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La revolución de Carmena en el Club de Campo tendrá que esperar
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EN OCTUBRE SE ACEPTARON 800 NUEVOS ABONADOS

La revolución de Carmena en el Club de Campo tendrá que esperar

La anunciada transformación del Club de Campo para abrirlo a la ciudadanía aún está en una embrionaria fase de estudio. Los presupuestos de 2016 tampoco hacen presuponer cambios

Foto: Campo de golf del Club de Campo Villa de Madrid. (EFE)
Campo de golf del Club de Campo Villa de Madrid. (EFE)

La propuesta de Ahora Madrid para abrir el Club de Campo a toda la ciudadanía ha dejado de ser una prioridad. El Gobierno municipal no contempla cambios de calado en la gestión del exclusivo recinto deportivo a corto plazo. La elaboración del nuevo plan de trabajo todavía se encuentra en una fase embrionaria, con apenas unos vagos objetivos que dejan en el aire cuál será su futuro y si se llevará a cabo la pretendida transformación. No hay prisas, y el orden del día del consejo de administración que se celebrará la próxima semana se ceñirá a cuestiones meramente administrativas.

Los presupuestos municipales del próximo año tampoco hacen presuponer que en 2016 dejen de ser los abonados quienes sostengan financieramente estas instalaciones de titularidad municipal pero de uso exclusivo de sus socios. En el proyecto de presupuestos no hay ninguna partida específica destinada al Club de Campo, mientras que la media para las instalaciones de recintos polideportivos ronda los 500.000 euros.

El nombramiento de Joaquín Ballesteros Torres como nuevo gerente, el pasado 16 de octubre, fue acompañado de la aprobación de los presupuestos para el próximo año, que prevén un resultado del ejercicio de 2.776.399 euros. Su diseño, aprobado por la Junta Directiva, se enmarca en “una adecuada utilización de los recursos públicos, así como la promoción y diversificación de los programas e iniciativas”, según se justificó.

Tras la incorporación de Ballesteros, en sustitución de Alfonso Segovia, ya se rebajaron las pretensiones iniciales del Gobierno municipal, al limitarse a señalar el objetivo de ampliar los “perfiles de usuarios”, junto a la transparencia en la gestión y la racionalización de su uso. La propuesta de revisar la concesión del Club de Campo, como se incluía en el programa de Ahora Madrid, era relegada al olvido. Una concesión que fue ampliada por el alcalde Álvarez del Manzano hasta 2025 y posteriormente por Ana Botella hasta 2034.

La ambigüedad de la anunciada apertura a nuevos “perfiles de usuarios” se ha traducido hasta el momento en una ampliación del número de abonados. El pasado mes de octubre se sumaron 800 nuevos abonados a los 23.500 con los que ya contaban estas instalaciones. Un aumento de las plazas que responde a una convocatoria aprobada por el anterior gobierno municipal entre los meses de enero y marzo.

Desde el departamento de Cultura niegan que esté previsto hacer nuevas convocatorias de plazas para aumentar el número de abonados. La edil de Cultura, Celia Mayer, es la representante del Ayuntamiento en la Junta General de Accionistas, donde también ejerce de consejera junto a la concejala de Medio Ambiente, Inés Sabanés, el de Economía, Carlos Sánchez Mato, el director general de Deportes, Francisco Javier Odriozola, la directora general de Sector Público, Marta Fernández-Pirla, y José Antonio Haro.

El Club de Campo ha estado en el punto de mira de los grupos políticos de la oposición por los privilegios de aquellos VIP que usan las instalaciones gratuitamente

Esta empresa semipública depende en un 51% del Ayuntamiento de Madrid, que sólo entre los cuatro directores del centro (deportes, comercial, financiero y régimen interior y personal) desembolsa 298.968 euros anuales del erario público, según los últimos presupuestos. Precisamente, estos cuatro directores siguen siendo los mismos que durante el mandato de Botella, por lo que ni siquiera se ha producido un cambio integral del equipo ejecutivo. Patrimonio del Estado y la Real Sociedad Hípica Española se reparten a partes iguales el 49% restante. Los pasos para convertir el elistista reciento deportivo en unas instalaciones municipales más, de acceso libre a toda la ciudadanía, son lentos, y el siguiente todavía será el de cambiar los cargos de confianza en el equipo ejecutivo.

El Club de Campo ha estado en el punto de mira de distintos grupos políticos de la oposición por los privilegios de aquellos VIP que utilizan las instalaciones de forma gratuita (mayoritariamente políticos, sus familias, y hasta periodistas afines), así como por ser de uso exclusivo de los socios, aunque en los últimos años se han abierto al público las escuelas deportivas. Dirigido durante las últimas dos décadas por personas cercanas al Partido Popular, el Ayuntamiento también ha financiado tradicionalmente la ampliación y la mejora de las instalaciones.

La propuesta de Ahora Madrid para abrir el Club de Campo a toda la ciudadanía ha dejado de ser una prioridad. El Gobierno municipal no contempla cambios de calado en la gestión del exclusivo recinto deportivo a corto plazo. La elaboración del nuevo plan de trabajo todavía se encuentra en una fase embrionaria, con apenas unos vagos objetivos que dejan en el aire cuál será su futuro y si se llevará a cabo la pretendida transformación. No hay prisas, y el orden del día del consejo de administración que se celebrará la próxima semana se ceñirá a cuestiones meramente administrativas.

Manuela Carmena Ayuntamiento de Madrid Celia Mayer
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