Patriotismo de bandera: solo PP y Cs pagan por poner enseñas en plazas de Madrid

Colocar banderas de España en plazas y glorietas está de moda. Muchos ayuntamientos han decidido demostrar su patriotismo ubicando grandes enseñas nacionales en puntos neurálgicos de su localidad. El último, el Consistorio de Las Rozas, en el oeste de la Comunidad de Madrid, que el pasado 20 de mayo inauguró en el bulevar de Camilo José Cela (en su Parque Empresarial) una bandera de 37,5 metros con un escudo de 500x750 centímetros, sustentada en un mástil de aluminio de 18 metros de altura y sistema antienrollamiento. Todo por 6.106 euros (IVA no incluido). El objetivo del consistorio, del PP, era mostrar con este gesto "su compromiso con España y sus símbolos, así como con la labor que desarrollan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado".

El debate está abierto. ¿Se es más patriota por colocar banderas de tu país?, ¿no es preferible utilizar este dinero público, aunque no sean cantidades muy altas, en otras necesidades municipales? El Confidencial ha consultado a los 25 municipios más poblados de la Comunidad de Madrid y de momento este tipo de iniciativas solo está presente en las políticas de los gobierno locales del PP y en uno de los tres municipios madrileños controlado por Ciudadanos, El Molar, donde se colocó a la entrada del municipio una bandera española como homenaje a las víctimas del terrorismo. El coste fue de 3.000 euros, explican desde el consistorio naranja.

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Los municipios controlados por el PSOE o por candidaturas de unidad popular vinculadas a Podemos han pasado de momento de implementar este tipo de actos. "Da igual que el PP ponga muchas banderas en las ciudades donde gobierna si luego roba a sus ciudadanos, como hemos podido ver en los últimos grandes casos de corrupción en Madrid, como Gürtel o Púnica. No tiene sentido. Olvidamos lo importante para centrarnos en lo accesorio. La honestidad con los ciudadanos a los que sirves es el mejor gesto de patriotismo", señala un dirigente del PSOE de Madrid.

Lo que está claro es que la simbología es cada vez más importante, sobre todo desde que el desafío soberanista de Cataluña ha polarizado mucho más los sentimientos nacionales. En la región, nueve de los grandes municipios, todos controlados por el PP, han apostado por banderas en glorietas y plazas. Las Rozas, por ejemplo, tiene previsto izar otra el 12 de julio en la plaza de las Víctimas del Terrorismo. Esta será más pequeña, con un mástil de 12 metros de altura y una enseña de 12 metros. El precio, 3.012,48 euros (IVA no incluido). En el oeste de la comunidad, granero tradicional de votos para el PP, son varios los ayuntamientos que han apostado por ondear al viento las banderas españolas.

En Boadilla del Monte, por ejemplo, el ayuntamiento (del PP) colocó en mayo de 2016 una bandera en la urbanización Las Lomas después de recibir una petición de la comunidad de propietarios. El mástil costó 2.230 euros y la enseña solo 60 euros, explica un portavoz municipal. Hay otra, mucho más grande, en la confluencia entre la M-513 y la M-516, una rojo y gualda de 37,7 metros sobre un mástil de 18 metros (igual que en Las Rozas) que solo costó 500 euros. Hay una tercera bandera, que puso ya hace muchos años el exalcalde Arturo González Panero, alias 'el Albondiguilla', uno de los principales procesados en el caso Gürtel, que costó 900 euros.

Brunete, también controlado por el PP (su alcalde está actualmente imputado en el caso Púnica), tiene otras dos banderas. La primera, colocada en la rotonda de las Víctimas del Terrorismo, no fue sufragada directamente por el ayuntamiento sino "por la empresa adjudicataria que se encargó de remodelar la zona". En esta legislatura, el consistorio ha puesto una segunda en la rotonda de acceso a la M-516, cuyo coste fue de 5.000 euros. Majadahonda, por su parte, también del PP, no ha optado por izar ninguna enseña, pero el Gobierno local decidió en octubre del año pasado regalar dos kilómetros de tela con los colores nacionales para que se engalanaran sus balcones. El coste fue de 3.276 euros. En el oeste, la única excepción es Pozuelo de Alarcón. El actual equipo municipal, también del PP, asegura que no ha colocado ninguna bandera esta legislatura, aunque cada octubre organizan con motivo de la fiesta nacional el homenaje a la bandera en la plaza de la Constitución, donde ondea una gran enseña desde hace años.

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En la zona este de la región, los cambios políticos que provocaron las elecciones municipales de 2015 han condicionado el patriotismo de bandera. El PP puso una en octubre de 2012, cuando gobernaba Alcalá de Henares. Una gran bandera de 50 metros cuadrados en la glorieta del Chorrillo. El entonces alcalde, Bartolomé González, hoy diputado autonómico, señaló el día de su inauguración que la enseña "simboliza la inquebrantable adhesión de los ciudadanos de Alcalá con nuestra bandera constitucional y con nuestra amada patria". Desde 2015, gobierna el PSOE con el apoyo de Podemos. No se han producido nuevas inauguraciones.

En Coslada, también gobierna el PSOE desde 2015. Meses antes, en junio de 2014, el entonces equipo municipal del PP colocó una bandera en la rotonda Primero de Mayo. "Tuvo un coste aproximado de 5.000 euros", explica un portavoz del ayuntamiento, que señala que al principio de legislatura la robaron y se tuvo que reponer en diciembre de 2015 con un coste de 350 euros. "Hace un par de meses se volvió a renovar, con otro coste de 350 euros". En Torrejón de Ardoz manda el PP, pero ni en esta legislatura ni en la anterior se ha colocado ninguna bandera. Tampoco hay fiebre por las banderas en San Fernando de Henares, donde gobierna una candidatura vinculada a Podemos desde mayo de 2015.

En el sur de la comunidad, Alcorcón se lleva la palma. El alcalde popular David Pérez ha colocado varias. "El ayuntamiento ha instalado una decena en distintos enclaves de la ciudad, generalmente coincidiendo con conmemoraciones como el Día de la Hispanidad o el de la Constitución", señalan desde el consistorio. "El coste de las banderas oscila entre los 45 y los 240 euros; en ocasiones han sido costeadas con aportaciones ciudadanas y en otras han sido cedidas por instituciones militares". La más grande se puede ver en uno de los accesos al municipio, donde la M-40 se junta con la A-5: unos 30 metros cuadrados de tela sobre un mástil de 16 metros de altura.

El día en que se inauguró, en febrero de 2013, Pérez señaló que la intención era "reflejar el amor, el orgullo y el respeto que todos los españoles tenemos a nuestro país y a nuestros símbolos nacionales". Para Alcorcón, sus banderas son un tema muy serio. En abril de 2017, la bandera de la A-5 fue robada después de que los asaltantes rompieran el mástil. "Estamos a la espera de una resolución judicial que permitiría reclamar el coste de los daños a su causante". En julio de 2017, el ayuntamiento también anunció que la bandera de España lucirá en todos los vehículos de la Policía Municipal, del Cuerpo de Bomberos y del Servicio de Protección Civil del municipio, "un gesto frente a quienes atacan la unidad de España".

El PP también colocó otra bandera en Leganés cuando gobernaba este municipio del sur de Madrid en la legislatura 2011-2015. Lo hizo en 2012, aprovechando en bicentenario de la Constitución de Cádiz. Ahora Gobierna el PSOE. Preguntado por El Confidencial sobre el coste de la iniciativa que en su día llevó a cabo el anterior Gobierno local, el nuevo ayuntamiento asegura no haber podido encontrar las facturas. En el sur ondean pocas enseñas nacionales. Esta legislatura, el PSOE también gobierna en Móstoles, Getafe y Fuenlabrada. Ninguno de los tres ejecutivos locales ha decidido colocar banderas en plazas o glorietas. En Arganda del Rey (también del PSOE) tampoco se ha izado ninguna. En Parla, donde ahora manda el PP, el ayuntamiento solo ha colocado una de 15 metros en el balcón consistorial que ha costado menos de 30 euros.

En la zona norte, el PP también colocó una en la glorieta Víctimas del Terrorismo de San Sebastián de los Reyes en la legislatura 2011-2015. Ahora los designios municipales están en manos del PSOE, que no ha izado ninguna nueva y que se ha ganado las críticas de los populares por no renovar la que ellos pusieron. En Alcobendas, del PP, la que se ha puesto en la urbanización El Soto de la Moraleja ha sido costeada por los vecinos. En otros ayuntamientos gobernados por la izquierda, como Rivas Vaciamadrid o Pinto, no se ha apostado por iniciativas como esta en lo que llevamos de legislatura. Y eso que Pinto tuvo una de las banderas más caras cuando gobernaba el PP. En marzo de 2015, antes del cambio electoral, el PP colocó una de 37,4 metros en la glorieta de la calle Cataluña que costó 14.000 euros.