Madrid presiona al Gobierno para eliminar el IVA de los alimentos básicos a familias vulnerables

La Comunidad de Madrid presiona ya para que el Gobierno central elimine el IVA de los alimentos básicos a las familias vulnerables. La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, ha enviado una carta a los ministros Yolanda Díaz y Pablo Bustinduy para recuperar esta protección en las compras realizadas con la tarjeta monedero para estas personas, tras su desaparición el pasado 31 de diciembre. "A pesar de los esfuerzos anunciados por el Gobierno de España bajo el denominado "escudo social", la realidad muestra una clara falta de medidas efectivas frente a la pobreza material", dice la misiva.

El punto de partida es que con el cambio de año finalizó la reducción del IVA para estos productos. Y que desde la creación de estas tarjetas, en 2021, los precios se han disparado significativamente, en torno a un 30% según sus cálculos. El Ejecutivo autonómico considera que las medidas activas ahora no son suficientes y por eso apela a Díaz, como vicepresidenta, y a Bustinduy, como titular de Derechos Sociales.

La carta, enviada este jueves, expone la "preocupación" de la Administración regional y alerta de la situación de urgencia. "En la Comunidad de Madrid, hemos habilitado una línea de alimentos en el IRPF por 7 millones de euros para que nadie se quede atrás. Sin embargo, es necesario que el Gobierno de España actúe con mayor coherencia y urgencia. Por ello, reitero una vez más nuestra solicitud de eliminar el IVA en los productos adquiridos con la tarjeta de alimentos. Esta medida aliviaría enormemente a las familias vulnerables, permitiendo que los recursos se destinen a lo esencial", dice el escrito.

La Consejería sostiene que la recaudación de IVA en este caso es "injusta" y por eso insta a una actuación inmediata de los dos ministros, de la cuota de Sumar en el Ejecutivo de Pedro Sánchez. "Ministros, si el Gobierno quiere ayudar realmente a las familias más necesitadas, deben actuar sin más demoras. Esperamos contar con su apoyo para implementar esta medida, lo cual sería fundamental para mejorar la situación de las familias más desfavorecidas y ofrecerles un verdadero 'escudo social'", añade.

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M.M.V.

La tarjeta monedero, como informó El Confidencial, comenzó entre dudas. Comunidades autónomas de todo signo político y entidades sociales alertaron de las lagunas del sistema de asistencia, habida cuenta de la falta de información sobre su funcionamiento y su incapacidad para cubrir todas las necesidades. El Banco de Alimentos, por ejemplo, advirtió de que había un riesgo real de que muchas personas se quedan fuera de esta ayuda, entre ellas las unidades familiares sin menores a su cargo. La entidad cifró el problema en más de 350.000 personas fuera del sistema.

La carta enviada por Dávila insiste en esta cuestión y afea al Ministerio de Políticas Sociales su labor. "El sistema de tarjeta de alimentos del Gobierno ha dejado a miles de personas sin acceso a productos básicos, obligando a las Comunidades Autónomas a cubrir las deficiencias de una gestión centralizada negligente, que a partir de este año nos tocará, una vez más, revertir. Los Bancos de Alimentos, que siguen atendiendo al 80% de las personas que requieren de este apoyo, aseguran estar ya al borde del colapso por falta de recursos", subraya Dávila.

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Ignacio S. Calleja

La Comunidad de Madrid abre un nuevo frente a Sánchez en un asunto delicado y capital para el segundo partido del Gobierno, intentando ampliar la grieta entre el PSOE y Sumar a cuenta de la tributación del SMI.

"Le recuerdo que, desde que asumió el Gobierno Pedro Sánchez, la pobreza con carencia material severa ha casi duplicado su tasa en España, pasando del 4,7% al 8,9% según el INE, un dato alarmante que representa el peor registro en 20 años y un nuevo récord histórico. A día de hoy, casi el 40% de las familias no puede afrontar gastos extraordinarios, y un 20% no puede mantener su vivienda a una temperatura adecuada. Es más, España tiene la tasa de pobreza infantil más alta de la UE, solo por detrás de Rumanía, lo que evidencia que las políticas sociales no son suficientes", señala.