Aguirre boicotea la rueda de prensa de Carmena y la alcaldesa le da la razón

Visita sorpresa a la rueda de prensa convocada por la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, para presentar el borrador que va a regular la nueva Oficina Municipal contra el Fraude y la Corrupción. La líder del PP, la concejala Esperanza Aguirre, se ha presentado durante el acto acompañada de todos sus ediles y colaboradores para protestar contra la convocatoria organizada por Carmena y la portavoz socialista, Purificación Causapié.

A Aguirre le ha sentado mal que la alcaldesa interrumpiera el pleno municipal para presentar ante la prensa el borrador de la nueva oficina y que informara antes a los medios que a la oposición. El revuelo ha sido mayúsculo y la incomodidad de Carmena y Causapié, notable. Tanto, que la alcaldesa ha reconocido que se ha equivocado, que "no lo volverá a hacer", y que ha sido un error marcharse del pleno (de carácter mensual). "Lo he hecho porque había citado a los periodistas y me parecía descortés no acudir, pero no volverá a pasar", ha señalado Carmena.

Aguirre mostraba una sonrisa de satisfacción, sabedora de su triunfo mediático. La líder del PSOE, por su parte, criticó la actitud de Aguirre y aseguró que ella y sus concejales nunca interrumpirán una rueda de prensa y denunció que la lideresa consiguió lo que quería: que se hable de su espectáculo y no de la nueva oficina contra el fraude y la corrupción.

Aguirre ha comparecido después ante la prensa para denunciar la "falta de respeto" que supone este "hecho antidemocrático", al que, según ella, la portavoz socialista ha arrastrado a la alcaldesa porque "Causapié no tiene manera de tener un espacio en los medios". El equipo de Aguirre asegura que se han presentado en la rueda de prensa como meros "observadores". Algún concejal del PP llegó a aplaudir irónicamente a Carmena y a Causapié.

Dependerá del pleno

La nueva oficina dependerá directamente del pleno municipal, y actuará "con independencia" respecto del resto del ayuntamiento a partir de las denuncias de ciudadanos, empresas, asociaciones y medios de comunicación. Tendrá un director que será elegido por tres quintas partes del pleno y que estará en el cargo durante cinco años. Si hay indicios, podrá investigar durante un plazo máximo de nueve meses, requiriendo información o documentación, haciendo entrevistas a los empleados municipales o inspecciones en centros de trabajo.

No podrá desempeñar funciones que corresponden a la autoridad judicial, a la Fiscalía o a la Policía Judicial, ni investigar hechos mientras haya una causa judicial abierta (y si se abriera, interrumpiría sus actuaciones). La oficina contará también con cinco vocales seleccionados entre personas "de reconocida trayectoria en la lucha contra la corrupción" que no ostenten cargo político.