¿Es un pájaro? ¿Es un avión? No, es un taxi volador: el futuro aterriza en Madrid

Ese futuro que imaginábamos cuando veíamos las películas de coches que sobrevolaban los cielos de las ciudades está más cerca de lo que parece. Un proyecto pionero para implementar, a la larga, una red de taxis voladores en Madrid trata de ver la luz y convencer a la Administración para que apueste por ellos. Y no se trata de ficción. Las empresas NTT Data y Pinsent Mansons plantearon en febrero del año pasado una iniciativa para el Desarrollo del Ecosistema del Impulso a la Aeromovilidad (DEIA), con idea de extender el sector en España. Ambas firmas proyectaron entonces un hub colaborativo entre compañías y administraciones competentes, en este caso el Ayuntamiento de Madrid, para hacer realidad el gran sueño futurista. Hace algo más de un mes que la Junta de Gobierno aprobó perimetrar un área en el distrito de Villaverde para que las tecnológicas puedan realizar ensayos si lo desean.

El plan esbozaba posibles rutas en la capital, con conexiones de aerotaxi entre Nuevo Azca, Chamartín y Barajas. También otra que llegue hasta el recinto hospitalario de La Paz, con la que trasladar medicamentos y muestras urgentes entre centros clínicos por vías más rápidas que la carretera. Las dos compañías presentaban el primer dibujo de un corredor aéreo como un avance hacia un sector casi inexplorado, que podría dar un giro absoluto a la movilidad urbana. Claro que, también supone una gran apuesta. "Merece la pena todo el esfuerzo normativo y administrativo", presionó el socio responsable del departamento de Transporte y Movilidad de una de las empresas firmantes, Pinsent Mansons, Miguel Nieto. En noviembre comenzaron las pruebas piloto.

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The Wall Street Journal Jon Sindreu

Fueron en Lugo. "Estamos en contacto con la Administración y la relación es buena", celebraron. "En cuanto tengamos avances con las pruebas creemos que puede salir adelante", avanzan, en una llamada telefónica con El Confidencial. Hará medio mes que lanzaron una plataforma con Pinsent Manson, la empresa con la que proyectaron el aerotaxi madrileño, para impulsar este plan y que cale del todo entre las instituciones municipales. Desde el área de Innovación y Fomento del Ayuntamiento de Madrid confirman su predisposición a ampliar el margen para que estas compañías puedan realizar pruebas.

El paso más reciente fue la aprobación de un sandbox en el distrito de Villaverde. Se trata de un perímetro delimitado para ensayos tecnológicos, con una superficie de unos 20 kilómetros cuadrados. "Queremos eliminar burocracia para que las empresas innovadoras que lo deseen puedan medir sus fuerzas, agilizar trámites y elegir Madrid para probar sus nuevos proyectos", avanzaron desde el departamento que dirige Ángel Niño. Y la colaboración con NTT Data es una de las variables que hay sobre la mesa.

Mencionan desde la compañía que tenían una asociación con Ferrovial, la multinacional que recientemente anunció su intención de abandonar España, dentro de un compendio más amplio con otras entidades llamado DEIA, para potenciar el desarrollo de la infraestructura aérea urbana.

En la presentación de hace unos meses también habló otro de los miembros de la firma NTT Data. Enrique Sánchez, parte de la división de Soluciones Aéreas no tripuladas, incidió en que hay muchas compañías que ya están dando pasos para consolidar este sector. Las formas son muchas: desde el desarrollo de vertipuertos, hasta sistemas de control de vuelo, drones y aerotaxis. Y luego está el proyecto de una tercera sociedad, Concept Integrity, que por las mismas fechas anunció en la capital su idea de construir una aeronave 100% eléctrica para vuelos de corta distancia.

Fue una de las sorpresas del World ATM Congress, que reúne a los principales desarrolladores de productos, expertos y proveedores de servicios de navegación aérea de todo el mundo en Madrid. El vehículo lo trabaja la empresa Umiles desde Aravaca, que hace meses está inmersa en este proyecto de taxi volador. Las mejoras previstas en las hélices, así como en los motores, prevén ser capaces de dar con un nuevo sistema más evolucionado, que revolucione por completo el panorama del desplazamiento en la capital.

"Puede revolucionar el ecosistema de las ciudades", aventuró un responsable

Hablamos con Enrique Sánchez sobre un futurible que le entusiasma. "Esto puede revolucionar el ecosistema de las ciudades", aventura, contando tres ejes principales sobre los que se sostiene este proyecto. Por un lado está el avance normativo que supone regular un espacio aéreo urbano en el que se abran nuevas rutas con vehículos, en muchos casos, automatizados. Esto también enfrenta a la Administración ante varios problemas: ¿De quién dependerá esta red? ¿Qué parte controlará el Ayuntamiento, y en qué punto interviene la Comunidad? ¿Y el Gobierno central, tiene algo que decir?

"Está claro que discutir quién va a tener el mando es uno de los escollos ahora mismo", reconoce Sánchez, que no obstante dice ver predisposición por parte de ambas instituciones. En el caso del Gobierno regional, percibe más entusiasmo en lo que respecta al dispositivo de transporte de mercancías entre hospitales que en lo que a viaje de pasajeros se refiere. El Consistorio, sigue, les respalda en casi todo y ya les incluye en los foros de innovación: "Quieren impulsar este plan".

Luego hay varias partes interesadas. Por un lado está el piloto de vuelo, la persona que quiere realizar el viaje aéreo por motivos diversos: ya sea transporte de marcancías, de personas o cuestiones logísticas. También están los proveedores de servicios, que se encargan de facilitar todos los recursos tecnológicos y organizativos necesarios para realizar los trayectos. Es cierto que aún no hay ningún país europeo en el que este sistema se haya industrializado, pero sí existen zonas donde se han realizado pruebas similares a las de España.

En Francia, pegada a la frontera norte, se hicieron prácticas en París de cara a los próximos Juegos Olímpicos de 2024. "Pero nuestro país está entre los más competentes en el sector aeroespacial", afirma Sánchez, que insiste en que "estamos siendo pioneros en muchos aspectos y tenemos empresas muy potentes que se dedican a investigar nuevas opciones dentro de estas áreas".

Otros proyectos europeos

"Desde entonces hemos participado en proyectos europeos con pruebas de vuelo en Toulouse (Francia) o en Lugo", añadieron fuentes de la compañía. Esta última prueba piloto en la ciudad gallega es la misma en la que estuvieron miembros de NTT Data. Los de Concept Integrity también probaron sus modelos de aerotaxi gracias a los fondos de la Comisión Europea. "Fue un éxito", concluyeron en la empresa, que hace balance meses después en conversación con este periódico.

"Vemos buen feedback por parte del área de Innovación [del Ayuntamiento de Madrid] y hace poco estuvimos en un foro de la Confederación Empresarial de Madrid–CEOE (CEIM), así como en otros eventos del sector en distintos lugares del país", apuntan. Explican que ahora mismo tienen abiertos grupos de trabajo y han iniciado contactos con despachos de abogados para tantear sus opciones. También quieren estrechar lazos con AESA, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, el organismo público encargado de la supervisión y ordenación del tráfico aéreo. "Nuestro objetivo es que el marco regulatorio se expanda más rápido", remarcan en Concept Integrity.

La empresa apura sus opciones para estar entre los líderes de la implementación de taxis aéreos en la ciudad de Madrid. Hace una semana abría sus puertas el museo de Zaragoza en el que se expondrán los modelos que construyen para llenar de estos vehículos el cielo en la capital.