A la hermana de Rajoy le toca el 'Gordo': su registro lleva la Operación Chamartín

A Mercedes Rajoy Brey, hermana del expresidente del Gobierno, le ha tocado la lotería. Es la nueva titular del Registro de la Propiedad número 54 de Madrid, un despacho que va a tener mucho trabajo en un futuro no muy lejano: tendrá el monopolio del grueso de las transacciones inmobiliarias que se hagan bajo el paraguas de la Operación Chamartín, aprobada definitivamente este pasado mes de julio tras el acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Fomento, el ayuntamiento de la capital y Distrito Castellana Norte, la sociedad que gestionará el desarrollo del ámbito, donde está prevista la construcción de 10.500 viviendas.

El BOE del viernes pasado oficializó el nombramiento de Mercedes Rajoy como titular del Registro de la Propiedad número 54 y de su hermano Mariano, el expresidente, como titular del Registro Mercantil número 5. Ella procede del número 2 de Getafe y había solicitado el traslado al 54. Tras el concurso celebrado por el Ministerio de Justicia ha sido agraciada (por ser la más antigua que lo solicitó) con uno de los despachos registrales más jugosos de la capital, ya que por sus oficinas se tramitará la mayor parte de las operaciones vinculadas a Madrid Nuevo Norte, el nombre de uno de los desarrollos inmobiliarios más importantes que se van a ejecutar en España. "Va a ser un registro muy rentable", explica un registrador madrileño. "Ese, el 38 y el 29".

Es muy difícil calcular 'a priori' el volumen de transacciones que se van a tener que formalizar obligatoriamente en el registro número 54, pero basta con echar un vistazo a la zona de influencia de este despacho y compararlo con el plano de la Operación Chamartín para ver que la mayoría del desarrollo de este nuevo ámbito está dentro de los límites del registro de Mercedes Rajoy. Un registro que empieza en el límite norte de la M-30, el nudo de Manoteras y la A-1 y que se extiende por dos ejes principales, la calle Antonio Cabezón y la calle Agustín de Foxá.

La edificabilidad aprobada es de 2,65 millones de metros cuadrados. El uso residencial suma 1.050.000 metros cuadrados, de los cuales 790.000 se situarán al norte de la M-30, junto con actividades económicas comerciales y de servicios terciarios. Es esta la zona de influencia del registro 54. El uso terciario de oficinas, muy vinculado a la propia estación de Chamartín, se situará al sur de la M-30, ya fuera del ámbito del registro. Estamos hablando de 10.500 viviendas, de las que más del 70% se construirá en la zona de influencia del registro 54. Cada nueva operación inmobiliaria pasará obligatoriamente por el despacho de Mercedes Rajoy. "Si la operación Chamartín sale adelante, este registro será desde luego uno de los mejores de España, durante muchos años", explica otro registrador madrileño.

Los registradores son una mezcla de funcionario y empresario. Como empleados públicos, dependen del Ministerio de Justicia. Pero en vez de recibir una remuneración a cargo de los Presupuestos del Estado, sus ingresos provienen de los aranceles que los usuarios tienen que pagarles por solicitar información, inscribir propiedades o hipotecarlas. Cuanto más volumen de transacciones genere su zona de influencia, más ingresos obtienen. Los registradores ejercen su función en un régimen de monopolio dentro de la demarcación que corresponde a su registro, donde el ciudadano ha de acudir sin posibilidad de elección.

Los aranceles están regulados en el Real Decreto 1427/1989. Por la inscripción, anotación o cancelación de cada finca o derecho, los registradores perciben unas cantidades que varían en función del valor de ese bien. Si la finca o derecho no excede de 6.010,12 euros, cobran 24 euros. A partir de ahí, el arancel se fija entre 0,20 y 1,75 euros por cada 1.000 euros en función del valor de lo que se registra. También hay aranceles aplicables a la inscripción de escrituras de subrogación y cancelación de créditos o préstamos hipotecarios; y en las agrupaciones, segregaciones y divisiones de fincas. Sin olvidar cualquier anotación vinculada a una propiedad, como puede ser un embargo.

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La Operación Chamartín empezará a andar en 2019 y, teniendo en cuenta los trámites administrativos que pasan por un registrador, el desarrollo de este ámbito generará miles y miles de transacciones. Los beneficios netos que la explotación de un registro supone para su titular son todo un misterio. Los datos no son públicos. Tan solo se conoce cómo se reparte el total obtenido por el despacho: el titular se queda con el 60% y el otro 40% se reparte entre los empleados. Además, los registradores disponen de una gran autonomía para gestionar su oficina como un negocio particular. Por ejemplo, pueden contratar o despedir libremente a sus trabajadores. Sin olvidar que en su demarcación no tienen competidor alguno. La antigüedad es el único mérito que computa para ocupar los registros que producen más beneficios o que son más deseados por razones de ubicación. Lo normal es que haya cuatro concursos al año para distribuir las vacantes.

El anterior destino de Mercedes Rajoy, dos años más joven que su hermano Mariano, fue Getafe. Antes había estado en Arévalo (Ávila) y Parla, en Madrid. Su marido, Francisco José Millán Mon, es diplomático de carrera y eurodiputado por el PP. La hija de la pareja, Mercedes Millán Rajoy, ingresó en 2011 en la carrera diplomática con la segunda mejor nota de su promoción. Su hermano Francisco ha seguido también la tradición familiar de opositar y desde 2014 es técnico comercial y economista del Estado, siendo el número uno de su promoción. Mercedes y dos de sus hermanos, Mariano (el expresidente) y Enrique, también son registradores.