Carmena quiere fichar a un ex alto cargo de la cúpula de Interior con Fernández Díaz

Manuela Carmena ya tiene a su favorito para dirigir Madrid Destino, la joya de la corona del área de Cultura, 'intervenida' por la alcaldesa desde la destitución de la concejala Celia Mayer. El elegido es Pablo Martín González, un ex alto cargo de la cúpula de Interior con Jorge Fernández Díaz que actualmente dirige el Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (Sepie). Con la recomendación de Luis Cueto, su mano derecha y primera opción para tomar las riendas de la entidad, Martín González tiene todas las papeletas para ponerse al frente de la empresa municipal más codiciada, según han asegurado a este diario varios miembros del Gobierno de Ahora Madrid.

La intención del núcleo duro de la alcaldesa pasa por aprobar su nombramiento este jueves en la reunión de la Junta de Gobierno, coincidiendo con la oficialización del cese de Celia Mayer y otros cambios en direcciones generales, entre los que fuentes oficiales del Ayuntamiento de Madrid no confirman si se incluye Madrid Destino. El perfil técnico de Martín González, miembro del Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado, al igual que Cueto, habiendo estado destinado en diferentes ministerios, encaja a la perfección con la pretensión de colocar a gestores con reconocida experiencia en las áreas de cultura y turismo. Sin embargo, su nombramiento no cuenta con un amplio consenso dentro del propio Gobierno de Ahora Madrid.

Las formas del hipotético nombramiento, como ocurrió con la remodelación del área de Cultura, sin deliberación y por “decreto”, las filias políticas del elegido y, por último, el desacuerdo con una reestructuración que conlleva restar competencias a los cargos electos para transferirlas a perfiles técnicos nombrados como cargos de confianza, con el consiguiente freno a la implantación del programa transformador de Ahora Madrid, son las principales causas que señalan los críticos para argumentar su rechazo.

Su nombramiento no cuenta con un amplio consenso en Ahora Madrid, pero un acuerdo de la Junta de Gobierno sería suficiente para aprobarlo

Madrid Destino cuenta con un presupuesto de más de 85 millones de euros al año y es una herramienta central para políticas empresariales en el mundo de la cultura y el turismo. Una entidad clave para las políticas culturales y turísticas de la ciudad que controla centros como Matadero, Caja Mágica, Medialab Prado y otros de los principales espacios escénicos y museísticos municipales. El buque insignia para la guerra cultural que Ahora Madrid trató de emprender con su asalto institucional, pero que acabó abortando tras las primeras polémicas.

La nueva pieza que Carmena quiere colocar en el tablero de una reestructuración más amplia, coincidiendo con la llegada al ecuador de la legislatura y los posicionamientos internos de cara a preparar la candidatura para 2019, cuenta con un amplio currículo a sus espaldas. Pablo Martín González fue el jefe de gabinete del número tres de Fernández Díaz, el subsecretario de Interior Luis Aguilera.

En el Ministerio de Sanidad y Consumo, fue secretario de la Comisión de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud y secretario general de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios. Distinguido con la Cruz de la Orden Civil de Sanidad, hasta su incorporación en Interior en enero de 2012 fue jefe de gabinete de los subsecretarios de Sanidad y Consumo, de Sanidad y Política Social, y de Sanidad, Política Social e Igualdad. También estuvo destinado en los ministerios de Agricultura, Pesca y Alimentación, así como en el de Cultura.

Carmena: “Madrid Destino está encajonada y si no funciona, hay que buscar alternativas”

La alcaldesa descartó la pasada semana durante un desayuno informativo la entrada de Cueto en la “estructura que planteamos como novedosa en el área de Cultura y especialmente de Madrid Destino”. Crítica con el papel desarrollado hasta el momento por esta entidad, tras afirmar que “Madrid Destino está encajonada y si no funciona, hay que buscar alternativas”, adelantó su propósito de incidir en otros modelos novedosos de turismo apenas explotados, especialmente el turismo cultural interno, de congresos, de compras o deportes. Todo ello, añadió, con un marco de “turismo sostenible” y que no se centre exclusivamente en la almendra central.

La reorganización del Gobierno municipal que quiere llevar a cabo la alcaldesa no ha hecho más que empezar, y está previsto extenderla en el tiempo tras los sobresaltos, filtraciones y choques internos ocasionados por la destitución de Celia Mayer en Cultura, que finalmente dirigirá el área de Igualdad, de nueva creación. Este martes, la alcaldesa aseguraba en el pleno municipal, respondiendo a una pregunta de los socialistas, que la “remodelación profunda” se prolongará durante “tres o cuatro meses”.

En el horizonte de todos los cambios —que en su grueso se han retrasado hasta el inicio del verano— se encuentran las próximas elecciones, a las que Carmena siempre descartó presentarse. Una decisión en la que volvió a incidir recientemente, pero su guardia pretoriana ya se ha posicionado para pilotar su relevo. No son los únicos. Estos movimientos se están produciendo en todos los sectores que conforman la plataforma municipalista, menguando el frágil consenso interno y alimentando una carrera de familias para tomar las mejores posiciones en la línea de salida.

Un escenario que desde Ganemos Madrid, corriente que puso los cimientos de la candidatura municipalista y en la que se referencian media docena de concejales, se ha calificado con las duras palabras de poco representativo de las banderas que enarboló en sus inicios Ahora Madrid. Su conclusión, según recogían en un comunicado reciente, es que “se afianza el presidencialismo de la estructura municipal que heredamos de gobiernos anteriores en esta ciudad y se desmarca de la candidatura democrática, abierta y participativa que propuso Ahora Madrid como bandera desde sus inicios”.