Chica, el gerente de Carmena al frente de Mercamadrid que defiende Cs e irrita al PP

Hace días el alcalde de Madrid, el popular José Luis Martínez-Almeida, confesaba por qué funciona a su juicio el Gobierno de coalición que encabeza con Ciudadanos: "Yo me llevo muy bien con Begoña. Pero tenemos discrepancias muy a menudo. Somos dos partidos distintos y es lógico. Las cosas las hablamos y las debatimos". Una fórmula de éxito, insistía, aunque el camino muchas veces no sea fácil.

Si hay una empresa mixta vinculada al consistorio madrileño que ha enfrentado a los socios de Gobierno, esa es Mercamadrid. Y, en concreto, la decisión de que permanezca como director general David Chica, fichaje de Manuela Carmena la pasada legislatura.

En septiembre de 2015, poco después de llegar a la institución municipal, Ahora Madrid contactó con el entonces director de Asuntos Europeos de Mercadona para profesionalizar la gestión del gigante de la distribución, comercialización y transformación de alimentos frescos. Tras las últimas elecciones municipales de mayo, Ciudadanos —que se hizo con el área de Economía, Innovación y Empleo, en la que se integra Mercamadrid— decidió mantener a Chica. La empresa mixta está participada en un 51,13% por el consistorio, en un 48,63% por Mercasa y en un escaso 0,24% por gremios y usuarios.

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Según ha podido saber este diario, el grupo que dirige Begoña Villacís avala al exdirectivo de Mercadona por "su buena gestión" y los resultados de la empresa desde que está al frente. Y, por eso, insisten, quisieron que continuara "sin mirar carnés políticos".

Una decisión que no solo no respalda el PP, sino que ha causado roces importantes entre socios de gobierno. Los populares no están conformes con la continuidad de Chica, vinculado estrechamente a algunos miembros de Ahora Madrid y que durante años ocupó la secretaría federal de Movimientos Sociales de Izquierda Unida. Además, el malestar radica en el impulso que dio Chica a una querella contra la anterior cúpula de Mercamadrid y, en concreto, contra la exdelegada del Gobierno en la Comunidad, Concepción Dancausa, y otros miembros del consejo de administración, en abril de 2016.

El gerente de la empresa mixta apoyó a los entonces concejales de Gobierno, Marta Higueras y Carlos Sánchez Mato, a dar un empujón a la causa que se circunscribía a unos hechos acontecidos en 2001, con el PP en el Ejecutivo local. Entonces, Mercamadrid convocó un concurso para la adjudicación de dos derechos de superficie sobre una parcela de su propiedad en los que se produjo un incumplimiento contractual.

En julio de 2017 el juez archivó la causa. El instructor coincidía con la Fiscalía en la "inexistencia de indicios suficientes para considerar que los investigados pudieran haber cometido un delito de administración desleal". El auto dejaba claro también que "más allá de las sospechas irrelevantes en el ámbito penal, no habían aflorado otros indicios" que apuntaran a un posible fraude.

Según ha podido saber este diario, los populares llevan tiempo insistiendo en que Chica no es el candidato idóneo para seguir dirigiendo Mercamadrid. También el tercer actor implicado en el acuerdo de Gobierno, Vox, rechazó su continuidad. Pero Ciudadanos considera que si su gestión lo avala y garantiza la profesionalidad, el signo político no importa. De hecho, apuntan a que su valoración es muy positiva dentro de la empresa pública, incluidos entre los empleados.

Cuando todavía gobernaba Ahora Madrid, la hoy vicealcaldesa madrileña defendió en una comisión de Derechos Sociales y Empleo —a la que entonces pertenecía Mercamadrid— que si llegaba al Gobierno municipal, el gerente continuaría. Se desmarcaba así, según explicó, de los "sectarismos" del anterior Ejecutivo de Carmena, y de los propios que también acumulaba el PP. Tras llegar a Cibeles cumplió su promesa a pesar de las reticencias de su socio en el Ejecutivo local.

Chica y Fernando Sánchez González —gerente de la Empresa Municipal de Servicios Funerarios y Cementerios— son los únicos directores generales de la etapa de Carmena que continúan al frente de una gran empresa pública o mercantil vinculada con el Ayuntamiento. El segundo, sin embargo, tiene un perfil distinto. De 2011 hasta su nombramiento al frente de la funeraria en 2016 ya ocupó una responsabilidad en la Comunidad madrileña gobernada por el PP.

El resto han cambiado todos. En el caso de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (que depende de Vivienda, en manos del PP) el nuevo Gobierno nombró a Diego Lozano, exjefe de gabinete de Ignacio González el verano pasado. También en julio se conoció al nuevo gerente de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) con el nombramiento del ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, Alfonso Sánchez Vicente.

El PP también designó a otro ingeniero, Ceferino San Román Pérez, como nuevo director gerente de Calle 30, cesando inmediatamente a su predecesor, un hombre de Sánchez Mato. En cuanto a Madrid Destino, tras distintas polémicas con la anterior corporación, el nuevo Ejecutivo local hizo un nuevo nombramiento en julio poniendo al frente a Fernando Benzo Sainz.