Sánchez y Clavijo se reunirán este viernes en La Palma para abordar la crisis migratoria

Pedro Sánchez y Fernando Clavijo se reunirán este viernes en La Palma para abordar la crisis migratoria en Canarias. El encuentro se ha anunciado este martes, una semana después de que el presidente del Gobierno aterrizase en el archipiélago para pasar sus vacaciones y varios días después de que el dirigente autonómico solicitara la cita. El tema central será la llegada masiva de inmigrantes a las islas, al borde del colapso con un 126% de irregulares más que hace un año.

Clavijo ha dado cuenta de la reunión tras una visita, precisamente con las entidades que gestionan los centros de menores tutelados en Canarias, que rozan los 6.000 en este momento y se ha convertido en una cuestión de Estado desde hace meses. "Esto lo normaliza todo. Estoy encantado porque en el seno de la normalidad de un presidente del Gobierno de España y otro de una comunidad autónoma podamos tener esa charla, este encuentro", ha declarado el presidente regional, que ha avanzado que espera despachar "asuntos importantes", según recoge EFE.

La crisis migratoria en Canarias ha llegado al límite. Las islas, como ha informado El Confidencial, ya habían recibido en el inicio del verano a un total de 20.000 inmigrantes irregulares, que suponían dos tercios del global de los que llegan a España, con un incremento superior al 120% respecto al ejercicio anterior, que se mantiene estable hasta la fecha.

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Es un problema que lleva enquistado más de un año, con el añadido de los miles de menores que desembarcan en la zona, y sin visos de mejora. El año pasado, según el Ministerio de Interior, fueron 40.027 las personas que entraron a España por el archipiélago y la previsión es que la cifra se supere los próximos meses, cuando las condiciones para navegar sean favorables.

Fernando Clavijo llevaba varios días reclamando esta reunión, sorprendido de que Pedro Sánchez estuviera de vacaciones en Lanzarote y no hubiera hecho ningún acercamiento para abordar la crisis migratoria. Tanto, que el presidente del Gobierno sí recibió a Salvador Illa. "Me costaría creer y entender que se fuese de las vacaciones de Lanzarote y no pudiésemos tener esa media hora o esa hora para despachar esos asuntos", dijo el dirigente de Coalición Canaria 24 horas antes. El propio Clavijo ha detallado este martes que ha sido el gabinete de la Moncloa quien se puso en contacto con el Ejecutivo de Canarias para cerrar la cita.

Temas a tratar

Los asuntos a despachar son varios. En primer lugar, el colapso que padecen las islas, pero también y muy especialmente las dificultades para asistir a los miles de menores no acompañados que llegan al archipiélago, los conocidos como menas. El Gobierno de Clavijo reclama una estrategia nacional que involucre a todas las comunidades autónomas, de forma que asuman su parte de responsabilidad y acojan a los adolescentes.

En ese sentido, una de las posibilidades que se plantean a corto plazo es que el Ejecutivo de Sánchez lleve al Consejo de Ministros del 27 de agosto el decreto migratorio que permitiría el traslado de los menores a las distintas regiones a través de la figura del decreto ley. No obstante, el apoyo del PP o Junts, que en julio rechazaron la reforma de la Ley de Extranjería en el Congreso, será indispensable. Y nada indica que vaya a cambiar.

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Moncloa, que ha guardado un silencio sepulcral hasta ahora, no ha dado ningún detalle sobre sus planes para Canarias, Ceuta y Melilla. Tampoco sobre el decreto o la ley de extranjería. El PP, por su parte, ha presentado este mismo martes un plan de control de inmigración que amplía la asistencia a los menores y establece una actuación integral para atajar la crisis. Explorar cualquier apoyo al Gobierno, aseguran los populares, está condicionado a su puesta en marcha. Entre las medidas incluidas en la proposición no de ley destacan la declaración de la emergencia migratoria en toda España y la solicitud de ayuda a la UE, entre otras.

Pedro Sánchez se reunirá con Fernando Clavijo 48 horas antes de partir hacia Mauritania, Senegal y Gambia, con una minigira entre el 27 y el 29 de agosto para tratar la crisis en los países de origen y tránsito. Es la segunda vez que lo hace en seis meses, tras otro viaje con Ursula von der Leyen, donde comprometieron la movilización de 500 millones de euros para el desarrollo económico y social del Estado africano.