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Las citas para la DGT en Madrid entran en el mercado negro (y las de asilo, para el NIE...)
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Las citas para la DGT en Madrid entran en el mercado negro (y las de asilo, para el NIE...)

Los inmigrantes se ven obligados a pagar más de 60 euros para obtener la licencia de conducción. Cuando se publican las citas en la web solo duran unos segundos antes de ser copadas por profesionales

Foto: Oficina de Empleo en Madrid que exige cita previa para realizar los trámites. (Europa Press/Jesús Hellín)
Oficina de Empleo en Madrid que exige cita previa para realizar los trámites. (Europa Press/Jesús Hellín)

Algo que debería ser un simple trámite, conseguir una cita de la administración, se ha convertido en un negocio. El mercado negro se extiende a más de una docena de trámites, desde renovar el carné de conducir a pedir asilo. "Llevo más de seis meses tratando de conseguir una cita para cambiar la licencia de conducir de la colombiana a la española, pero ha sido imposible en Madrid", dice Valeria, de 32 años.

A Valeria le han recomendado buscar la cita en otras ciudades o provincias, pero ni así ha sido posible. "La página web para hacerlo no es clara y me urge tenerlo porque llevo bastante tiempo en la ciudad y quiero conocer nuevos lugares a los que no puedo llegar en transporte público", afirma la colombiana.

Finalmente, en un grupo de colombianos en Madrid le han recomendado comprar la reserva de hora. Al principio, no entendía cómo era posible comprar una cita para un trámite en la administración. Después de escuchar los testimonios de algunos de sus compatriotas, se lo está pensando.

Luis también está en este grupo de colombianos. Fue quien le facilitó el contacto a Valeria para que pudiera conseguir su cita. "Los profesionales saben a la hora que salen y las cogen todas", explica, y confiesa que ante la desesperación ha decidido pagarles.

Foto:  Opinión
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Luis escribió a un número de WhatsApp que ofrecía los siguientes servicios en cualquier provincia y en 24 horas: renovación de asilo, toma de huellas, solicitud de regresos, carta de invitación y certificado de concordancia. "Tengo todas las citas disponibles", reza el estado de su red social.

El profesional en conseguir estas citas cobra 60 euros por el trámite. El pago hay que hacerlo por adelantado. Así fue la conversación:

—Hola, ¿tienes citas para la DGT?
—¿Provincia? Necesito el NIE, nombre, dos fotos y foto de licencia.
—¿Cuánto cuesta?
—60 euros a este número de cuenta.

A las dos semanas, el profesional se volvió a poner en contacto con Luis para darle su cita en Madrid. "Tenía que pagarle a un número de un banco en Alemania, y eso no me dio confianza, así que decidí no pagarle", cuenta. Este negocio clandestino no ha hecho más que aumentar en los últimos años, ya que las administraciones no dan abasto.

Los precios están ahora disparados, sobre todo en provincias como Madrid y Barcelona, donde hay más peticiones. Otra persona que se dedica a la venta de estas citas explica: "Si el cliente tiene disponibilidad para ir a cualquier provincia, puede ser más rápido de conseguir, pero por ejemplo en Madrid la primera cita que tengo disponible es en octubre", dice.

Foto: Colas en el punto de vacunación de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia. (EFE/Juan Carlos Cárdenas)

"Conseguir una cita para la DGT en Madrid, Toledo, Ávila, Segovia, Cuenca y Guadalajara es lo más difícil", explica. Todos los madrileños que no consiguen hora en la capital han optado por ir a provincias cercanas.

Por el contrario, los lugares más fáciles, según este profesional, son Baleares y Canarias. "El resto es una cuestión de suerte", afirma, y dice orgulloso que ha conseguido para este mes citas en A Coruña.

Muchos de los trámites para los españoles en la DGT se pueden hacer a través de su página web. Sin embargo, otro tipo de trámites solo se pueden hacer solicitando una cita previa. Es lo que sucede con el que tienen que realizar los ciudadanos extranjeros residentes en España para obtener el carné de conducir. La única condición que pone el profesional que se hace llamar Audrey en WhatsApp es que le digan hasta dónde puede buscar. "Al momento del pago yo busco la cita, no funciona al revés", advierte.

Para trámites para la renovación del NIE, Audrey recomienda a su pareja Enoir, que cobra 55 euros por conseguir todo lo que necesita un inmigrante para operar en legalidad en una ciudad como Madrid. El modus operandi no ha cambiado en los últimos años. Siempre es igual. Los compradores de turnos piden el número de identificación de extranjero, el nombre completo, la nacionalidad, un correo, electrónico y la provincia en la que quiere hacerse el trámite, a partir de ahí solo falta esperar.

La cita se paga una vez que está confirmada, en persona, por transferencia, mediante ingreso bancario o por Bizum. "Garantizado 100%", dice el profesional, que se siente orgulloso cuando le llegan clientes recomendados.

Algo que debería ser un simple trámite, conseguir una cita de la administración, se ha convertido en un negocio. El mercado negro se extiende a más de una docena de trámites, desde renovar el carné de conducir a pedir asilo. "Llevo más de seis meses tratando de conseguir una cita para cambiar la licencia de conducir de la colombiana a la española, pero ha sido imposible en Madrid", dice Valeria, de 32 años.

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