Del 'zasca' entre Alonso y Urkullu por el libro de Rajoy a la refriega por la charla del etarra

Los primeros reproches entre el PP y el lehendakari Iñigo Urkullu en el pleno de control del Parlamento Vasco han llegado en un ambiente distendido a cuenta del libro del expresidente del Gobierno Mariano Rajoy que ha regalado el líder de los populares, Alfonso Alonso, al presidente vasco y que ha derivado en un irónico y mordaz cruce de acusaciones. Pero este tono más relajado ha desaparecido poco después al hilo de la polémica charla del expreso de ETA no arrepentido José Ramón López de Abetxuko en la Universidad del País Vasco (UPV-EHU), que ha dado lugar a recriminaciones mutuas después de que los populares hayan acusado al Urkullu de ponerse de perfil ante esta “infamia” a las víctimas y "no hacer nada" para impedir la celebración de este acto en el campus de Vitoria.

La sesión de control de este viernes ha evidenciado con apenas unos minutos de diferencia esta doble cara de la confrontación dialéctica entre el PP y Urkullu en el hemiciclo. La más sarcástica ha llegado con la interpelación de Alonso al lehendakari por el acuerdo presupuestario alcanzado con Podemos para salvar las últimas cuentas vascas de la legislatura y que ha llegado a las puertas de que este martes el presidente en funciones Pedro Sánchez inicie con Urkullu la ronda de contactos telefónicos con los presidentes autonómicos en medio de las negociaciones para su investidura.

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C. V.

El líder del PP vasco, que no ha sido ajeno a esta cuestión, ha regalado el libro de Rajoy ‘Una España mejor’ (Plaza & Janés) para que lo lea “con atención” durante las Navidades porque, según ha aseverado, habla de la “lealtad”. Alonso ha querido aludir a este valor en el actual escenario político, con Sánchez negociando su investidura con el PNV y ERC, entre otras fuerzas. “El libro habla de una cosa muy importante para mí, que es que habla de la lealtad. Yo quiero que lo lea y reflexione también durante las Navidades”, ha aseverado.

Antes, Alonso había dejado constancia de que las confesiones escritas de Rajoy “quizás no le gusten” al lehendakari por las alusiones directas, pero ha espetado a Urkullu que la obra “habla de anteponer el interés personal a los particulares, habla de un esfuerzo y una creencia real en que se puede mejorar la sociedad y que hay que hacer sacrificios”.

"El libro habla de una cosa muy importante para mí, que es la lealtad. Quiero que lo lea y reflexione durante la Navidad", espeta Alonso al lehendakari

El presidente vasco ha aceptado con una sonrisa el libro desde su escaño antes de darse un apretón de manos con Alonso. Incluso, para darle la réplica, ha subido al estrado con el ejemplar, que no ha dudado en exhibir. “Le agradezco el detalle. Creo, en todo caso, que sin necesidad de leer el libro, mi memoria es mejor que la del señor Rajoy. Lo he demostrado también en tribunas como la del Tribunal Supremo”, ha ironizado.

Se refiere el lehendakari a su comparecencia ante el Supremo durante el juicio del ‘procés’ en el que aportó al tribunal información detallada, fechas incluidas, sobre las conversaciones mantenidas con Rajoy y el entonces presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, durante el desafío soberanista catalán, y que contrasta con la poca concreción y la supuesta falta de memoria que las defensas de los acusados achacaron al exlíder del Ejecutivo español en su intervención en este misma sede.

"Sin necesidad de leer el libro, mi memoria es mejor que la de Rajoy: Lo he demostrado también en tribunas como la del Supremo", replica Urkullu

El regalo del libro ha derivado con posterioridad en el ‘cobro político’ del PP al lehendakari por la polémica conferencia que ofreció el etarra López de Abetxuko el pasado martes en el campus de Vitoria de la UPV-EHU, que se celebró después de que la institución académica y la red de apoyo a los presos de ETA Sare, impulsora de la charla, desoyeran las peticiones de suspensión del acto que formularon los familiares de las dos víctimas del etarra –el comandante del Ejército y jefe de la policía municipal de Vitoria Eugenio Lázaro y el responsable del cuerpo de los Miñones de Álava Jesús Velasco–, colectivos de víctimas, varios partidos y el delegado del Gobierno en el País Vasco.

“Pensaba que usted iba a hacer algo, se iba a oponer al escándalo”, le ha reprochado desde el estrado el parlamentario popular Carmelo Barrio, quien ha denunciado que Urkullu “no activara ningún mecanismo en su mano para impedir el acto de un asesino para hablar de supuestos derechos de los presos, cuando él es incapaz de entender el derecho a la vida”. El dirigente del PP ha sido muy crítico con la actitud del lehendakari, quien debería haber actuado con “más contundencia”, más allá de poner en entredicho el desarrollo del acto desde el punto de vista ético. “¿Por qué no hizo nada para evitar la infamia?”, le ha preguntado. No haber hecho “nada” para impedir la celebración del acto demuestra, según ha censurado, que el Plan de Convivencia y Derechos Humanos del Gobierno vasco en su dimensión universitaria es “una filfa”. “Para defender los derechos humanos y la memoria de las víctimas no sirve para nada. Es papel mojado”, ha denunciado.

En su respuesta, Urkullu ha replicado que es necesario “deslindar el marco legal”, por el cual López de Abetxuko no tiene “restringidos” sus derechos como ciudadano, de la “interpretación ética” del acto, y ha acusado al PP de no "ayudar a mejorar” la convivencia con la utilización de “discursos desmesurados”, cuando, además, “en muchas ocasiones las víctimas han pedido mesura en las declaraciones públicas”. Asimismo, ante las acusaciones recibidas, ha emplazado a Barrio a plantear estos reproches a la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que no se opuso a la celebración de la charla, en la que también participó el abogado de presos y condenado a más de 10 años por integración en el frente de cárceles de ETA Txema Matanzas, al no apreciar indicios de delito.

En relación a la charla, organizada para denunciar la situación que atraviesan los presos de ETA con enfermedades graves, el lehendakari ha compartido “lo esencial” de la denuncia de las víctimas y su “indignación”, ya que “más allá del marco legal se debe mostrar sensibilidad y respeto ante situaciones que hieren a las víctimas”. Además de la legalidad, “debería imperar la sensibilidad humanista”, ha enfatizado Urkullu, que ha justificado que la UPV-EHU permitiese la charla “en virtud de los principios de legalidad y libertad de expresión”.

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Jose Mari Alonso. Vitoria

En todo caso, ha exigido a Sare que acometa una “reflexión” y, del mismo modo que “pide la solidaridad” de la sociedad vasca, muestren una “sensibilidad mínima” y “priorice el punto de vista ético” para que “situaciones de este tipo no se vuelvan a repetir”. En este sentido, ha considerado que la “causa” a favor de los derechos de los presos con enfermedades graves que persigue la red de apoyo a los presos de ETA “no ha avanzado ni un milímetro” con la organización de esta charla y su decisión de mantenerla pese a las numerosas peticiones para su suspensión. “Más bien, todo lo contrario, es posible que haya retrocedido”, ha aseverado Urkullu, quien ha mostrado su “convicción” de que “lo sucedido va a servir para que situaciones como ésta no se repitan”.