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Bocatas de centollo y de buey con setas: cocina de cuchara entre pan y pan en este bar de A Coruña
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LA ESQUINA DE VALENTINA

Bocatas de centollo y de buey con setas: cocina de cuchara entre pan y pan en este bar de A Coruña

De la calle Galera a la playa del Orzán hay 500 metros, apenas tres minutos caminando. Allí, Nacho Moreira ha cogido el mar Atlántico y lo ha metido en un bocata. No en uno cualquiera; los suyos son probablemente los más originales de España

Foto: Un bao de centollo. (Laesquina)
Un bao de centollo. (Laesquina)

Imaginen darle un mordisco a un bocadillo con un centollo dentro. Uno con la forma y patas de este crustáceo, pero sin las durezas de la cáscara. En La Esquina de Valentina es uno de los bocados más célebres de la carta, y en pan brioche. Por ocho euros, minimariscada con dos unidades.

¿Les pica la curiosidad? Pues sigamos. También se pueden dar el capricho y comerse un bocadillo de caballa envuelto ―y cocido― en algas que sabe a salitre y a yodo (9,50 euros). O el más difícil todavía, de caldeirada de raya (9,50), con base de guiso de pimentón y laurel, de esos de mojar pan. Tampoco desmerece su empanada rara (6 euros). ¿Cómo de particular? Pues es abierta, descapotable, sobre una masa sin fermentar, fina y horneada como base crujiente sobre la que combinar sabores marineros con zamburiñas laminadas y base de sofrito.

"Mi abuelo, que era de A Pobra do Caramiñal [un puerto del sur de A Coruña que se asoma a la ría de Arousa] me contaba que en su zona, en las tabernas, se hacían bocadillos con los pescados más humildes", rememora Nacho Moreira tras la barra antes de la avalancha del mediodía. Habla mientras reboza calamares "a su manera" y pica los vegetales frescos que son la base de una cocina de cuchara metida en pan.

placeholder Bocata de Caldeirada de Raya. (La esquina)
Bocata de Caldeirada de Raya. (La esquina)

Hace cuatro años que Nacho Moreira Silva (A Coruña, 1995) se embarcó en la aventura de ser su propio jefe con un proyecto tan personal como original que el tiempo ha respaldado dándole muchas alegrías después de unos comienzos marcados por la pandemia y sus restricciones. Entonces tenía 25 años, pero no partía de cero.

Se había curtido desde bien temprano en las cocinas de varios locales de Madrid, Menorca o Londres, formándose junto a chefs de estrella Michelin como Dabiz Muñoz, en el StreetXO, Dani García, en Smoked Room, o Javier Estévez. Su primer contacto con los fogones fue como voyeur. Era ayudante de sala en un buen restaurante de la capital británica, pero descubrió que lo que realmente le fascinaba era lo que pasaba en la cocina. No tenía formación, pero insistió hasta que le dejaron ayudar y ya no dejó el delantal.

placeholder Bocatas en el bar. (La esquina)
Bocatas en el bar. (La esquina)

Eligió un pequeño local en la zona peatonal de A Coruña, donde tapear es una religión de lunes a domingo los 365 días del año. La Esquina de Valentina está en el cruce de las calles Galera y Torreiro. Es un sitio moderno, de paso, con el que es difícil no tropezar callejeando alrededor de la plaza de María Pita. Una zona con rival difícil de batir: el mítico La Bombilla. Uno de los locales con más solera de la ciudad por rapidez y precio, donde una sola croqueta XXL llena el buche y las servilletas salen de botes de Colacao desde 1966.

El espacio del local, céntrico pero escaso de metros, con apenas tres mesas en el interior, una barra y una cocina abierta donde Nacho manda y Pablo, Lidia y Jesús ayudan, le llevó a plantearlo como una neobocatería. O lo que es lo mismo, bocados de antaño revisados por la cocina moderna. “Todo lo que verás en esta carta (12 platos de entre seis y diez euros) se come con las manos y los vinos están en la barra. Los postres y lo que está fuera de la carta te lo contamos nosotros”. La filosofía del local ya la dejan clara en sus redes sociales. Una clientela fija de edades comprendidas entre los dos y los 80 años es el motor de su negocio.

placeholder Una empanada rara. (La esquina)
Una empanada rara. (La esquina)

No se preocupen los carnívoros porque también hay bocadillos de albóndigas de buey con setas (10 euros), de molleja guisada al estilo berciano o un brioche de chuletón por poco más de 9 euros. Casi nada. Subimos la apuesta para los veganos con un bao de guiso de curry, hamburguesa de alcachofas (9,50) o unas croquetas de jamón sin jamón deliciosas, que ya es difícil. Todo se prepara el día y en el momento, a la vista del cliente, aunque la mejor forma de disfrutar la tapa es en una de las mesas de la terraza.

¿Y quién es la Valentina que da nombre a la esquina? Tendrán que sentarse con Nacho para averiguarlo. Hay que llegar y tomar asiento porque no se admiten reservas. Y recuerden, aquí la cerveza combina mejor que el vino.

Comida 4

Precio 5

Trato 5

Diseño 3

Dirección, Rúa Galera 14, A Coruña

Peatonal. Cerca de la plaza de María Pita

Teléfono: 881 29 39 92

https://www.laesquinadevalentina.com

Imaginen darle un mordisco a un bocadillo con un centollo dentro. Uno con la forma y patas de este crustáceo, pero sin las durezas de la cáscara. En La Esquina de Valentina es uno de los bocados más célebres de la carta, y en pan brioche. Por ocho euros, minimariscada con dos unidades.

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