El PSM apoya el plan económico de Carmena con una argucia que cumple la 'ley Montoro'

El grupo municipal que lidera Purificación Causapié apoyó el plan económico-financiero del delegado del área de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato, este miércoles en el pleno municipal tras aceptar Ahora Madrid la enmienda presentada por los socialistas. El planteamiento inicial de esta, según adelantó este diario, evitará saltarse la ley de estabilidad presupuestaria y conseguirá que el ministerio dirigido por Cristóbal Montoro comience a tramitar un plan que, tal y como está sugerido, no pasará el filtro de Hacienda, como ya anunció en un comunicado el Ejecutivo en funciones la semana pasada.

El Gobierno municipal necesitaba a los concejales socialistas para sacar adelante la ‘propuesta estrella’ de Sánchez Mato, y el PSOE-M no está dispuesto a pasar por alto la regla de gasto. Por eso, su enmienda evita ese incumplimiento y cuestiona únicamente la forma de calcular el gasto, dentro del respeto a los objetivos generales de planificación que el Gobierno fija para todas las administraciones.

En efecto, la ley ideada por Montoro y en vigor desde 2013 no establece cómo se debe calcular la magnitud del gasto, sino que solo fija las reglas y deja en manos de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) los criterios exactos. Según esta, el gasto de cada ejercicio se fija aplicando un porcentaje al gasto del año anterior, algo que en el caso de algunos ayuntamientos, como es el caso de Madrid, puede ser en cierto modo perjudicial y muy inflexible: la capital española tiene superávit gracias a unos ingresos muy altos, pero tiene también unos límites de gasto muy elevados. En concreto, hay casi 900 millones de euros que el ayuntamiento actual no puede dedicar a gasto social —su principal prioridad— porque en ejercicios anteriores como 2014 y 2015 —con el PP todavía en el Palacio de Cibeles— el Gobierno dedicó esos recursos a amortizar deuda. El problema es que como el cálculo de la IGAE solo considera el último año, la corporación actual no puede recuperar la capacidad de gasto de 2013, que es lo que necesitaría para aumentar las inversiones.

En este punto, la propuesta de los socialistas pasa por recalcular los límites teniendo en cuenta el gasto de 2013 —primer año de aplicación de la norma— y así fijar un límite para 2016 y 2017 en función del gasto de ese año y obviando los ejercicios de 2014 y 2015. Una ‘solución’ que no vulneraría la ley de estabilidad presupuestaria y se basa en un informe de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIRef), partidaria de la modificación de este cálculo. Según fuentes socialistas, este criterio que actúa como pilar fundamental de la enmienda que presentará el PSOE-M se ha trabajado también en la dirección nacional del partido, ya que podría fundamentar la modificación que en un futuro el grupo parlamentario socialista en el Congreso puede plantear para cambiar la ley orgánica en las Cortes.

En el caso del Ayuntamiento de Madrid, según explican fuentes del PSOE-M, lo más probable es que la formación de unidad popular que gobierna el consistorio acepte la enmienda, ya que es la única vía para contar con su apoyo en la proposición del concejal Sánchez Mato. Aun así, la ‘argucia’ planteada por el grupo de Causapié tan solo pone en marcha la tramitación del plan que, al no incumplir ninguna ley, el ministerio está obligado a gestionar. Otra cosa distinta será si finalmente Hacienda acepta los números. De momento, es una ‘solución’ que, además de poner en marcha la propuesta, consigue que los socialistas sigan brindando su apoyo a Ahora Madrid en asuntos de gran calado, como demostró la nueva portavoz del PSOE-M, Carlota Merchán, cuando en sus intervenciones defendió el plan del delegado Sánchez Mato y criticó duramente las intervenciones de los concejales de Ciudadanos y del PP, Miguel Ángel Redondo e Íñigo Henríquez de Luna, respectivamente.

El aviso de Hacienda

El Ministerio de Hacienda volvió a colisionar con el consistorio madrileño por un tema ciertamente recurrente la semana pasada: los Presupuestos del año que viene. En realidad, las cuentas públicas de 2017 están siendo confeccionadas y no se aprobarán hasta el mes de diciembre, pero Ahora Madrid presentó el pasado jueves las líneas fundamentales acordadas en la Junta de Gobierno y que actuarán de prólogo: incrementar el gasto social, amortizar menos deuda y no bajar, de momento, los impuestos. Sin embargo, la cartera dirigida en funciones por Montoro se apresuró a poner freno al consistorio de la capital recordando en un comunicado a las pocas horas que no aceptó a principios del verano el plan financiero del edil por incumplir la regla de gasto, que está a la espera de recibir uno nuevo y que si los Presupuestos van en esa línea, tampoco los aprobará.

Aunque el Gobierno local aseguró recibir este aviso "con tranquilidad", según explican a este diario fuentes de Ahora Madrid, por estar haciendo las cosas "de forma correcta", la advertencia del Ejecutivo en funciones sorprendió en el Palacio de Cibeles, que todavía no ha presentado un proyecto concreto presupuestario. Lo que pretendía recordar Hacienda es que hace unos meses rechazó el plan económico-financiero de Sánchez Mato —considerado su propuesta estrella— por incumplir lo establecido en la ley de estabilidad presupuestaria y que hasta que no presente uno 'válido' a sus ojos, no podrá aprobar los Presupuestos. Ahora está por ver qué ocurrirá con la novedad que introducirán los socialistas.

Por su parte, las líneas maestras de los Presupuestos en los que trabaja Ahora Madrid prevén aumentar las inversiones un 10,7%, hasta los 459 millones de euros, con respecto al año anterior y continuarán apostando por pagar menos deuda, en concreto 200 millones menos que en 2016. El incremento del gasto social vendría justificado por las previsiones de ingresos, que podrían crecer un 4,65%, gracias a las medidas fiscales puestas en marcha, según explicó el concejal Sánchez Mato hace días tras la Junta de Gobierno.