Ni aguirristas ni excargos públicos: al PP le quedan cuatro para suceder a Cifuentes

El reloj ha empezado la cuenta atrás. Génova tiene hasta el día 21 de mayo a las 16 horas para elegir al sustituto o sustituta de la dimitida Cristina Cifuentes al frente de la Comunidad de Madrid. "Nos tomaremos nuestro tiempo", ha señalado en varias ocasiones el coordinador general Fernando Martínez-Maillo, encargado de pilotar pacíficamente la transición. El PP no quiere cometer errores del pasado y está haciendo una minuciosa criba entre los 47 diputados populares de la Asamblea (los únicos elegibles) para intentar elegir al mejor candidato, descontando obviamente a la parlamentaria número 48, la propia Cifuentes, que ha renunciado a la presidencia regional y a la presidencia del PP autonómico, aunque sigue de momento con su escaño.

Lo malo es que el PP tiene un problema. No quiere a destacados cifuentistas, tampoco a aguirristas, ni quiere en la lista de presidenciables a diputados que ostenten o hayan ostentado cargos públicos y que el día de mañana puedan suponer otro problema para la marca del partido si salen a la luz pública hipotéticas irregularidades en su gestión. Con ese panorama, la lista se reduce a un puñado de nombres. Muy pequeño. Cifuentes, cuando opinaba, quería a su número dos al frente del Gobierno regional. 'A priori', es lo más lógico, continuismo en el Ejecutivo a un año vista de las elecciones. Pero Ángel Garrido, hoy presidente en funciones, no es del agrado de toda la dirección nacional. Demasiado próximo a Cifuentes, señalan sus críticos. "Si alguien entiende que la lealtad a una persona que encabeza un proyecto político te inhabilita para tener lealtad a otra persona que encabeza otro proyecto político, yo creo que se equivoca", señaló el otro día como aviso a navegantes.

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Analizando la lista de 47 diputados populares, hay 21 que actualmente ocupan cargos públicos en ayuntamientos madrileños o han ocupado cargos municipales. No obstante, entre todos ellos nunca ha habido un candidato con demasiada fuerza en el partido y del gusto de Génova para que hubiera podido optar al cargo. Se trata de los regidores David Pérez (Alcorcón), Ignacio García de Vinuesa (Alcobendas), Ana Belén Barbero (Colmenar del Arroyo), María Begoña García (Santa María de la Alameda) y Belén Rodríguez Palomino (Villa del Prado).

También están Paloma Adrados (exalcaldesa de Pozuelo y actual presidenta de la Asamblea), Nadia Álvarez (exalcaldesa de Carabaña), Jesús Gómez (exalcalde de Leganés), Juan Soler (senador y exalcalde de Getafe), Bartolomé González (exalcalde de Alcalá de Henares), Teresa Luis Rico (exalcaldesa de Cadalso de los Vidrios), Luis del Olmo (exalcalde de Nuevo Baztán) y Lucila Toledo (exalcaldesa de Villar del Olmo). Con este argumento, se cae por tanto Pedro Rollán (exalcalde de Torrejón de Ardoz, y hoy consejero y número tres del Gobierno regional), uno de los nombres que habían sonado al principio.

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En este listado también están incluidos José María Arribas (exconcejal en Otero de Herreros, Segovia), José Manuel Berzal Andrade (exconcejal en el Ayuntamiento de Madrid), José Luis Fernández-Quejo del Pozo (concejal del Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial), Ana Isabel Pérez Baos (exconcejala de Torrejón de Ardoz), Ángel Ramos (exconcejal en Leganés), Gador Ongil (exconcejala de Torrelodones) y María Isabel Redondo (exconcejala de Tielmes).

Tampoco están en las quinielas los otros dos consejeros nombrados por Cifuentes que son diputados: Carlos Izquierdo y Rosalía Gonzalo. Génova también ha excluido de la lista a destacados aguirristas que ocuparon puestos de responsabilidad en los ejecutivos de Esperanza Aguirre e Ignacio González. Se trata del exconsejero Jesús Fermosel, la exconsejera Ana Isabel Mariño y la exconsejera Regina Plañiol (su marido está imputado en el caso Lezo). Obviamente, también están descartados Isabel González (hermana de Ignacio González) y Jaime González Taboada, exconsejero de Cifuentes que dejó el cargo después de que fuera vinculado al caso Púnica por uno de los principales imputados, el empresario David Marjaliza. Ya van 27 descartados.

Salvo sorpresa mayúscula de última hora, hay un buen puñado de diputados que aunque cumplen los requisitos exigidos en principio por Génova quedan descartados por su edad (muy jóvenes o muy mayores) o porque no tienen una trayectoria política lo suficientemente destacable para ocupar un cargo tan delicado como la presidencia de la Comunidad de Madrid, aunque solo sea durante un año. Génova tampoco quiere a parlamentarios muy vinculados al cifuentismo. Por eso, entre candidatos (Garrido no está excluido totalmente) suenan con fuerza otros nombres. El primero de ellos es Juan Antonio Gómez-Angulo, licenciado en Derecho y secretario de Estado para el Deporte en gobiernos de Aznar. "Un hombre que va por libre y no vinculado ni a cifuentistas ni aguirristas", señalan fuentes del PP. Aunque también ha sido concejal en el Ayuntamiento de la capital en varias etapas, es decir, ha ocupado un cargo público.

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El segundo es Enrique Ossorio, actual portavoz del grupo parlamentario. En principio, tendría que estar también en la lista de descartados porque fue viceconsejero y consejero en ejecutivos de Aguirre y González, pero es del gusto de sectores de la dirección nacional. También se ha sumado uno de los diputados con más futuro político del PP de Madrid, Alfonso Serrano, que ha tenido que lidiar esta legislatura con un papel muy complicado: portavoz del PP en la comisión de investigación de la Asamblea de Madrid, donde la oposición no ha dudado en erosionar la marca PP, muy tocada ya de por sí por los sucesivos escándalos de corrupción. Es un hombre de Génova, responsable del departamento electoral del partido y de la máxima confianza del número dos de Maillo, Juan Carlos Vera. Podría ser una solución 'a la murciana'. La última palabra, no obstante, la tendrá Rajoy. Todos esperan que tome una decisión en la semana del 7 de mayo.