¿Por qué hay más atascos en Madrid tras la pandemia?

Son las tres de la tarde de un jueves cualquiera. La M-30 se pone sus mejores galas para recibir a los vehículos que prácticamente a diario la inundan. Es día laboral. Es día de atascos. Pero la situación de congestión en determinadas carreteras madrileñas se complica cuando sucede algún imprevisto. Hace dos semanas, un accidente a primera hora de la mañana, a la altura del puente de Ventas, entre un tráiler y un camión de la basura provocó un caos. Si bien no hubo que lamentar heridos, la principal arteria de la ciudad y seis autovías quedaron impracticables. El resultado fue varios kilómetros de retenciones.

“En la M-30 y en horas puntas estamos en el 120% del tráfico de 2019”, afirma Borja Carabante en ‘Buenos Días Madrid’ (Telemadrid). El delegado de Movilidad y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid asegura que “es esencial que la gente vuelva al transporte público”. Un medio de transporte que, de momento, no ha recuperado las cifras que mostraba antes de la pandemia.

Metro y EMT

Uno de los transportes que mayor bajada ha detectado es el Metro de Madrid. “Efectivamente tenemos registrada una disminución de viajes que se encuentra en torno al 20%”, confirma Fernando Rodríguez, director de Operación del suburbano de la ciudad. Asimismo desvela que en las últimas semanas solo tendrían cubierto el 80% de la demanda si se compara con 2019, año antes de la pandemia. En circunstancias similares se encuentra la Empresa Municipal de Transportes (EMT), a la que también se le resiste volver a cifras anteriores al covid-19.

La utilización del autobús ha mejorado por encima del 38’5% respecto a 2020

Si se acude al último informe publicado por el Instituto Nacional de Estadística referente al transporte de viajeros, los índices han mejorado en Madrid respecto al 2020. Por ejemplo, el Metro ha aumentado el trasiego de pasajeros en un 48%, mientras que la utilización del autobús ha mejorado por encima del 38’5%. En cifras concretas, se trata de un total de 41 millones de personas que han optado entre enero y septiembre por desplazarse por el suburbano, frente a los más de 31 millones que han usado en agosto el autobús como medio de transporte. Sin embargo, cuesta volver a los índices registrados en 2019 en favor de los vehículos particulares.

Motivos sanitarios y el teletrabajo

Si se comparan los datos registrados en Madrid con otras ciudades que disponen de los servicios públicos analizados, la capital se encuentra en tercer lugar; en cuanto al Metro, solo es superada por Palma (que ha recobrado la normalidad prepandemia) y por Sevilla (que presenta casi un 64%); y en cuanto al autobús está en segunda posición tras de nuevo Palma (con una mejora de más de un 69%). Por tanto, Madrid está por delante de ciudades como Barcelona, Valencia, Málaga y Bilbao que también cuentan con ambos medios de transporte públicos.

Rodríguez señala “un origen social y ciudadano” en los motivos sobre la preferencia por el transporte privado por encima del público. “Si hay mejor movilidad, utilizas primero la superficie”, comenta el director de Operación de Metro: “Se prefiere moverse de forma individualizada, si es posible en coche siempre que los costes de combustible te lo permitan, y en último recurso se utilizará el Metro como medida de transporte”. Esta sería una de las causas de la menor demanda del suburbano madrileño frente a otros servicios como los autobuses. Una tesitura que el propio Carabante también ha querido corroborar: “El transporte público todavía no se ha recuperado, está a menos del 80%”.

En Navidad se pondrá en marcha un dispositivo para regular el tráfico

Plan en Navidad

Sin embargo, si hay un motivo para que se anteponga el vehículo particular frente al público ese es el sanitario. Pero sobre todo las circunstancias derivadas de este, como puede ser el teletrabajo. “La movilidad laboral está muy condicionada por los movimientos del teletrabajo”, desvela Fernando Rodríguez: “La ausencia presencial en los lugares de trabajo hace que haya una restricción de más del 15% respecto a la movilidad que aporta la movilidad obligada”. Por tanto, esta alteración a causa de las nuevas pautas de trabajo tras la pandemia afectan al transporte privado, sí, pero se ceban con el transporte público. Por ello, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad ha reafirmado en el programa de televisión autonómico que “el Metro o el autobús es también seguro desde el punto de vista sanitario”.

Carabante ha adelantado que se va a poner en marcha durante las fechas navideñas un dispositivo para regular el tráfico y fomentar los medios de transporte públicos. Todo para que la capital vuelva poco a poco a la normalidad existente antes de la llegada de la pandemia: “O la movilidad pivota sobre el transporte público o se congestiona”.