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Tiroteo, pasquines y amenazas: la angustiosa vida de un edil gallego clave para una alcaldía
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asegura que el acoso tiene fines políticos

Tiroteo, pasquines y amenazas: la angustiosa vida de un edil gallego clave para una alcaldía

La Guardia Civil investiga si la campaña de acoso contra un concejal de Ciudadanos en la localidad de Cee (A Coruña) es de origen político o empresarial. Él denuncia que es por su condición de representante público

Foto: Un agente de la Guardia Civil. (Archivo)
Un agente de la Guardia Civil. (Archivo)

¿Conflicto empresarial o presiones políticas? Esa es una de las preguntas que trata de responder la investigación del caso del concejal de Cee (A Coruña) Juan Ramón Hermida Fandiño, único representante de Ciudadanos en la fragmentada corporación del municipio, de 7.500 habitantes. Desde este verano viene denunciando una campaña de acoso de las que parecen inspiradas en el cine de gánsteres, que comenzó con una carta anónima con una bala en su interior y derivó el 28 de enero en tiroteo. La Guardia Civil no descarta ninguna hipótesis. Él sostiene que hay que buscar a los culpables en el mundo de la política.

El de Hermida es un voto clave para un eventual cambio en la alcaldía de Cee, ahora gobernado en minoría por Margot Lamela, del PSOE, con cuatro concejales. El runrún de la moción de censura circula por la localidad coruñesa desde hace meses, pero para hacerla efectiva, al PP, con tres ediles, no le basta con el apoyo de los tres de Independentes por Cee (IxC), del exalcalde Ramón Vigo. Descontado el BNG, que no apoyará la operación, precisa el voto favorable del representante de Ciudadanos, que se resiste a apoyar a los populares. Esa compleja situación es la que ha hecho que la Policía Judicial —que no descarta ninguna hipótesis— investigue si la campaña de acoso contra Hermida responda a motivaciones políticas, una posibilidad que el propio concejal siempre ha deslizado y que esta semana defendió abiertamente, después de meses de silencio.

Los problemas para Hermida comenzaron a finales del último verano, cuando recibió supuestamente un sobre con una carta anónima y una bala de 9 milímetros parabellum en su interior. Según relata el concejal —que en ese momento no denunció los hechos públicamente—, la carta le instaba a retirase de la política y le advertía que, de lo contrario, un miembro de su familia pagaría las consecuencias. El siguiente episodio de la campaña contra el edil se produjo en diciembre, cuando aparecieron por todo el pueblo carteles con su cara y la palabra "corrupto" y varias pintadas intimidatorias.

La situación se agravó el 28 de enero. A las tres de la mañana, una o varias personas se acercaron a su casa y la emprendieron a tiros

Pero la situación se agravó la madrugada del pasado 28 de enero. Pasadas las tres de la mañana, una o varias personas se acercaron a su casa en un vehículo, la emprendieron a tiros y escaparon a toda velocidad. Las balas, del mismo tipo que la que recibió en el sobre, alcanzaron la fachada de la vivienda y un vehículo de su propiedad. Una de ellas, quizás perdida, acabó alojada en el cuerpo de su perro. Palabras mayores. Fue un susto tremendo para el concejal, que convive con su mujer, dos hijos menores y sus padres.

Pese a las manifestaciones realizadas por el edil sobre una motivación política, la investigación no descarta que los hechos tengan que ver con la actividad profesional de Heredia, propietario, gerente y administrador único de una empresa de carpintería con sede social en Barcelona, que trabaja con varios autónomos. El hecho de que se conociera que la Guardia Civil no descarta esta hipótesis provocó que Hermida, que hasta esta semana se había negado a realizar declaraciones, saliese a descartar que las amenazas tengan nada que ver con sus negocios.

Foto:  (Foto: EFE)

"Es mentira, tengo una empresa que es mía, no hay socios y continúa operativa y en vigor en Barcelona", declaró este jueves a 'La Voz de Galicia', en respuesta a una información del mismo periódico sobre un supuesto agujero por importe de 500.000 euros que investigaría la Guardia Civil. El concejal lo niega de forma tajante. "No hay ninguna deuda, no hay problemas financieros, se puede comprobar todo fácilmente con Hacienda", rebate.

El político de Ciudadanos resalta el hecho de que la carta con la que comenzó la campaña en su contra incluyera claramente la palabra "dimite", lo que le hace denunciar que se trata de un acoso con motivaciones políticas, aunque admite que no lo puede demostrar. “Sospechas tengo muchas, pero no tengo pruebas, y, por lo tanto, no lo puedo decir", agregó en sus declaraciones. Pero añadió: "Recibes una carta con una bala, colocan panfletos por todo Cee con pintadas de 'corrupto', entraron en mi casa y con una pata de cabra destrozaron un coche que tenía guardado en el garaje y luego, los nueve disparos en plena noche, en concreto a las tres y veinte de la madrugada…".

Aunque los socialistas gobiernan en minoría, el edil de Cs se ha convertido en un respaldo recurrente del gobierno municipal

Juan Ramón Hermida está convencido de que los autores del tiroteo solo pretendían atemorizarlo, pero la situación se hace insostenible para el concejal. Fuentes conocedoras de la investigación confirmaron la apertura de diligencias a finales del mes de enero, después del episodio de los nueve disparos. Los hechos están judicializados, por el momento no hay detenidos y la causa se mantiene bajo secreto.

El fantasma de una moción de censura sobrevuela Cee desde el día que la socialista Lamela se hizo con la alcaldía, ante el desacuerdo entre PP, Independientes por Cee y Ciudadanos. Aunque los socialistas gobiernan en minoría, el edil de Cs se ha convertido en un respaldo recurrente del gobierno municipal, al que ha apoyado en la aprobación de los presupuestos. Las desavenencias de Hermida con el líder de los populares, Antonio Domínguez, son públicas y dificultan el acuerdo para desbancar a la alcaldesa, pero a los investigadores les cuesta creer que estén en el origen de los ataques contra Hermida. El que perpetraron contra su casa parece también más propio de una banda organizada, pero el afectado insiste en que es una campaña de presión relacionada con la política y la Guardia Civil aún no ha descartado ninguna alternativa.

¿Conflicto empresarial o presiones políticas? Esa es una de las preguntas que trata de responder la investigación del caso del concejal de Cee (A Coruña) Juan Ramón Hermida Fandiño, único representante de Ciudadanos en la fragmentada corporación del municipio, de 7.500 habitantes. Desde este verano viene denunciando una campaña de acoso de las que parecen inspiradas en el cine de gánsteres, que comenzó con una carta anónima con una bala en su interior y derivó el 28 de enero en tiroteo. La Guardia Civil no descarta ninguna hipótesis. Él sostiene que hay que buscar a los culpables en el mundo de la política.

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