Toni Cantó abandona el Gobierno de Ayuso un año después de su nombramiento

La aventura de Toni Cantó en el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha durado poco más de un año. El actor, que ejercía como director de la Oficina del Español desde el 30 de junio del año pasado, uno de los proyectos estrella de la Comunidad de Madrid, anunció este jueves que abandona el cargo para embarcarse en un "nuevo proyecto profesional". Fuentes de la Consejería de Cultura, de quien depende la oficina, detallan a El Confidencial que su marcha se formalizará los próximos días.

"He comunicado a la presidenta Isabel Díaz Ayuso mi intención de iniciar en breve un nuevo proyecto profesional. Quiero agradecerle a ella y a todo su equipo haberme permitido formar parte de su Gobierno. Ha sido una experiencia inolvidable que recordaré con orgullo", publicó en su perfil de Twitter.

El paso de Cantó por la política madrileña ha estado plagado de polémicas desde el inicio. Su nombre apareció por sorpresa en las elecciones autonómicas del 4 de mayo de 2021 como el fichaje estrella de Génova para la lista de Ayuso. El PP de Madrid sería su tercer partido de ámbito nacional tras pasar por UPyD y Ciudadanos, donde militaba antes de su salto a las filas populares. Su cambio de chaqueta fue tan fulgurante como mediático. Y también fallido. Fue apartado por resolución judicial de la papeleta electoral, por lo que finalmente no concurrió como número cinco de la presidenta en los comicios.

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Pese a este revés, y señalado por ser una imposición de la entonces dirección nacional, pronto encontró acomodo en el Ejecutivo regional. El 30 de junio de ese año encontró acomodo en la recién creada Oficina del Español, un organismo confeccionado para convertir la Comunidad de Madrid en el faro de la Hispanidad en todo el mundo y reivindicar el castellano. Con un sueldo de 75.084 euros al año, fue duramente criticado por los partidos de la izquierda en la Asamblea de Madrid (Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos), que consideraban la oficina como un "chiringuito". Tampoco Vox veía con buenos ojos el futuro del organismo.

Si bien la relación con la presidenta madrileña no fue la mejor al inicio de la campaña del 4-M, desde Sol reconocen que la situación se normalizó con el paso de las semanas, a medida que recorrían los municipios de la región. Una vez dentro del Ejecutivo, y procurando mantener un perfil menos mediático, Toni Cantó tuvo la consideración de cualquier alto cargo de la Administración. Su último periodo en la oficina, sin embargo, evidenció que había pasado a un segundo plano.

El pasado mes de mayo quedó fuera de foco durante la presentación de la Cátedra del Español y la Hispanidad de las universidades de la Comunidad de Madrid, un plan estrechamente relacionado con la naturaleza de la oficina. Isabel Díaz Ayuso presentó el programa en un acto multitudinario, pero el exdiputado de Ciudadanos en las Cortes valencianas no tuvo un papel protagonista. Aunque acudió al evento, no participó. Desde la Consejería de Cultura, justificaron entonces que no lo hizo porque había sido pilotado por Educación, al tratarse de una cátedra universitaria. A nadie se le escapó que su peso en el Ejecutivo era mínimo.

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Mientras, los ataques de la oposición tampoco cesaron. La Oficina del Español siempre ha estado cuestionada por su escasa agenda. En los primeros seis meses, la actividad del ente se redujo prácticamente a la organización del Festival de la Hispanidad, que se celebró entre finales de septiembre y octubre de 2021 en Madrid con conciertos, exposiciones y conferencias. En los meses siguientes, aunque los proyectos se incrementaron ligeramente, sus apariciones públicas todavía se contaban con cuentagotas. Apenas un puñado de eventos y una agenda con reuniones puntuales con instituciones educativas en su mayoría. La más polémica, como informó El Confidencial, fue tras el estallido de la guerra de Ucrania, con una entidad que pretendía promocionar el uso del español en Rusia.

Su marcha del Gobierno de la Comunidad de Madrid se produce en el inicio del año electoral, apenas a nueve meses de las elecciones. En esta ocasión, sin embargo, Isabel Díaz Ayuso ya es la presidenta del PP regional y tiene libertad para confeccionar sus listas, en principio sin injerencias de Génova. Si bien en los últimos meses Cantó ha evitado cualquier declaración o aparición política más allá de tuits contra Pedro Sánchez o la izquierda, su continuidad estaba comprometida.