Aguirre será la candidata del PP a la alcaldía de Madrid y Cifuentes a la Comunidad

Mariano Rajoy accede al final a la petición de Esperanza Aguirre de encabezar la lista del PP a la alcaldía de Madrid, pero se decanta por equilibrar ese continuismo con el cambio de aspirante a la presidencia de la Comunidad de Madrid: Ignacio González tiene que ceder para que sea Cristina Cifuentes, actual delegada del Gobierno, quien opte a ocupar despacho en la Puerta del Sol.La decisión se ha dado a conocer a las ocho de la tarde, después de un día en el que el órgano que preside Alicia Sánchez Camacho ha ido ratificando a los candidatos propuestos por las direcciones regionales del partido.

El Comité Electoral Nacional del PP ha sancionado las decisiones tomadas por González desde antes de que volviera a removerse las informaciones sobre su ático en Estepona. Como adelantó El Confidencial, el mes pasado en la dirección del partido les parecía “excesivo” el dúo Aguirre-González, aunque el presidente de la Comunidad de Madrid haya hecho una buena gestión desde el cargo heredado cuando la lideresa dio “la espantada” en el primer tercio de la legislatura.

En fuentes de los populares reconocen que Rajoy accede a la oferta de Aguirre por entender que es la mejor candidata posible para reconciliarse con las bases electorales del partido en Madrid, la clave para salvar los próximos comicios en la capital, en la región y en el resto de España.

“Ha hecho lo mejor para el partido”, repiten en medios de Génova para defender la decisión de su jefe de aceptar la oferta de Aguirre, aunque sea la dirigente del PP más crítica con la dirección, y sacrificar a González, un disciplinado gestor que últimamente sólo se peleaba con Cristóbal Montoro.

Cristina Cifuentes es la apuesta de Rajoy para, a medio plazo, relevar a Aguirre de la presidencia del PP de Madrid con una dirigente que aporta la renovación que en Génova consideran necesaria para ganar los comicios primero y recuperar después el control sobre la organización madrileña. Siempre sobre la base de que el partido está obligado a imponerse en la capital si quiere prolongar su hegemonía electoral en la región.

El presidente del Gobierno ha jugado al despiste hasta el último minuto. Como adelantó El Confidencial el lunes, en fuentes del PP apuntaban que tenía el jueves hueco en la agenda para comunicar sus decisiones a los interesados y que en el comité electoral previsto para el viernes se podían cerrar las listas.

Las informaciones sobre el ático de González hicieron pensar luego que las candidaturas de Madrid volverían a ser aplazadas para que no pareciera que el presidente de la Comunidad se quedaba fuera por ese caso. Pero al final, entre la tarde-noche de jueves y la mañana de este viernes, entre Rajoy y Cospedal despacharon el asunto con los principales interesados.