Urkullu reclama por carta a Sánchez poder decidir sobre el cierre de las empresas
El lehendakari exige que "sea cada comunidad autónoma la que, desde la especificidad del territorio, pueda concretar actividades y empresas que son auxiliares y necesarias para la actividad crítica"
El lehendakari Iñigo Urkullu pidió anoche por carta al presidente del Gobierno Pedro Sánchez instantes después de que anunciara el cierre de toda la actividad económica no esencial para combatir el avance del coronavirus que la medida no sea obligatoria con carácter general en el conjunto de España, de modo que cada comunidad autónoma pueda concretar qué empresas pueden seguir funcionando por ser “necesarias” y en base a la "especificidad" del territorio.
En concreto, le reclama que “atendiendo a los criterios fundamentados en la Salud Pública, según directrices de las autoridades sanitarias en las que también todas las comunidades autónomas nos basamos, será cada comunidad autónoma en su ámbito de Diálogo Social la que desde la especificidad del territorio podrá concretar actividades y empresas que son auxiliares y necesarias para la actividad crítica previo conocimiento del Gobierno español”.
Urkullu ha defendido de forma insistente durante la crisis sanitaria la necesidad de no paralizar la actividad para no entrar en el "coma económico"
Esta petición del lehendakari, que durante la crisis sanitaria ha defendido de forma insistente la necesidad de no paralizar la actividad empresarial para no entrar en el "coma económico", se recoge en una carta remitida anoche a Sánchez y que acaba de ser dada a conocer por Urkullu en las redes sociales a las puertas de que este mediodía tenga lugar la reunión por videoconferencia entre el presidente del Gobierno y los responsables de las comunidades autónomas en la que Sánchez les va a explicar las decisiones anunciadas ayer y que se van a aprobar hoy en un Consejo de Ministros extraordinario.
En la misiva, el lehendakari no oculta su malestar por las formas seguidas por Sánchez para decidir y dar a conocer el cierre de toda la actividad no esencial. Así, le afea que la tercera reunión de presidentes desde que estalló la crisis sanitaria por la pandemia vuelve a producirse después de una comparecencia pública ante los medios de comunicación y la segunda en la que la cita “viene precedida del conocimiento desde determinados medios de comunicación del borrador de Decreto a aprobar en el Consejo de Ministros a celebrar antes” del encuentro con los presidentes autonómicos.
"Lo anunciado en el día de ayer no solo es desconocido para determinados presidentes de comunidades autónomas (PSOE y PP) antes de la comparecencia ante los medios por parte del Gobierno y que me llamaron al conocer por la conferencia de prensa de su anuncio en sus términos, sino que es contrario a lo que hasta el día anterior se había manifestado por el propio presidente y ministros varios del Gobierno español a agentes políticos, económicos y sociales que ayer mismo me llamaron y conocí de manera constatable", refleja.
Urkullu dice que es una medida "no clara y de difícil interpretación", y pide que las comunidades decidan qué empresas cierran en base a su "especificidad"
Igualmente, en la carta deja constancia de que se trata de una medida "no clara" y de "difícil interpretación" a la hora de determinar a qué empresas afecta, a expensas de las concreciones que aporte Sánchez en el encuentro de esa mañana vía telemática. Por ello, el escrito busca, según deja constancia el lehendakari, hacer llegar al presidente del Gobierno "una aportación para que pueda ser tomada en consideración antes de la redacción definitiva y aprobación del Decreto" por parte del Consejo de Ministros este domingo, y que consiste en que el País Vasco y el resto de comunidades autónomas puedan decidir qué empresas y actividades cierran en base a su "especificidad".
Urkullu, justifica su petición "teniendo en cuenta" diversos factores, el principal la "especificidad de la economía productiva en cada comunidad autónoma y la incidencia de la misma en el PIB, así como de las consecuencias que añadidas a las medidas ya adoptadas serán una vez de que se levante el decreto de estado de alarma". En esta misma línea, apunta a la "dificultad que supondría en la competitividad de sectores que ven que empresas de su ámbito en otros países mantienen abierta su actividad" para reivindicar que la decisión final sobre qué empresas deben cerrar o no esté en manos de las comunidades autónomas. También alude a la "dificultad operativa de la puesta en práctica del Decreto anunciado un sábado por la tarde para toda actividad que se ve reflejada en el mismo a partir del lunes tras el fin de semana", en una alusión que encierra una crítica a Sánchez por su modo de proceder.
Alude de forma crítica a la "dificultad operativa de la puesta en práctica del Decreto anunciado un sábado por la tarde para toda actividad a partir del lunes"
Asimismo, pone de relieve "la dificultad que supondría de interpretación de una medida generalizada que afecta incluso a empresas que están colaborando en la fabricación de material sanitario, incluso por impulso de las diversas administraciones públicas", así como a la "afección que una medida no clara podría suponer a la cadena de valor de sectores básicos como el de la alimentación". Finalmente, entre los motivos para sustentar su petición, deja constancia de "los datos de reducción de movilidad por las medidas adoptados hasta el momento" para frenar la expansión del coronavirus.
Desde que se decretó el estado de alarma hace ahora dos semanas, Urkullu ha venido rechazando el cierre generalizado de todas las empresas no esenciales para evitar la propagación del Covid-19 frente al planteamiento de los sindicatos nacionalistas o de EH Bildu a nivel político. "No vemos esa necesidad del cierre de empresas, no podemos hacer que la economía productiva languidezca y podamos entrar en el 'coma económico", aseveró el pasado domingo en una entrevista en ETB. "Es muy fácil decir que se cierren todas las empresas, es muy fácil decir que se cierre toda la actividad económica y no nos damos cuenta de que, a diario, tenemos que echar mano también de los servicios, de los comercios, de centros de alimentación, de farmacias...", subrayó.
Ante las voces crecientes que reclamaban la paralización de la actividad empresarial, el presidente vasco alertó de que ya la economía va a quedar "muy tocada" por las consecuencias de esta crisis sanitaria sin precedentes. "La economía tiene que seguir porque tiene que seguir habiendo productividad porque, si no, vamos a entrar en una situación en la que se cierra la persiana, pero levantarla de cero cuesta mucho. No puede haber apagón económico", remarcó.
"Hoy el panorama es peor"
La protesta por la imposición del cierre de toda la actividad no esencial la ha verbalizado Urkullu durante su intervención en la reunión con los presidentes autonómicos, en la que ha lamentado que no se haya tenido en cuenta su propuesta de dejar en manos de las comunidades la decisión de qué empresas pueden seguir desarrollando su actividad. "Hoy, el empleo, la economía y el futuro se enfrentan a un panorama peor" ha reprochado el lehendakari a Sánchez, a quien ha recordado que "nuestras empresas van a cerrar mientras las empresas que son sus competidoras están abiertas en Europa y en el resto del mundo".
En su intervención, facilitada por Lehendakaritza, Urkullu ha defendido que la decisión adoptada por el Gobierno "no era la única posible", ya que existían "otras alternativas menos lesivas", como la planteada por carta en la noche del sábado a Sánchez de hacer frente a "una contraproducente aplicación uniforme de las nuevas restricciones" mediante su "adaptación a la realidad sanitaria e industrial de cada comunidad autónoma". Además, desde el punto de vista del calendario, ha defendido que "iniciar una semana más tarde una quincena de mayor limitación de actividades habría tenido un menor impacto en la economía, en la industria y, sobre todo, en la protección del empleo". "Nos habría permitido también evaluar mejor el efecto del confinamiento en su primera fase", ha espetado.
Urkullu interpela a Sánchez por las "medidas complementarias" que va a adoptar para apoyar al sector industrial ante el "grave impacto" del cierre
Dado que la actividad productiva e industrial es "uno de los motores claves del empleo y de la economía de un país", el lehendakari ha interpelado a Sánchez por las "medidas complementarias" que va a adoptar el Gobierno español para "apoyar al sector industrial y compensar el grave impacto en el empleo y en la actividad productiva que va a tener la decisión de cierre adoptada". Según ha trasladado a Sánchez, "es responsabilidad de su Gobierno aportar con inmediatez la máxima claridad en los criterios de aplicación del decreto por sectores de actividad para garantizar que se evita el riesgo más que evidente de confusión e incertidumbre que puede producir".
Dentro del tono crítico de su intervención, Urkullu también ha evidenciado las quejas que ya había trasladado la noche anterior al presidente del Gobierno por carta por las formas de actuar. "Por tercera semana consecutiva, esta vídeo-conferencia tiene un carácter sólo informativo y no deliberativo. Sinceramente, comunicar públicamente, antes de reunirnos decisiones consumadas y no consultadas no es buen método. No lo comparto y espero de su parte un compromiso que corrija esta distorsión. Lo dije el primer día: colaboración y cooperación no es imposición. Sigo actuando desde la responsabilidad y la colaboración. Pero los principios de lealtad deben ser recíprocos", ha advertido.
El lehendakari Iñigo Urkullu pidió anoche por carta al presidente del Gobierno Pedro Sánchez instantes después de que anunciara el cierre de toda la actividad económica no esencial para combatir el avance del coronavirus que la medida no sea obligatoria con carácter general en el conjunto de España, de modo que cada comunidad autónoma pueda concretar qué empresas pueden seguir funcionando por ser “necesarias” y en base a la "especificidad" del territorio.
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