Aguado admite que es posible que no todos los colegios puedan abrir el lunes por la nieve
"Tenemos a todo el personal disponible trabajando a destajo, coordinándose con el Gobierno de España, con la UME, con los ayuntamientos", ha reconocido el vicepresidente
El vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, ha sostenido este miércoles que para que la normalidad tras el temporal llegue "faltan muchos días, incluso semanas" y ha recalcado que es evidente "que lo que ha sucedido es una catástrofe". Asimismo, ha admitido que puede ser que no todos los alumnos vuelvan a clase el 18 de enero por los efectos que ha provocado la borrasca.
"Es posible que pueda haber algunos centros educativos que no puedan abrir el lunes", ha reconocido el vicepresidente regional. "Tenemos a todo el personal disponible trabajando a destajo, coordinándose con el Gobierno de España, con la UME, con los ayuntamientos... Pero es una situación muy complicada, inédita en España en los últimos 70 años que vamos a tardar tiempo en recuperarnos", ha añadido.
Para el vicepresidente, la prioridad está en que el Metro siga funcionando como hasta ahora, que se aparten la nieve y las ramas y que la mayoría de los colegios puedan abrir la semana que viene. Para ello, se necesita la colaboración de todas las administraciones y de los ciudadanos.
"Si el ministro Marlaska tiene dudas que se suba en su 4x4 y lo vea, como simplemente saliendo de la Castellana entrando por Rosario Pino o por Ourense parece que ha caído una bomba de nieve. Es brutal", ha señalado en una entrevista en Telecinco.
A pesar de estas palabras, el vicepresidente ha indicado que la tramitación para declarar alguna zona como afectada gravemente es "un trámite administrativo", que no debería generar polémica, y ha recordado que, en el caso de que se autorizara las ayudas, tardarían meses en llegar.
El vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, ha sostenido este miércoles que para que la normalidad tras el temporal llegue "faltan muchos días, incluso semanas" y ha recalcado que es evidente "que lo que ha sucedido es una catástrofe". Asimismo, ha admitido que puede ser que no todos los alumnos vuelvan a clase el 18 de enero por los efectos que ha provocado la borrasca.