La coyuntura política sigue impulsando al PP. Aunque sin grandes subidas, Pablo Casado está recabando nuevos apoyos de forma gradual, bebiendo de nuevas fuentes de votos y consolidándose como primera fuerza nacional, mientras el Gobierno de Pedro Sánchez acusa el desgaste de la gestión. Así se desprende de la cuarta oleada del Observatorio Electoral de El Confidencial, que confirma las tendencias apuntadas en las anteriores. La estimación, realizada por IMOP-Insights, muestra una progresión continua de los populares, que estarían seduciendo a más de medio millón de votantes socialistas y arañarían papeletas a Santiago Abascal.
La formación de centro derecha escala hasta el 28% de los sufragios, lo que se traduce en 120 escaños. El PP se aleja aún más del PSOE, que se queda estancado en 101 diputados, en una línea levemente descendente. En la primera oleada de nuestro Observatorio Electoral, la distancia era de apenas cinco asientos, pero esta ha ido creciendo hasta los 19 de ahora y los 2,2 puntos porcentuales.
Casado debe buena parte de este respaldo a la alta fidelidad de sus electores, ya que hasta el 74% de quienes recuerdan haberlo votado en 2019 está dispuesto a repetir. Además, en su frontera derecha, con Vox, hay un intenso tráfico de ida y vuelta que resulta favorable para sus intereses: algo menos de 800.000 votantes del PP se irían ahora hacia los de Abascal, pero en torno a 850.000 de Vox harían el camino inverso. En cifras netas, Génova vería llegar casi 75.000 nuevos votos de este entorno.
Los populares comienzan a atraer a un número significativo de apoyos que en su día fueron hacia Pedro Sánchez
Pero donde hay nuevos flujos y de gran relevancia es por el centro. Concretamente, desde las filas socialistas. Los populares comienzan a atraer a un número significativo de apoyos que en su día fueron hacia Pedro Sánchez. Los datos recogidos para este Observatorio elevan hasta los 570.000 los antiguos electores del partido del Gobierno que se muestran proclives a Casado. En sentido opuesto, apenas hay 85.000 sufragios del PP que se aproximarían al PSOE. Es decir, el saldo neto sería positivo para el popular en unas 485.000 papeletas. Otra fuente de votos, aunque más previsible, es la de Ciudadanos. El partido de Inés Arrimadas se desangraría a su derecha y vería huir hacia el PP otro medio millón de electores.
Y si la primera fuerza de la oposición parece apuntalarse como la favorita de los españoles, en la izquierda el PSOE consigue contener su caída respecto a las ediciones previas, aunque lejos del 28% obtenido el 10 de noviembre de 2019. Ahora estaría en el 25,8%. La contención se debe, igualmente, a esa fidelidad de sus electores, que se situaría en el 69%. Por su frontera con Unidas Podemos estaría, asimismo, saliendo favorecido con un saldo neto positivo de 200.000 votos. El gran riesgo para los socialistas, pero también su gran esperanza, es que en estos momentos su electorado se encuentra desmovilizado, por lo que buena parte de sus esfuerzos pasarán por activarlo de aquí al próximo paso por las urnas. Los datos recopilados por IMOP muestran que el 15% de sus votantes de 2019 está ahora en la indecisión o en la abstención.
La derecha sigue rozando la mayoría absoluta, pero perdería un diputado respecto a hace dos semanas
Por bloques, la derecha sigue en el entorno de la mayoría absoluta, pero perdería un diputado respecto a hace dos semanas. Si bien es cierto que el PP suma cinco nuevas actas, Vox perdería seis, pasando de 58 a 52. Los de Abascal, unidos a los 120 de Casado, los dos que obtendría Navarra Suma y el solitario escaño de Ciudadanos, acercarían una hipotética investidura popular al poder llegar a los 175 votos favorables, lo que haría imprescindible un apoyo extra.
Según esta última oleada, Abascal mantendría sus actuales 52 sillones con el 15,8% del voto, lo que implica una caída de 0,9 décimas y los citados seis escaños respecto a la oleada anterior. Es un leve frenazo en la línea ascendente que el partido mostraba en los últimos meses, favoreciendo con ello las expectativas del PP. Cs, por su parte, se sitúa en el 2,6%, lo que le permite conservar a duras penas un único escaño en Madrid, pero podría perderlo si se diera una leve pérdida de apoyo. La formación de Arrimadas solo conserva el 38% de sus votantes de 2019: el 62% restante es una diáspora que va a parar principalmente al PP, pero también a Vox, a la abstención y un pequeño porcentaje al PSOE.
Las tres fuerzas de ámbito nacional de la derecha y el centro derecha (PP, Vox y Cs) suman en esta edición el 46,4% del voto frente al 39,6% de la izquierda (PSOE, Unidas Podemos y Más País). La distancia entre los bloques, que empataron en 2019, sería ya de 6,8 puntos, mostrando una tendencia sostenida favorable a la derecha.
En la izquierda, el PSOE retrocede al citado 25,8%. Si bien conserva los mismos escaños (101) que en la oleada anterior, perdería 19 asientos en el Congreso respecto a los que tiene actualmente. Unidas Podemos se haría con 28 escaños (siete menos que en 2019) y Más País pasaría de dos a tres diputados, todos ellos en Madrid. La suma de la izquierda alcanzaría 132 escaños, lo que deja a Sánchez muy lejos de la investidura. En el ámbito de los morados, está por ver si tiene algún efecto en las estimaciones el esperado 'efecto Yolanda Díaz', una vez que la vicepresidenta segunda ha dado señas unívocas de que liderará un nuevo proyecto a la izquierda de los socialistas.
Las fuerzas políticas de ámbito autonómico, nacionalistas y regionalistas, se mantienen estables. Los datos del Observatorio Electoral de El Confidencial reflejan una clara tendencia al alza del BNG, que ya estaría en condiciones de obtener tres escaños (ahora tiene uno), mientras los nacionalistas canarios solo conservarían uno de sus dos diputados. En Cataluña, ERC mantendría sus 13 asientos, por los ocho de Junts; y en País Vasco, el PNV arañaría uno más, llegando a los siete, y por encima de un EH Bildu que aguanta en sus cinco.
En todo caso, el actual mapa electoral no resuelve el problema de la inestabilidad política. Con un Congreso de los Diputados como el que muestran estas estimaciones aumentaría la fragmentación política, cualquier mayoría de gobierno sería precaria y se mantendría la polarización entre los bloques. Todo, a la espera de que las nuevas plataformas de la España Vaciada entren en acción y se sumen a un reparto de diputados que podría agudizar más aún esta coyuntura.
Ficha técnica
Universo
Personas de 18 años y más censadas y con derecho a voto en las elecciones generales.
Diseño muestral
Aleatorio estratificado proporcional por CCAA y por tamaño de municipio.
Teléfono fijo:
- Selección aleatoria del hogar dentro de cada estrato.
- Selección del individuo con control de cuotas de sexo y edad retroalimentadas por el sistema, con aplazamiento y rellamada.
Teléfono móvil:
- Selección aleatoria simple de la base de datos de teléfonos móviles generada automáticamente por IMOP Insights a partir de los inicios asignados a cada operador móvil.
Margen de error de un muestreo
Para el total muestral no segmentado, ±2,8 puntos porcentuales para p=q=50 % y nivel de significación del 95%, siempre en el supuesto de un muestreo aleatorio simple.
Fechas de campo
Del 11 de octubre al 22 de octubre de 2021.
Tamaño muestral
1.338 entrevistas.
Técnica de entrevista
Telefónica asistida por ordenador mediante el sistema CATI. Un 50% de las entrevistas se realizaron a individuos localizados a través de teléfono móvil.
Equilibrio
Con el fin de minimizar posibles errores de campo y ajustar los datos al universo, el fichero se ha sometido a un equilibraje a partir de las siguientes matrices: sexo x edad x CCAA; tamaño de municipio x CCAA y equipamiento telefónico en el hogar.
Instituto responsable de la investigación
IMOP Insights, S.A.
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