Ayuso abarrotará Ifema en el fin de campaña: casi 2.000 personas para afianzar la absoluta
La madrileña regresa un año después junto a Feijóo a un recinto cargado de simbolismo: fue el escenario donde el líder del PP entregó a la dirigente la corona del partido en Madrid. Ahora busca "reventar" el récord de Moreno en Andalucía
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Isabel Díaz Ayuso y Alberto Núñez Feijóo volverán un año después al lugar en el que empezó todo para la dirigente madrileña. El Palacio de Congresos de Ifema, con capacidad para casi 2.000 personas, será este viernes el escenario del broche final a una intensa campaña que en parte ha estado marcada por sus propios desencuentros. Es un escenario que encierra un cierto simbolismo para el PP de Madrid. En el recinto ferial de la capital fue donde la presidenta de la Comunidad de Madrid logró la ansiada corona de la formación regional de la mano de Feijóo, recién ungido también como nuevo líder nacional tras el difícil final de Pablo Casado. Aquel 22 de mayo resucitaron las dos almas del PP. Con la diferencia de que la actual dirección de Génova se niega a identificar esta circunstancia como una desventaja. "Si los dos dijesen lo mismo, ¿cómo ensancharíamos el partido?", se preguntaban entonces.
El foco se desvió rápidamente a Andalucía. Menos de un mes después del congreso del PP de Madrid, Juanma Moreno hizo historia con una mayoría absoluta en un feudo que históricamente había pertenecido al PSOE. Y también rompió el techo electoral de Ayuso con una fórmula distinta. La victoria del andaluz reajustó los contrapesos internos y blindó la apuesta de Génova por la "moderación" frente a la "ideología" que abandera la dirigente madrileña. Y éste es el poderoso motivo por el que a la presidenta de la Comunidad de Madrid no le vale este domingo con ganar o perder. "Reventar" el récord de Moreno es "su gran obsesión", se reafirman en el partido. Necesita otra mayoría absoluta.
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Además del líder nacional y la plana mayor de Génova, Isabel Díaz Ayuso cerrará este viernes la campaña electoral junto a José Luis Martínez-Almeida, aunque su batalla se centra en alcanzar una "mayoría suficiente" que prive a Vox de su intención de condicionar el Ayuntamiento de Madrid. En los últimos días, la madrileña ha endurecido notablemente su discurso para reafirmarse como imán de los votos de la ultraderecha, aun a costa de desautorizar en varias ocasiones el discurso de Génova en cuestiones como la ilegalización de Bildu o el criterio de Feijóo respecto a la lista más votada. Su cometido, como reafirmó hace unos días ante José María Aznar, es el de "unir todo lo que está a la derecha de la izquierda" en su papeleta.
El gallego, por su parte, ha evitado desprenderse en toda la campaña de su etiqueta de 'hombre moderado' para acentuar el trasvase procedente del PSOE. El discurso de Feijóo siempre suele ir un par de decibelios por debajo del de Ayuso, y este viernes no se prevé una excepción. El líder nacional se centrará, según fuentes de su equipo, en repasar las líneas maestras en las que ha profundizado en los últimos días relativas a la estrategia del voto útil, con el objetivo de ayudar tanto a la presidenta como al alcalde a movilizar todo el voto de derechas el próximo domingo. Juntos harán 'pinza' este viernes ante miles de personas para afianzar la mayoría absoluta de Ayuso, que en Sol aseguran "acariciar", y que en Génova dan por conseguida.
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El reencuentro de Ayuso y Feijóo para el cierre de campaña se producirá en un contexto algo tenso. El perfil propio que ha marcado la dirigente en los últimos días ha desatado malestar en las filas de los populares, que recomiendan al partido "huir" del "trazo grueso" que suele hacer la dirigente en cuestiones de alcance nacional. El primer choque de trenes se produjo a cuenta del debate sobre la posible ilegalización de Bildu, que ella defiende y que Feijóo rechaza. Ayuso no dio ni un paso atrás en su posicionamiento pese a "desviar el foco" de la estrategia de Génova, por lo que el líder del PP dio carpetazo al asunto en el ecuador de la campaña y aparcó la polémica de las listas de los abertzales como vía para desgastar a Sánchez y a los candidatos socialistas.
La dirigente siguió apretando con el asunto pese al portazo de Génova, pero no fue la única cuestión que incomodó a los populares. El pasado lunes, Ayuso rechazó públicamente la oferta de Feijóo al PSOE para que gobierne la lista más votada, ya que a su juicio "no tiene recorrido". Y hubo más. En una entrevista con El Periódico de España denunció la existencia de "conductas racistas" en el PNV a raíz de la polémica del caso Vinicius, cuando Feijóo lleva meses intentando un acercamiento a los peneuvistas en busca de nuevas alianzas electorales. Y este miércoles, el equipo de la dirigente presumió de un artículo publicado por The Times, en el que el corresponsal hace la siguiente afirmación: "If Feijóo fails in december, she will be waiting in the wings to assume his position". Si Feijóo falla en las generales, ella estará esperando entre bastidores para asumir su cargo.
La encrucijada de Almeida
La conjura del cierre de campaña remite especialmente al Ayuntamiento de Madrid. Todas las encuestas prevén la victoria de José Luis Martínez-Almeida este domingo, pero la gobernabilidad no está tan clara y necesitará de apoyos. El alcalde de la capital, en caso de no llegar a la mayoría absoluta, maneja la idea de ser investido en segunda votación, tal y como marca la LOREG. Este escenario, sin embargo, desembocaría en una legislatura abocada al colapso. El PP, previsiblemente, quedaría en manos de Vox para sacar adelante cualquier iniciativa, a menos que encontrase respuesta en las fuerzas de la izquierda o en Ciudadanos si finalmente entra en Cibeles y llegan a ser decisivos.
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La realidad es que el único precedente hasta la fecha no es precisamente halagüeño para los populares, con el rechazo de Javier Ortega Smith a los presupuestos o las normas urbanísticas. El alcalde, que no tiene relación con su potencial socio, es plenamente consciente del bloqueo que se avecina. Por eso, tanto en público como en privado, apela a una “mayoría amplia” para aislar a Vox en Cibeles.
Este miércoles, durante un desayuno informativo, insistió en esta idea junto a Isabel Díaz Ayuso. "Tenemos que estar a salvo de la izquierda, pero también a salvo de los vaivenes de quien un día dice una cosa y otro dice la contraria", dijo el alcalde, que al igual que sus compañeros de partido apela a unificar el voto de la derecha en torno al PP. Fuentes de su equipo, no obstante, destacan que el problema no es tanto con la formación ultraconservadora, sino con Ortega Smith y la estrategia que han llevado hasta ahora.
Isabel Díaz Ayuso y Alberto Núñez Feijóo volverán un año después al lugar en el que empezó todo para la dirigente madrileña. El Palacio de Congresos de Ifema, con capacidad para casi 2.000 personas, será este viernes el escenario del broche final a una intensa campaña que en parte ha estado marcada por sus propios desencuentros. Es un escenario que encierra un cierto simbolismo para el PP de Madrid. En el recinto ferial de la capital fue donde la presidenta de la Comunidad de Madrid logró la ansiada corona de la formación regional de la mano de Feijóo, recién ungido también como nuevo líder nacional tras el difícil final de Pablo Casado. Aquel 22 de mayo resucitaron las dos almas del PP. Con la diferencia de que la actual dirección de Génova se niega a identificar esta circunstancia como una desventaja. "Si los dos dijesen lo mismo, ¿cómo ensancharíamos el partido?", se preguntaban entonces.