo hace solo y el 3% con otras personas. A este respecto, el 85% asegura estar sobrellevando la reclusión domiciliaria "bastante bien" (65%) o "muy bien" (20%). En contraposición, el 12% afirma que esta situación la está soportando “bastante mal” y el 3% “muy mal”. Los mayores de 65 años y las personas de entre 30 y 45 años son quienes peor están sobrellevando el no poder salir de casa, según los resultados del estudio.

En este sentido, un 12% de los ciudadanos admite salir de casa una o varias veces al día para “comprar comida u otras cosas necesarias”, mientras que el 29% lo hace varias veces por semana y el 33% una vez por semana. Por su parte, otro 12% asegura que nunca sale de casa por este motivo desde que se decretó la emergencia sanitaria por el avance del coronavirus.

El 12% afirma que nunca sale de casa para "comprar comida u otras cosas necesarias" y otro tanto dice que abandona el hogar "una o varias veces al día"

A la hora de salir a la calle, el 27% reconoce que siente “miedo, estrés o ansiedad” —19% bastante y 8% mucho—, mientras que estos sentimientos no afloran, o en su caso muy poco, para siete de cada diez ciudadanos. Por su parte, el 57% de la población dice no sentir "alivio" o "sensación de libertad" al pisar la calle, frente al 37% que así lo considera.

De cara al impacto de la crisis del coronavirus en la economía personal, un 60% asegura que “no ha cambiado” nada su situación, frente al 28% que señala que ha empeorado “algo” y el 10% que afirma que “mucho”. De cara al futuro, se impone el optimismo, ya que el 54% considera que la situación "irá a mejor", el 29% entiende que será “algo peor” y el 8% estima que será “mucho peor”. En su conjunto, el 70% opina que la economía vasca quedará debilitada para “algunos años” y el 9% es de la partida que “quedará fuertemente dañada para muchos años”, mientras que el 19% no duda de que “se recuperará con rapidez”.