Sánchez activa contactos con Ahora Madrid para entrar en el Gobierno de Carmena

El PSOE-M sigue colocando piezas en un tablero favorable a su entrada en el Gobierno del Ayuntamiento de Madrid. Aunque todavía no hay pasos oficiales, la afinidad entre el núcleo duro del Ejecutivo local liderado por Manuela Carmena con el equipo de Purificación Causapié es cada vez mayor. El único resquicio discrepante con ciertas políticas de Ahora Madrid lo atesoraba el ya exportavoz socialista de Hacienda, Ransés Pérez Boga, que fue destituido a inicios de semana. La nueva responsable del área, Carlota Merchán -que cuenta con la total confianza de la secretaria general del PSOE madrileño, Sara Hernández, y el propio líder nacional Pedro Sánchez- termina de configurar un conjunto de concejales que apoyan en general la gestión de la candidatura ciudadana que gobierna la capital.

La 'depuración' de Causapié se justificó oficialmente ante la necesidad de que el partido pudiera contar con un responsable económico que se dedicara en exclusiva a la tarea municipal, máxime en estos meses de elaboración de presupuestos. Algo que por otra parte choca frontalmente con la petición de la dirección para que Pérez Boga continúe como adjunto a la portavocía. Fuentes cercanas al ya exportavoz observan con desconcierto el movimiento dado por Causapié y la secretaria general madrileña que, a su forma de entender, solo responde a una estrategia política.

El relevo, según explican las mismas fuentes, fue una decisión aprobada directamente en Ferraz tras varios contactos entre la cúpula socialista y las dirigentes madrileñas. Carlota Merchán cuenta con la total confianza del partido, hasta el punto de que fue candidata al Senado en las pasadas generales de diciembre y concurrió en la lista por Madrid al Congreso como número ocho en las elecciones del 26 de junio. El objetivo del PSOE pasaría en todo caso por mantener las buenas relaciones con el equipo de Gobierno de la capital y preparar el terreno para una futura coalición que, en todo caso, llegará después de la formación del Ejecutivo nacional.

La propia Causapié reconocía hace meses que la posible entrada en la Administración municipal de su grupo se volvería a retomar pasado el verano. El escenario de parálisis política que existe en el Congreso mantiene congelado cualquier movimiento en la corporación local, aunque la destitución de Ransés Pérez, fichaje estrella de Antonio Miguel Carmona, allana todavía más el camino. Aunque la disconformidad del socialista con las políticas económicas y fiscales de Ahora Madrid se ha repetido en más de una ocasión, el detonante que causó la decisión del cese fue su oposición al Plan Económico-Financiero de Carlos Sánchez Mato.

El plan fue ideado por el concejal de Economía de Carmena ante la certeza de que el Gobierno municipal incumplirá lo establecido en la Ley de Estabilidad Presupuestaria del Ministerio de Hacienda, porque para cumplir con la regla de gasto se verían obligados a hacer "recortes brutales", en palabras del edil, que Ahora Madrid no asumirá. La propuesta para los ejercicios de 2016 y 2017 suponía aumentar el techo de gasto social mientras se mantenía la reducción de deuda, ya que la capital española no solo no tiene déficit sino que registra un importante superávit. La corrección prevista en el plan era de casi 500 millones de euros. Sin embargo la ley Montoro estipula el gasto máximo que las administraciones pueden llevar a cabo sin importar la existencia de superávit.

Por ese motivo los socialistas se abstuvieron en el pleno municipal impidiendo sacarlo adelante -PP y Ciudadanos votaron en contra-. Sin duda, aquello supuso un varapalo para Sánchez Mato que vio frustrada una de sus propuestas 'estrella'. Miembros del entorno de Pérez Boga, aseguran que la decisión de los socialistas -respaldando la doctrina de su concejal experto- fue un antes y un después al notar más tensión con el equipo de Gobierno.

A la espera del acuerdo en el Congreso

Fuentes del grupo madrileño reconocen que cualquier asunto de ámbito local dependerá del desenlace en el Gobierno estatal. Aun así, la entrada de los socialistas al Palacio de Cibeles encuentra aspectos positivos en casi todos los escenarios. Incluso si el PP de Mariano Rajoy finalmente lograra hacerse con los apoyos parlamentarios suficientes para formar el nuevo Ejecutivo, el PSOE podría apostar por seguir ejerciendo de contrapeso en grandes ayuntamientos, como desde hace meses hace en el de Barcelona.

Según explican fuentes consistoriales, la llegada de Causapié y su grupo al ejecutivo local no tendría lugar antes de que empezara 2017. Aunque todavía no hay planes específicos, las carteras que más suenan en quinielas internas para caer en manos socialistas serían las de Desarrollo Urbano Sostenible y Cultura, además de la vicealcaldía. En el caso de las dos concejalías, se trata de dos áreas especialmente fuertes para el PSOE-M en las que en su labor de oposición ya han desempeñado papeles importantes, en parte por las crisis que los ediles de Ahora Madrid han tenido que enfrentar.

Cultura pasó meses en el punto de mira, primero con la sustitución de Guillermo Zapata por Celia Mayer y, después, por los distintos episodios que marcaron su gestión: los titiriteros de Carnaval, la Memoria Histórica, el caso de Bollywood, el polémico cese del director de El Español o la revolución interna en Madrid Destino. El PSOE-M dirigido por Causapié puso en entredicho la continuidad de Mayer pidiendo en varias ocasiones su dimisión... a la que finalmente Mayer sobrevivió. En todo caso, la responsable socialista de Cultura, Mar Espinar, ha reprochado con crudeza la falta de una estrategia real de política cultural para Madrid.

En el área de Urbanismo, el PSOE también juega un rol importante. Su responsable, Mercedes González, ha lanzado muchas críticas al actual concejal José Manuel Calvo, quien también ha enfrentado numerosas polémicas en los últimos años. El edificio de Plaza de España y la crisis de Wanda, las viviendas de lujo de Raimundo Fernández Villaverde, la operación Mahou-Calderón o la operación Chamartín -estas dos últimas contaron con el beneplácito de los socialistas, pese a que la segunda sigue bloqueada ya que Ahora Madrid 'asumió' en parte los planes originales del PSOE-M-.