"Basura", "gañán", "vago"... La Operación Chamartín retrató la guerra en Podemos

La pasada legislatura, eran compañeros de bancada, de despacho, de grupo parlamentario. Hoy, se insultan en las redes. La Operación Chamartín, rediseñada por Manuela Carmena como Madrid Nuevo Norte, uno de los proyectos urbanísticos más importantes de Europa, tiene la culpa. Más Madrid, la escisión de Podemos liderada por Íñigo Errejón, votó el pasado 29 de julio junto a PP, Ciudadanos y Vox la aprobación del mayor desarrollo inmobiliario de España tras 25 años de bloqueo. Algo que no avalan Podemos ni su socio de Izquierda Unida. Ni muchos colectivos de izquierdas.

El visto bueno a esta operación ha servido para retratar la ruptura sufrida en Podemos, para reflejar las diversas sensibilidades que vive una izquierda muy fragmentada. "Hoy, Más Madrid ha votado la aprobación del mayor proyecto especulativo de Europa, la Operación Chamartín, junto a PP, Cs y Vox. Cuando la basura errejonista/carmenista os hable de modelos urbanos sostenibles e igualitarios, ya sabéis lo que vale: nada". Así se despachaba en las redes sociales el exdiputado de Podemos y sociólogo Isidro López, que esta legislatura no ha repetido en la Asamblea madrileña.

La dura diatriba de López tuvo rápida respuesta en su excompañero Emilio Delgado, que en la anterior legislatura estuvo con López en las filas de Podemos y que ahora comienza una nueva etapa política como parlamentario regional de Más Madrid. "¿Basura carmenista/errejonista? Qué lamentable, vago indecente. Te he visto tres veces en toda la legislatura por la Asamblea porque estabas liado insultando en Twitter y pregonando que las instituciones tienen límites. Y es así. Pero tú, es que ni te acercaste a ver dónde estaban...". La pelea dialéctica subió rápido de tono.

López, persona ácida en Twitter, le respondió. "Pues mira, de las tres veces. En una te expliqué qué es el Prisma, en otra la regla de gasto, y en otra lo que es un memorándum de entendimiento. Si balbuceas algo sobre la Comunidad de Madrid es porque gente como yo nos hemos matado a estudiar. Gañán. Te habría valido una décima parte de tu bravuconearía conmigo para decir que estás en contra de la Operación Chamartín. Pero, claro, igual te quedas sin poltrona. Y a ver qué haces entonces, que hay muchas deudas y poco currículo".

La respuesta de Delgado fue contundente. "Pues fíjate que antes de ser diputado no me ha faltado nunca trabajo. Claro que yo no tenía familia con pasta ni herencias en las que apoyarme y tenía la costumbre de ir a currar". Delgado, en conversación con El Confidencial, señala que no tenía que haber entrado al trapo pero que las palabras de su excompañero le parecieron "obscenas". "Isidro siempre ha dado caña a Manuela Carmena en toda la pasada legislatura. Se le va un poco la olla. Pero cuando estás en las instituciones, te das cuenta de que estas tienen límites. La Operación Chamartín es un proceso complejo y ahora es el ariete contra Carmena. Hace falta un debate serio, no insultos. Twitter es una locura. Seguir contestando es avivar la polémica".

Las palabras de López también fueron respondidas por otro excompañero de Podemos, Hugo Martínez Abarca, hoy como Delgado en las filas de Más Madrid. "A veces se puede discrepar en términos políticos muy duros, por supuesto. Pero quienes solo saben rebajarse (otra vez) a esto lo único que muestran es su temperamento despótico y autoritario y una autocomplacencia intelectual, moral y política que, igual, no es del todo merecida", señaló Abarca. "Mira, tío, le habéis regalado la ciudad a BBVA, San José, Cerberus y Testa. Estos dos últimos fondos controlados por afines al PP. No me vengas con gilipolleces, se os tendría que caer la cara de vergüenza. Sois cómplices de los desahucios, burbujas y contaminación que vengan", le espetó López.

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Abarca señala a este diario que "Isidro López es un faltón. Y no somos compañeros, nos llama enemigos. No hay ningún problema, porque él no es relevante como sujeto político. Es relevante la opinión de Podemos, de IU, pero no la suya, que no es nadie". Y la opinión de Podemos e IU es clara, totalmente contraria al desarrollo de este proyecto. De hecho, ambas formaciones acaban de presentar una denuncia ante la Fiscalía Anticorrupción acusando de los delitos de prevaricación administrativa, cohecho y malversación de caudales públicos a 28 personas vinculadas a este desarrollo, entre los que están el ministro de Exteriores en funciones, Josep Borrell, y del de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, además de otros exministros, expresidentes de la Comunidad de Madrid y exalcaldes. No está Carmena.

Para Isidro López, esta polémica "son cosas de Twitter, no hay que darle importancia. Todos hemos dicho cosas de las que nos arrepentimos. A veces nos dejamos llevar por los sentimientos y la vehemencia, lo que también demuestra que hay temas que nos importan". López se refiere a la Operación Chamartín "y la impotencia de ver que son tus propios excompañeros los que la han aprobado". Para este exparlamentario, este proyecto debe ser "una línea roja" para la izquierda. "Las mismas críticas que algunos hemos hecho ahora al errejonismo se la hicimos antes al pablismo, porque no ha habido nunca un debate serio sobre este tema para alcanzar una posición".

Las cifras de la Operación Chamartín reflejan la importancia del proyecto: 2,7 millones de metros cuadrados edificables, tres rascacielos —uno de ellos el más alto jamás construido en Madrid—, 10.500 viviendas nuevas, 400.000 metros cuadrados de zonas verdes... Madrid Nuevo Norte es uno de los proyectos de regeneración urbanística más importantes de Europa. Para parte de la izquierda, sin embargo, "es uno de los mayores escándalos del urbanismo europeo". Carmena retocó notablemente el proyecto, pero no pudo sacarlo adelante por la disconformidad latente en parte de su equipo.

"La revisión realizada por Carmena la hubiera aprobado Ana Botella", critica Isidro López, que señala que aunque fue diputado de Podemos él nunca fue de Podemos ni de Izquierda Unida. "Estoy más cerca de los anticapitalistas, sin tampoco ser de esta corriente". Ahora, la posibilidad de que BBVA esté estudiando vender su participación tras lograr la luz verde al plan, como adelantó este diario, ha despertado muchas suspicacias. Sin olvidar las críticas de aquellos que, como Ecologistas en Acción, consideran que el proyecto traerá nuevos problemas de movilidad en una ciudad ya de por sí colapsada a diario por el tráfico de miles de coches.