La escapada a una hora de Madrid donde visitar un yacimiento con un megalito de 5 metros de altura que es BIC

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Una experiencia diferente te espera a tan solo una hora de Madrid, donde la historia y la cultura se entrelazan con el paisaje. Por solo 15 euros, los visitantes podrán disfrutar de un plan que combina la visita a un destacado yacimiento arqueológico y una inmersión en la tradición vinícola local, una propuesta que promete sorprender a todos los públicos.

Ubicado en el municipio de Cenicientos, el yacimiento de Piedra Escrita alberga un impresionante monolito de cinco metros de altura declarado Bien de Interés Cultural en la categoría de zona arqueológica. Este altar rupestre, dedicado en su origen a la diosa Diana, destaca por su importancia histórica, artística y paisajística. Además, la finca en la que se encuentra es de propiedad privada, por lo que es importante tenerlo en cuenta antes de realizar esta ruta por cuenta propia.

Este monumental vestigio romano se encuentra en un paraje que ha sido testigo del paso de culturas prerromanas, romanas y medievales. Su relieve, que representa una escena de sacrificio a la diosa Diana, junto con inscripciones adaptadas en la Edad Media, refleja el sincretismo cultural que caracteriza al lugar. Estas representaciones hacen de Piedra Escrita un testimonio único de cómo las civilizaciones han interactuado con su entorno.

El yacimiento no solo destaca por su valor arqueológico, sino también por el entorno que lo rodea. La región conserva elementos históricos como un posible puente romano cercano y restos cerámicos que evidencian un poblamiento continuado a lo largo de los siglos. Este conjunto histórico se encuentra en un enclave estratégico donde convergían antiguas provincias romanas.

Además del recorrido por el yacimiento, este plan incluye una visita a la Bodega San Esteban Protomártir, donde los asistentes podrán degustar cinco vinos selectos con denominación de origen, acompañados de un aperitivo. Los viñedos y la bodega ofrecen una experiencia que combina el disfrute de los sentidos con una conexión directa a las tradiciones locales.

Los niños también pueden participar de esta experiencia de manera gratuita, con la posibilidad de disfrutar de mosto durante la cata. Este plan es ideal para familias o grupos de amigos que deseen desconectar y adentrarse en la riqueza histórica y cultural de la Comunidad de Madrid.