Almeida y Ayuso saludan la zona catastrófica y se desactiva el choque político por Filomena

La declaración de lo que se conoce como zona catastrófica por los efectos de Filomena amenazaba con convertirse en un nuevo motivo de disputa entre Moncloa y las administraciones regionales y local de Madrid. Finalmente, el Consejo de Ministros ha dado luz verde a esta en la capital y en otras siete comunidades, por lo que ese posible choque político queda por el momento desactivado. Tanto desde Cibeles como desde la Puerta del Sol se ha valorado positivamente la denominación después de haberse encomendado a ella como medida fundamental para solventar la situación.

"No lo puedo valorar más que positivamente. Me parece todo un acierto", ha asegurado la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, en declaraciones a los medios de comunicación, en las que también se ha ofrecido para colaborar con Moncloa en lo que sea necesario para la evaluación de los destrozos. En la misma línea se ha pronunciado el vicepresidente, Ignacio Aguado, si bien ha reclamado prudencia y esperar a "conocer la letra pequeña".

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I. Gil

Aguado ha incidido en que, "cuando lleguen las ayudas, habrán pasado muchos meses que no nos podemos permitir", por lo que ha enfatizado en que hará falta poner en marcha un paquete de ayudas para paliar los efectos económicos más urgentes hasta que estas se reciban finalmente. "No podemos depositar todas nuestras esperanzas en que ese dinero vaya a llegar en los próximos días. Necesitamos que la CAM siga adoptando medidas y contribuyendo a que nadie se quede atrás", ha señalado el líder regional de Ciudadanos, que ha puesto el foco en un 'plan de rescate ciudadano' valorado en mil millones de euros que llevarán al Consejo de Gobierno de esta semana.

También ha tenido buenas palabras para la decisión del Ejecutivo de Pedro Sánchez el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. "Agradecemos la celeridad para reconocer nuestra situación", ha escrito en su cuenta de Twitter poco después de comentar ante los medios que el Consejo de Ministros "hace lo correcto", "un ejercicio de responsabilidad" desde el punto de vista del consistorio, que ha cifrado en 1.398 millones los daños y pérdidas por Filomena. El líder de la oposición y presidente del PP, Pablo Casado, se ha mostrado favorable al movimiento de Moncloa, que ha calificado de "buena decisión", pero ha hecho hincapié en que ahora hay que centrarse en que "las ayudas a los más necesitados lleguen con prontitud".

En concreto, el Gobierno central ha aprobado la declaración de zona afectada gravemente por una emergencia de protección civil para los territorios que se hayan visto afectados. Esto es, para Asturias, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía, Aragón, Madrid, La Rioja y Navarra. Algunas de estas autonomías y muchos municipios habían solicitado la declaración. Aunque cada una de estas regiones se ha visto golpeada por la borrasca de una forma muy distinta, Filomena ha causado numerosos daños privados y públicos en todas ellas. Se desconoce por el momento la cuantía de las ayudas a percibir y se deberá esperar a una evaluación más precisa.

Situación aún complicada

La declaración de esta zona catastrófica ―así se denominaba en la ley anterior― había saltado como un momento de disputa en plena crisis por el temporal. Tras la fuerte nevada en la capital iniciada el viernes 9 de enero, la ciudad se encontraba intransitable y plagada de un manto de nieve que hacia augurar días duros. Ese mismo día, Almeida ya deslizó que plantearían la declaración en su ámbito municipal. Horas más tarde, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, consideró que no procedía esa denominación, lo que desencadenó una ola de críticas a Moncloa por hacer esa valoración sin una solicitud oficial ni evaluación de daños. El titular del ramo tuvo que rectificar públicamente y, finalmente, este martes se ha concedido.

Todavía hoy, 11 días después de que se iniciara la nevada, la situación continúa siendo complicada en algunas de zonas de la urbe, que sigue con amplias capas de hielo en aceras y calzadas. Tampoco han vuelto a las aulas los menores, que deberán esperar a este miércoles para hacerlo después de que la CAM haya registrado un total de casi 1.000 incidencias en los centros de la región debido al temporal. Los niños acumulan casi un mes sin pisar su clase, desde antes de Navidad.