Es noticia
Ojo con las cenizas de la chimenea: los incendios que sufre la sierra de Madrid cada invierno
  1. España
  2. Madrid
"Llevamos una racha"

Ojo con las cenizas de la chimenea: los incendios que sufre la sierra de Madrid cada invierno

Desechar las brasas estando seguros de que están apagadas es imprescindible para evitar que los contenedores ardan. En Guadarrama se han registrado 11 fuegos por este motivo

Foto: Una chimenea emite humo en una imagen de archivo. (EFE/Peter Komka)
Una chimenea emite humo en una imagen de archivo. (EFE/Peter Komka)

"Yo llevo 20 años en la agrupación y no recuerdo ningún año con tantos contenedores quemados". Así de claro se muestra Aurelio Piedrahita, jefe de Protección Civil de Guadarrama y vecino de Los Molinos, quien ya ha presenciado cómo 11 cubos de la basura se quemaban en este otoño-invierno a causa de cenizas mal apagadas. "Llevamos una racha… Yo entiendo que como el precio de la luz y el gas ha subido, la gente tira más de chimenea, pero hay que tener mucho cuidado y saber cómo desechar los restos", alega.

De hecho, el peligro no solo está en que pueda salir ardiendo un contenedor de la basura, sino que si estas cenizas calientes todavía entran en contacto con un spray desechado y explota, las bolas de metal que llevan dentro, como los desodorantes y botes de pintura, pueden causar heridas, informa este experto. "Cuando más se da es en los fines de semana. Yo he apagado tres contenedores y mis voluntarios el resto. Intentamos hacer una primera intervención con nuestros recursos, que es una bomba de agua, hasta que llegan los Bomberos", añade Piedrahita.

Foto: Imágen aérea de la sierra de Guadarrama. (EFE)

En este sentido, y contra lo que en un primer momento se pudiera pensar, los incidentes también han ocurrido en zonas residenciales de pisos antiguos con chimenea y no solo de chalés y adosados. Según el jefe de Protección Civil, la correlación estaría en un porcentaje de 30-70. Siempre han tenido que realizar este tipo de intervenciones, aunque todos los años no pasaba de los cinco incidentes con ceniza mal apagada. "Pero es que ahora acabamos de terminar diciembre y ya llevamos 11", puntualiza.

Por eso, el Ayuntamiento de Guadarrama informó a los vecinos para prevenir este tipo de hechos: "Se recomienda que, antes de depositar las brasas en los contenedores, es necesario asegurarse de que están apagadas, ya que las brasas pueden tener fuego latente durante varias horas y al depositarlas pueden mezclarse con materiales combustibles que den origen a los incendios", recoge el texto difundido.

Foto: Imagen de los disturbios en Logroño. (EFE)

Estas palabras emitidas desde el Consistorio de la localidad madrileña, junto con algunos consejos para evitar dichos incidentes, parece que han surtido efecto. Según Piedrahita, ya van dos semanas sin que su agrupación de Protección Civil tenga que actuar por la existencia de un contenedor ardiendo.

Peligro de explosión

Santiago Ayala es instructor del servicio de Prevención del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid y así explica cómo se producen estos pequeños incendios: "Es algo frecuente, sí. La gente saca las cenizas de la chimenea en la que quedan pequeñas ascuas, incluso con una temperatura de la ceniza muy alta, y lo echan a los contenedores, que son de plástico. Si dentro hay papeles o poliespan, que son productos comunes, poco a poco se van calentando, porque no es algo inmediato, y al cabo de un tiempo comienzan a arder".

Foto: Arturo Francisco cambiando la nomenclatura de Wikipedia. (Cedida)

No se le escapa tampoco que en estas fechas es cuando la gente pasa más tiempo en sus hogares. Al frío se suman las vacaciones, así que el uso de la chimenea se ve incrementado y, por tanto, también los restos de ceniza. "El no tratarlos adecuadamente es lo que hace que aumente el número de contenedores o, incluso, incendios si se dejan en sitios cercanos a pequeños arbustos o ramas secas", agrega el bombero, quien determina que el problema no está en desechar las cenizas al contenedor de orgánico, sino que se haga sin haberlas apagado adecuadamente.

Para evitar este tipo de incidentes, el tratamiento adecuado de los restos de la chimenea está en dejarlos enfriar en un recipiente metálico hasta el día siguiente, y a la hora de desecharlos tener la certeza de que están fríos. "El recipiente jamás puede ser de plástico o cartón", advierte Ayala.

Evitar incendios domésticos

Además, otras tantas personas con parcela en su vivienda utilizan estos desechos como abono para las plantas, una realidad a la que el instructor del servicio de Prevención también dedica unas palabras: "Si hace poco tiempo que has sacado las cenizas de la chimenea y quieres abonar una jardinera o una zona de arizónicas, por ejemplo, con ramas secas, las ascuas lo más seguro es que provoquen un incendio".

Ayala recuerda que no todas las maderas son óptimas para su consumo en chimenea

Ayala también considera que las chimeneas y estufas de leña cobrarán cierta importancia debido al incremento del precio de la electricidad. "Solemos responder a avisos de la periferia de Madrid. En localidades grandes como Móstoles y Getafe, por ejemplo, es raro que haya chimeneas, pero en los pueblos de la sierra o el Escorial, donde hay muchos chalés y viviendas unifamiliares, casi todos tienen una", apunta.

En este sentido, el propio Ayala recuerda que no todas las maderas son óptimas para su consumo en chimenea. Así, debe ser leña seca, preferiblemente de encina y roble. "Por ahorrarse un poco de dinero, la gente mete de todo en la chimenea, como trozos de muebles con barnices y pinturas. La chimenea es para la leña, y ya está, no para cualquier tipo de material", sentencia el experto.

Recomiendan utilizar chimeneas actualizadas para que las partículas no se adhieran tanto

Por supuesto, la limpieza de la chimenea también juega un papel clave para evitar incendios. Tal y como afirma Ayala, lo recomendable es limpiarla una vez al año, como mínimo. "Si cogen mucha temperatura, ese hollín que queda pegado a las paredes puede llegar a arder, y de esos avisos sí que también nos suelen llegar a lo largo del invierno", señala el bombero.

Para que esto no suceda, la pedagogía con el vecindario es imprescindible. Desde el equipo de Ayala recomiendan que se utilicen chimeneas actualizadas, aquellas en las que las partículas no se adhieren tanto. "Antiguamente, eran de cemento, de obra, y ahí sí que se pegaba el hollín y todas las partículas del humo. Las más actuales ya son de metal, a las que les pasas el deshollinador y se quedan limpias", remarca.

El peligro de las estufas

Las estufas de leña, por otra parte, también pueden llegar a ser un foco de peligrosidad. A decir verdad, son un elemento que casi cualquier persona puede tener en su vivienda, a diferencia de las chimeneas. "La chimenea requiere una obra y suficiente espacio en casa, y, sin embargo, las estufas son de tamaño más reducido y solo necesitan un tubo para la extracción del humo", resume Ayala. Más allá de las cenizas que generará la estufa y la necesidad de desecharlas correctamente, uno de los riesgos que también supone es el consumo de aire de la habitación. "Las estufas de leña nunca deben estar en habitaciones totalmente cerradas, porque terminará absorbiendo todo el oxígeno", aclara Ayala.

Piedrahita, interesado en evitar la quema e incendio de contenedores de Guadarrama, incide en la forma correcta de desechar las cenizas: "Deben estar en un cubo de zinc y, si se puede, dejarlas en el jardín o terraza un par de días. Antes de tirarlas al cubo de la basura, además, habría que remover las ascuas de vez en cuando para que no se quedara dentro el calor". Pese a que, por lo general, el incidente no va a más que unas pequeñas llamas, el jefe de Protección Civil de Guadarrama ya ha convocado una reunión con sus homólogos de los pueblos cercanos para intentar ver cómo hacer frente a esta oleada de contenedores quemados por cenizas mal apagadas.

"Yo llevo 20 años en la agrupación y no recuerdo ningún año con tantos contenedores quemados". Así de claro se muestra Aurelio Piedrahita, jefe de Protección Civil de Guadarrama y vecino de Los Molinos, quien ya ha presenciado cómo 11 cubos de la basura se quemaban en este otoño-invierno a causa de cenizas mal apagadas. "Llevamos una racha… Yo entiendo que como el precio de la luz y el gas ha subido, la gente tira más de chimenea, pero hay que tener mucho cuidado y saber cómo desechar los restos", alega.

Madrid
El redactor recomienda