Gema, de Gran Vía a Getafe... a pie: "Al final yo creo que avanzaba por pura rabia"
El gran apagón ha dejado miles de historias, muchas de ellas relacionadas con la vuelta del trabajo a pie
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Ayer, debido al apagón eléctrico y el consecuente colapso del transporte, miles de personas por toda España se vieron obligados a cubrir el trayecto entre el trabajo y su casa a pie. La mayoría fueron desplazamientos urbanos, pero algunos, como es el caso de la periodista madrileña Gema J. Maldonado, obligaron a los ciudadanos a caminar más de 15 kilómetros por el arcén de la autopista.
Maldonado es productora del popular podcast Estirando el chicle, estaba trabajando en la sede de la Cadena Ser, en la céntrica Gran Vía, cuando se fue la luz. "Sacaron un generador y nos pidieron a la gente que no trabajamos para el directo que desconectásemos los ordenadores, así que después de comer me fui a casa", explica la periodista.
Su plan pasaba por ir hasta Plaza Elíptica en autobús y de ahí coger otro interurbano hasta su casa, en la localidad de Getafe, a 15 kilómetros del centro de Madrid. Eran las 16:20 cuando salió de la redacción. "A las 16:45 llegué a Cibeles para coger mi autobús. Me asusté de la de gente que había, que prácticamente daba la vuelta al edificio del Ayuntamiento. Entonces le pregunté a un trabajador de la EMT si mi autobús estaba en funcionamiento y me dijo que sí, pero que me recomendaba ir andando. Le respondí, riéndome: '¿A Getafe me voy a ir andando?' Spoiler: SÍ".
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Descartada la vía Cibeles, Gema activó su plan B: ir andando hasta Plaza Elíptica. Casi 5 kilómetros callejeando por la ciudad sin GPS: "Antes de bajar de la redacción me hice un pantallazo del camino, pero no me hizo mucha falta, había riadas de personas caminando hacia allí. Todo el mundo que normalmente va en el metro, ayer estaba en la superficie, imagínate", continúa.
A las 18:30 llegó a Plaza Elíptica, donde se encontró una situación dantesca. Cientos de personas agolpadas en la puerta del intercambiador y unos policías acordonando la entrada. "No dejaban entrar a nadie. Los policías gritaban '¡autobús a Toledo!' y entraban unas pocas personas. La gente estaba muy nerviosa", recuerda. A la media hora, los agentes anunciaron la llegada del 442, que va de Plaza Elíptica a la estación de Juan de la Cierva, en Toledo.
"Entré y por primera vez me sentí tranquila. La estación estaba completamente vacía. Ya sabía que estaba a un solo bus de llegar a casa. Me puse en la cola y, a los diez minutos, un policía entró pidiendo que saliésemos de la estación, que ya no iba a salir ningún autobús más. Desesperada, le pregunté que cómo iba a llegar a casa, a lo que el agente me respondió: 'No lo sé, señorita, yo soy solo un policía'".
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De modo que Maldonado se echó a caminar por la A-42 sin pensárselo: "Nunca se me habría ocurrido caminar por el arcén, pero en ese momento estaba muy cansada y tenía muchísima rabia", explica. "Íbamos un montón de personas en fila de a uno y nos pasaban los coches al lado, fue muy peligroso. Todo el rato pensaba: 'Si mi madre me ve hacer esto, me mata'". Fueron once kilómetros de caminata acortados justo al final cuando, entrando en Getafe, volvió a tener internet y pudo comunicarse con su pareja. "Sobre las 20:20 me llegaron un montón de whatsapps y mi pareja me vino a buscar a las afueras de Getafe. Fue una odisea terrible, pero al final no pasó nada más allá de que me quemé un poco la cara", zanja la periodista.
Ayer, debido al apagón eléctrico y el consecuente colapso del transporte, miles de personas por toda España se vieron obligados a cubrir el trayecto entre el trabajo y su casa a pie. La mayoría fueron desplazamientos urbanos, pero algunos, como es el caso de la periodista madrileña Gema J. Maldonado, obligaron a los ciudadanos a caminar más de 15 kilómetros por el arcén de la autopista.