El cambio radical que va a sufrir pronto la línea 6 de Metro de Madrid: afectará a miles de personas

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La línea 6 de Metro de Madrid, conocida por su característico recorrido circular, va a experimentar una transformación que impactará de manera significativa a los más de 400.000 pasajeros que la utilizan a diario. A partir de 2027, la línea circular de 23,5 kilómetros y 28 estaciones será la primera en la red de la capital en operar de forma completamente automatizada, sin conductor, lo que supone un avance tecnológico sin precedentes.

Este cambio radical se va a llevar a cabo gracias a un acuerdo estratégico entre Metro de Madrid y Alstom España, empresa encargada de implementar la modernización de la señalización y los sistemas de control de la línea. El contrato incluye la actualización del sistema de control basado en comunicaciones (CBTC), que permitirá pasar del sistema GoA 2 (conductor presente) al GoA 4, completamente automatizado, sin la necesidad de personal al mando del tren.

Esta nueva tecnología está ya en funcionamiento en otros países como Francia, Brasil y China, y promete revolucionar el transporte público madrileño. La instalación de un sistema de Supervisión Automática de Trenes (ATS) también garantizará un control más preciso y eficaz de los convoyes, mejorando la seguridad y la fiabilidad del servicio.

Según Alstom, este avance permitirá aumentar la capacidad de la línea, reducir el consumo energético y mejorar la eficiencia operativa. El tren sin conductor no solo significará una mayor seguridad, sino que también permitirá un incremento significativo de la frecuencia de los trenes, con intervalos de solo dos minutos.

Además de la automatización, la flota de la línea 6 contará con trenes semiautomáticos de última generación, sin cabina de conductor, lo que proporcionará un cristal panorámico en la cabecera para que los viajeros puedan disfrutar de vistas sin obstáculos mientras recorren el túnel.

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Estos trenes, que comenzarán a circular en 2027, estarán equipados con seis coches, pasillos interconectados y un diseño más espacioso, permitiendo aumentar la capacidad de transporte en un 17%. De 1.200 pasajeros actuales, se pasará a un total de 1.385, lo que reducirá las aglomeraciones y mejorará la comodidad durante los viajes.

Los nuevos convoyes también serán más rápidos. Gracias a mejoras en la cadena de tracción, la velocidad media se incrementará en un 33%, lo que permitirá que los trenes sean más ágiles y realicen su trayecto en menos tiempo.

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Esta mejora se traduce no solo en un servicio más rápido, sino también en un ahorro energético de hasta el 20%, gracias a la nueva tecnología que optimiza el consumo de electricidad. Estos trenes estarán fabricados con materiales reciclables, un detalle que refuerza el compromiso con la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente.

Con una previsión de inicio de operaciones para 2027, la automatización de la línea 6 de Metro de Madrid será un cambio radical tanto para los usuarios como para la red de transporte público de la ciudad. La tecnología de vanguardia no solo transformará la forma en que viajamos, sino que también contribuirá a una red de transporte más eficiente, más moderna y más sostenible, capaz de hacer frente al reto de una ciudad en constante crecimiento y evolución.

El paso a una operación sin conductor también supondrá un desafío en términos de adaptación para los pasajeros, que deberán acostumbrarse a un nuevo tipo de tren y a los cambios que acompañan a la automatización. No obstante, se espera que la mejora en la frecuencia y la reducción de tiempos de espera sean un aliciente para que los viajeros valoren estos cambios.