La nueva discoteca procedente de Medellín que revolucionará la noche en Madrid: Bad Bunny y Karol G le dedican sus canciones

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Una experiencia de perreo y reguetón que ha marcado tendencia en América Latina está a punto de abrir sus puertas en el corazón de Madrid. Desde su nacimiento en Medellín, este espacio ha trascendido las fronteras, ganándose un lugar en la cultura urbana de ciudades como Miami y, ahora, la capital española. Lo que promete esta nueva apertura en Europa es único en su estilo.

Será en el barrio de Salamanca donde Perro Negro, la famosa discoteca colombiana, debutará en suelo europeo el próximo 14 de noviembre. Este lugar, definido por sus creadores como el “templo del reguetón”, traerá a Madrid su ambiente oscuro, clandestino y cargado de una esencia que busca revivir la experiencia de baile sin pretensiones. No es casualidad que Bad Bunny, en su tema con Feid, mencione el nombre del club en un verso que se ha hecho viral: “Vi que te dejaste de tu novio, baby, me alegro. Vamo’ a celebrarlo en Perro Negro”, consolidando a esta discoteca como un punto de referencia en el reguetón actual.

Además de Bad Bunny, otros grandes nombres del género como Karol G y J Balvin han contribuido a que Perro Negro se posicione en la cima del ocio nocturno dedicado al reguetón. Karol G incluso bautizó uno de sus éxitos con el nombre de Provenza, en honor a la calle en Medellín donde se encuentra este icónico lugar, un gesto que ha reforzado el vínculo entre la discoteca y los principales exponentes de la música urbana.

Los preparativos para la inauguración incluyen cuatro noches consecutivas de fiesta, que se extenderán hasta el 17 de noviembre, con invitados especiales y figuras destacadas del ámbito musical y cultural. Samuel Granados, cofundador de Perro Negro, promete una experiencia que transportará a los asistentes al ambiente que ha hecho de esta discoteca un icono en Medellín.

La inversión para el local en Madrid asciende a 5 millones de euros, y su ubicación entre las calles Don Ramón de la Cruz y Velázquez está diseñada para reflejar la estética original: un sótano de techos bajos, sin carteles luminosos y con varias entradas discretas. Este ambiente íntimo y oscuro invita a sumergirse en una atmósfera donde se celebran los orígenes del reguetón, sin importar quién esté presente en la pista de baile.

Además de los eventos exclusivos, la discoteca también generará alrededor de 150 empleos directos e indirectos, priorizando la contratación de personal latinoamericano como un guiño a sus raíces. La apertura de Perro Negro en Madrid marca un paso importante en la expansión de esta marca, que ya ha conquistado la escena de ciudades icónicas en Estados Unidos y Latinoamérica.