Huelga de basuras en Madrid: consulta si tu barrio es uno de los más afectados

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Los efectos de la huelga de recogida de residuos se hacen cada vez más visibles en numerosos puntos de la ciudad, donde la acumulación de basura empieza a generar problemas de salubridad. Desde el Ayuntamiento de Madrid se han establecido servicios mínimos del 50% con una recogida alterna en los diferentes distritos, que obliga a los vecinos a consultar qué días corresponde sacar la basura según su zona.

El plan municipal divide los distritos en dos bloques. Por un lado, Centro, Arganzuela, Salamanca, Chamartín, Fuencarral-El Pardo, Chamberí, Moncloa-Aravaca, Carabanchel, Usera, Ciudad Lineal, Vicálvaro y San Blas-Canillejas tendrán recogida el martes 22, jueves 24, sábado 26 y lunes 28 de abril. Por otro, la recogida está prevista para el miércoles 23, viernes 25 y domingo 27 en Retiro, Tetuán, Hortaleza, Moratalaz, Puente de Vallecas, Villaverde, Latina, Villa de Vallecas y Barajas. En todos los casos, se ruega sacar los residuos la noche anterior al día asignado.

Contenedores desbordados y servicios en conflicto

Las imágenes de calles como Orense o Plaza Mayor o barrios como Carabanchel muestran el problema, con montañas de basura acumulada. Solo se está asegurando el servicio de recogida en distritos como Centro, Salamanca, Chamartín, Chamberí, Carabanchel, Usera o San Blas-Canillejas, mientras que el resto de la capital permanece saturado por la acumulación de residuos, según información facilitada por el propio Ayuntamiento.

Desde el consistorio se ha acusado a las empresas concesionarias de incumplir los servicios mínimos y se han anunciado posibles sanciones si la situación persiste. Además, el Servicio de Limpieza Urgente se ha negado a actuar, en solidaridad con los huelguistas, lo que ha agravado la acumulación de residuos.

El conflicto responde al estancamiento de las negociaciones entre las compañías encargadas del servicio —FCC, Valoriza, Acciona, OHLA, PreZero y Urbaser— y los sindicatos. El preacuerdo inicial fue rechazado por la plantilla al considerar que no incluía mejoras reales. Mientras tanto, hospitales, centros escolares, residencias y mercados mantienen su recogida habitual, y los servicios de papel, cartón y vidrio tampoco se han visto afectados, al menos en teoría.