El interventor denuncia que Carmena paga 9 millones "sin contrato" para cuidar árboles

El ayuntamiento de la capital, que dirige Ahora Madrid, ha pagado nueve millones de euros para revisar árboles en mal estado dentro de un plan extraordinario. Esta inversión se ha producido al margen del gran contrato integral de limpieza viaria y conservación de espacios públicos y zonas verdes que el anterior equipo municipal, del PP, adjudicó en agosto de 2013 y por el que los madrileños ya abonan 63 millones de euros anuales para el mantenimiento del arbolado de la capital. Para sufragar este gasto extra, la concejalía que dirige Inés Sabanés ha recurrido a la fórmula jurídica de 'convalidación del gasto', que permite a una Administración encargar un trabajo urgente sin necesidad de sacar un concurso público.

La intervención municipal analizó en diciembre pasado las seis convalidaciones de gasto autorizadas por el consistorio, una por cada lote del contrato integral en que se divide Madrid. "De la documentación obrante en el expediente, se deduce que se ha producido una prestación de hecho no vinculada a ningún contrato en vigor, en la que se ha prescindido del procedimiento contractual y presupuestario", señala la intervención, que enumera las leyes incumplidas y anuncia en un escrito su remisión al Tribunal de Cuentas, ya que estas convalidaciones son "contrarias a reparos formulados por los interventores".

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Un portavoz municipal justifica este gasto extra porque eran necesarias "intervenciones de carácter urgente que no admitían dilaciones". Entre agosto y noviembre del año pasado, las adjudicatarias del contrato integral recibieron estos encargos extra para revisar árboles en mal estado. Se han auditado 103.940 ejemplares, de los que 10.488 han sido talados por razones de seguridad. "En verano y después de una situación de incidentes gravísimos, con una continuidad de accidentes de caídas de árboles y caídas de ramas, desde el Área de Medio Ambiente y Movilidad se tomó la determinación de ir a un proceso extraordinario para auditar el máximo de árboles en riesgo. Para ello se utiliza un sistema reglado que es la convalidación de gasto, que es un procedimiento que está contemplado en las bases de ejecución de presupuesto". El año pasado se cayeron en Madrid 454 árboles y unas 3.000 ramas.

Para Sergio Brabezo, concejal de Ciudadanos, "este es un tema muy grave. Pagar dos veces por el mismo servicio es un gravísimo error, que la Administración ya prohíbe de manera expresa. Este es un sistema para entregar más dinero a las empresas adjudicatarias por la puerta de atrás. El despilfarro de Ahora Madrid es claro. No sabe arreglar un problema y lo único que hace es inflarlo con dinero esperando una solución".

La asociación ciudadana Madrid Lo Vale reconoce que "la convalidación es un procedimiento normal para sufragar gastos extraordinarios que el ayuntamiento debe de acometer de forma urgente y sin tiempo para recurrir a la tramitación ordinaria", pero recalcan que el problema en este caso es "que cuando se adjudicó el contrato integral, las adjudicatarias tenían contemplada la revisión del arbolado y además ofrecieron unas mejoras respecto al propio pliego que también incrementaban de forma notoria el mantenimiento del arbolado". La asociación se pregunta si el ayuntamiento ha exigido a las empresas el cumplimiento de esas mejoras a las que se comprometieron, cifradas en 22,4 millones de euros. "Ante una situación excepcional, se premia a las adjudicatarias con la cantidad de nueve millones extra en lugar de exigirles que hagan ese trabajo con las mejoras que asumieron para llevarse el contrato".

Subcontratas y autónomos

El Ayuntamiento de Madrid adjudicó en agosto de 2013, cuando gobernaba el PP, un contrato integral de limpieza viaria y mantenimiento de mobiliario urbano y zonas verdes por 1.944 millones repartidos en ocho años (es decir, 243 millones anuales). Las empresas ganaron el contrato reduciendo un 23% el precio de licitación que ofrecía el ayuntamiento, pero ofreciendo unas mejoras en el mantenimiento. La ciudad quedó dividida en seis lotes, es decir, en seis zonas, que se repartieron cuatro contratistas: OHL, Sacyr, FCC y Ferrovial.

De esos 243 millones de euros, 63 millones se destinan al mantenimiento del arbolado. Pero es un mantenimiento ordinario. El sindicato CGT explica que el Plan Extraordinario de Renovación del Arbolado aprobado por el consistorio tiene dos fases: la revisión, poda y tala; y luego la plantación de nuevos ejemplares para sustituir a los que se quitan. "En este plan extraordinario, las adjudicatarias no pueden utilizar al personal que ya está en plantilla para el contrato integral, por eso las empresas subcontratan a otras para obtener beneficios, y luego estas han estado a su vez contratando a autónomos que no han cumplido en algunas ocasiones las medidas de seguridad y la normativa de prevención de riesgos laborales".

CGT exige al ayuntamiento que haga un control más exhaustivo y ha presentado alguna denuncia ante la inspección de trabajo. "También hubo problemas, sobre todo en los distritos del sur de Madrid, con los acopios de leña que se hacían en las calles cuando acababan los trabajos de poda y tala. Estaban mal señalizados y ocupando espacios en las aceras. Algunos acopios estuvieron más de un mes tirados en las calles".

El ayuntamiento asegura que el contrato integral que adjudicó el PP supuso "una fuerte reducción económica en el importe destinado al mantenimiento de nuestro patrimonio verde y un retroceso desde el punto de vista de la gestión, ya que se deshizo la especialización y diferenciación en el tratamiento del arbolado presente en las calles y el presente en los parques y jardines".

Si antes de 2009 se destinaban 103,8 millones de euros al año en la conservación de zonas verdes, ahora la partida es de 63 millones, un reducción del 39%. En Madrid hay casi 2.100.000 árboles.

El plan extraordinario prevé la plantación de 7.000 nuevos ejemplares (se han talado 10.488). "Es importante destacar que un número determinado de alcorques no se reponen por diferentes motivos, como pueden ser un exceso de densidad para el correcto desarrollo, ya que el siguiente árbol está demasiado cerca; la estrechez de aceras que impiden el paso de peatones; su ubicación inadecuada al estar cerca de paradas de autobuses o muros, o interferencias con señalización vertical". Paralelo al plan extraordinario, se plantarán otros 7.000 árboles dentro del contrato integral. En total, 14.000 nuevas unidades.