Los Bomberos de Alcalá de Henares cumplen medio siglo con más de 100.000 intervenciones
El primer Cuerpo que prestó servicio fue municipal y se creó en 1975. En 1998 se integró en el regional, y a día de hoy son 83 los bomberos que forman este Parque
En Alcalá de Henares, aquel 1 de agosto de 1974 comenzó a las 8.30 horas. Un incendio en los talleres penitenciarios de la cárcel que ocupaba el antiguo Colegio de Santo Tomás, actual Parador, terminó con la vida de 12 reclusos y del maestro de carpintería. Aquello fue lo que impulsó la creación del Cuerpo de Bomberos en la localidad complutense un año después, que ahora cumple medio siglo. A día de hoy, el Parque número 22 de la Comunidad de Madrid da servicio a 17 municipios, 300.000 personas y unos 579 kilómetros cuadrados.
Sucedió en la primavera de aquel convulso e histórico 1975. Por primera vez, la ciudad que vio nacer a Cervantes tenía a su disposición un Parque de Bomberos, por el momento municipal, que atendía cualquier emergencia las 24 horas del día, los 365 días del año. La primera plantilla la compusieron 19 personas y tres vehículos. Actualmente, el Parque alcalaíno alberga a 83 bomberos y seis vehículos pesados y dos ligeros de intervención, y otros tres de apoyo para el transporte de personal, tal y como explica Aurelio Ambite, bombero en el parque desde 1989 y actual coordinador de los actos por la efeméride de los 50 años.
Tras pasar en un primer momento por las dependencias en las que se ubicaban los talleres y cuadras del Ayuntamiento, en el terreno aledaño al antiguo Hospital de Santa María la Rica, el Parque se trasladó en 1977 a la calle Santander, en el barrio de El Val. En él se congregaban los bomberos municipales con aquellos procedentes del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamentos, creado por la antigua Diputación Provincial de Madrid. "Uno de los mayores hitos de esos años fue la adquisición de la primera autoescala en 1983, un vehículo maravilloso que llegaba a los 30 metros de altura con todos los avances técnicos", rememora Ambite.
No fue hasta 1995 cuando el Consistorio complutense y la Comunidad de Madrid firmaron un Convenio de Prestación Conjunta para aumentar la eficiencia del servicio. Apenas tres años más tarde, la Administración regional se hizo con el control absoluto del Parque de Bomberos alcalaíno, por lo que el Cuerpo Municipal desapareció en 1998. El Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid, de esta manera, recibió al personal municipal de Alcalá, así como sus vehículos y materiales.
Las intervenciones que nunca se olvidan
Mucho ha cambiado desde entonces. También la ubicación del actual Parque de Bomberos, inaugurado en 2005 y situado en el polígono industrial Santa Rosa, cercano al barrio de La Garena. "No hay registro exacto de los primeros años, pero en todo este tiempo habremos superado las 100.000 intervenciones", detalla Ambite. Al menos, 2.464 se produjeron en 2024.
En la retina quedan algunas de ellas, tanto con final trágico como desenlace feliz. En el capítulo de las primeras, este bombero veterano señala el rescate de una joven de 17 años en el río Henares. Sucedió el 17 de agosto de 1985 y se llamaba Montserrat Colorado Patiño. Más allá del desgarrador desenlace, la situación se tornó todavía más dolorosa cuando los bomberos que prestaron el servicio se percataron de que el cuerpo de la joven que rescataron de las aguas del río era el de la hija de un compañero, también bombero.
El Cuerpo de Bomberos alcalaíno, por contra, atesora en su historia algunos pasajes más gratificantes. Dos días después de la Navidad de 1980, los Bomberos y la Policía salvaron la vida a dos niños de tres y seis años tras un incendio declarado en la calle Francisco de Huerta y Vega, en el quinto piso, donde dormían los pequeños. Tras ser rescatados de entre las llamas, les atendieron en el Sanatorio Vallés, donde les realizaron las asistencias más urgentes para luego derivarles a Madrid de cara a una mejor atención.
Ambite recalca que las intervenciones más duras son aquellas en las que hay niños y niñas pequeñas entre las víctimas. "Hace menos de 10 años actuamos en un accidente de tráfico en el que falleció un bebé, un lactante. Los sanitarios llegaron en helicóptero, pero no pudieron reanimarlo", recuerda.
Un bombero orgulloso
Germán Castro, también coordinador de los actos por el 50 aniversario de los bomberos en Alcalá, se felicita por algunas casualidades: "Llevo 22 años como bombero, y el de Alcalá es el Parque 22 de la Comunidad. Aquí cumplo ahora dos décadas, justo cuando se celebran las cinco décadas de la existencia del servicio". "Sé que somos una profesión muy valorada, pero también debemos ser conscientes de que de nuestra formación y forma de actuar depende muchas veces el que una vida se pueda salvar", precisa.
Asimismo, incide en la "pequeña familia" que se crea junto a los compañeros del Parque, con los que pasan jornadas de 24 horas antes de descansar las cinco siguientes. "Es un orgullo formar parte de este Cuerpo en Madrid, uno de los mejores de España, y sobre todo hacerlo en Alcalá, donde hay un gran bagaje de intervenciones bastante grandes", reconoce.
Preguntado por aquellos avisos que terminaron bien, Castro cita lo ocurrido el año pasado en la céntrica calle Mayor de Alcalá, donde se incendió un edificio que hacía esquina con la calle Carmen Calzado. "Salvamos la vida de dos personas y cuatro animales, y eso crea una satisfacción insuperable", apunta. Algo parecido dice que sucede cuando llegan rápido a un accidente de tráfico y pueden sacar a la víctima del vehículo a la mayor premura.
En la otra cara de la moneda están aquellos en los que, como ha resaltado Ambite, se ven involucrados menores. Todavía recuerda una explosión que sucedió en la zona de Reyes Católicos: "Explotó una bombona de butano. Cuando entramos a la casa, nos encontramos a un niño de unos cinco años cogido de la mano de su padre, que estaba completamente desmayado y abrasado".
Una efeméride que no pasa desapercibida
Estos 50 años de la presencia de los bomberos en Alcalá ha dejado, y dejará, un rastro tras de sí cargado de actos y actividades. Por lo pronto, el Ayuntamiento complutense les brindó una rotonda cercana al Parque, así como la oportunidad de ser los pregoneros de las Ferias y Fiestas de la ciudad, cita que aprovecharon para desplegar un cartel de grandes dimensiones felicitando las fiestas mientras se descolgaban de la torre de Santa María.
El mismo Parque de Bomberos alberga una de las imágenes que marcarán esta efeméride. Se trata de un gran mural realizado por Sfhir que ya ha ganado un reconocimiento a nivel mundial. También han expuesto los vehículos históricos que guardan, inmersos ahora en la fase final de la restauración. Asimismo, del 21 de octubre al 2 de noviembre, la sala de exposiciones Santa María la Rica acogerá una muestra que cuenta la historia de los bomberos alcalaínos, así como diversos materiales.
Unos días más tarde, el 26 de octubre, las calles del centro de Alcalá verán pasar corriendo a numerosos bomberos, pues la ciudad complutense acogerá la carrera memorial por los bomberos fallecidos, que también será popular. "La prueba pasará por las ubicaciones que a lo largo de la historia ha tenido el Cuerpo de Bomberos en la ciudad", apunta Ambite.
Castro, por su parte, añade que el 21 de noviembre celebrará un acto plagado de honores en el Teatro Salón Cervantes, en el que se reconocerán los bomberos jubilados durante el último año y se compartirán las intervenciones más relevantes del Parque.
En Alcalá de Henares, aquel 1 de agosto de 1974 comenzó a las 8.30 horas. Un incendio en los talleres penitenciarios de la cárcel que ocupaba el antiguo Colegio de Santo Tomás, actual Parador, terminó con la vida de 12 reclusos y del maestro de carpintería. Aquello fue lo que impulsó la creación del Cuerpo de Bomberos en la localidad complutense un año después, que ahora cumple medio siglo. A día de hoy, el Parque número 22 de la Comunidad de Madrid da servicio a 17 municipios, 300.000 personas y unos 579 kilómetros cuadrados.