Los conductores de los autobuses de Vitoria exigen que se prohíba grabarles con móviles

Los conductores de los autobuses urbanos de Vitoria han reclamado al ayuntamiento que prohíba que los usuarios puedan grabarles con los teléfonos móviles. De este modo, pretenden evitar que se difundan vídeos como el que la pasada semana sacó a la luz una discusión entre una mujer de raza negra y el conductor de un autobús a cuenta de un patinete no plegado y que derivó en un posterior incidente racista que investiga el consistorio, después de que un hombre que viajaba a bordo asegurara que, por su condición de militar, llevaba “20 años matando a gente como tú”, en alusión supuestamente a la mujer.

La petición se recoge en un escrito firmado por el comité de empresa que ha sido remitido al ayuntamiento, que va a analizar ahora la viabilidad legal de esta medida de cara a estudiar su posible implantación, según apuntan fuentes municipales. Los trabajadores de la compañía municipal de autobuses de Vitoria, Tuvisa, denuncian que tras la difusión de este vídeo en las redes sociales se han incrementado la grabaciones con los móviles a los conductores, hasta el punto de llegar a sentirse “acosados” por viajeros en algunos casos.

Las grabaciones a los conductores se han incrementado tras la difusión del vídeo, hasta el punto de llegar a sentirse "acosados" por viajeros

El enfrentamiento entre el chófer y la pasajera que derivó en un incidente de “tintes racistas” que investiga el consistorio fue grabado el pasado miércoles por una pasajera que viajaba en el interior de uno de los autobuses que cubren la línea 7, entre los barrios de Boronbizkarra y Salburua. En el vídeo, que la autora colgó con posterioridad en Instagram, se ve cómo el conductor recrimina a una mujer de origen africano que había accedido al autobús junto a sus dos hijas de corta edad su conducta por negarse a plegar el patinete, tal y como establece la normativa, que obliga a replegar este tipo de artilugios para poder entrar al vehículo.

En medio de una fuerte discusión entre ambos, el chófer espeta a la mujer que no es la primera vez que le advierte de la obligación de tener que plegar el patinete y le dice “mañana no te montas” entre las acusaciones de “racista” por parte de la afectada. La pasajera le traslada que la pequeña que utiliza el patinete tiene “necesidades especiales”, a lo que el conductor responde: “Me da igual que tenga necesidades especiales”. Además, llega a espetar “qué paciencia con ellos”, según se refleja en el vídeo, que presenta varios cortes en sus poco más de dos minutos de duración y en el que aparecen mensajes sobreimpresionados que supuestamente reproducen posteriores insultos y amenazas de pasajeros a la mujer que no se escuchan en la grabación.

El alcalde ha respaldado al conductor, que no mantuvo "un comportamiento xenófobo o racista" a pesar de que "no actuó de la forma más afortunada"

Precisamente, son las amenazas de uno de los pasajeros tras la discusión entre ambos lo que ha suscitado la condena generalizada. “Soy militar y llevo 20 años matando a gente como tú”, se escucha decir a un hombre que viajaba en el autobús en una conducta “intolerable” que el ayuntamiento investiga por “racista” y porque “puede llegar a ser una incitación al odio”.

En todo caso, la conducta del conductor no va a ser sancionada por el ayuntamiento, al considerar que no cometió ninguna infracción. El alcalde, Gorka Urtaran (PNV), le ha respaldado de forma pública tras analizar las imágenes del vídeo, al sostener que “no tuvo un comportamiento de carácter xenófobo o racista” a pesar de admitir que “no actuó de la forma más afortunada”. Según aseguró el día después de los hechos, “todos deben cumplir las normas”, por lo que “el hecho de que un conductor recuerde a una persona usuaria el necesario cumplimiento de la normativa no supone ningún comportamiento xenófobo o racista”. Además, el regidor vitoriano trasladó su “apoyo absoluto” al colectivo de conductores de los autobuses urbanos, que transportan anualmente a 15 millones de personas con “profesionalidad”.

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No obstante, a pesar de este apoyo público, los conductores consideran que la difusión de este tipo de vídeos les puede generar una mala imagen ante los pasajeros, aun cuando se actúa de acuerdo a las directrices dadas por la compañía municipal, por lo que han solicitado que se prohíban las grabaciones en el interior de los autobuses hacia el personal de Tuvisa.

A este respecto, el sindicato LAB ha advertido de que este tipo de incidentes racistas “son por desgracia más habituales cada día”, por lo que ha reclamado al Gobierno municipal que dote a la plantilla de conductores de “herramientas suficientes para hacer de los autobuses un espacio libre de ataques racistas, xenófobos o sexistas”. Según señala, los chóferes carecen de formación y de las herramientas necesarias para “hacer frente” a situaciones como la que refleja el vídeo, que en mensajes sobreimpresionados asegura que el pasajero que amenazó de muerte a la mujer de raza negra profirió igualmente insultos como “vete a tu puto país”, “venís aquí y nos lo quitáis todo” o “inmigrantes de mierda”. Ante esta actitud, la central sindical ha solicitado al ayuntamiento que adopte medidas legales contra esta persona a partir de las imágenes grabadas por la cámara del autobús. “No podemos permitir que en nuestros autobuses se repitan escenas como las vividas la semana pasada por el color de la piel”, asevera.