Dos muertos y 30 heridos al explotar una casa con material pirotécnico en Tui

Los servicios de rescate encontraron en la mañana de este viernes una segunda víctima mortal en el mismo domicilio de Paramos (Tui, Pontevedra) en el que este miércoles apareció una mujer muerta tras una explosión de material pirotécnico almacenado de modo ilegal en un anexo a una vivienda particular, según fuentes de los servicios de rescate. A primera hora de este viernes, se retomaron los trabajos de rescate y desescombro, ya que los servicios de urgencias no pudieron entrar en todas las casas por motivos de seguridad hasta que los equipos del Tedax asegurasen que ya no había peligro de más explosiones.

El caos es total en la zona y hay cuantiosos daños materiales, tanto en el lugar del suceso como en varios kilómetros a la redonda. La onda expansiva llegó a ocasionar desperfectos en locales en pleno centro de Tui, a kilómetros de donde se produjo la explosión, que se escuchó en prácticamente todo el sur de la provincia. Por el momento hay un detenido. Se trata de Francisco R., dueño de la pirotecnia que fue clausurada hace un año en una parroquia muy próxima al lugar de la explosión. Fue trasladado por agentes de la Guardia Civil a la comandancia de Pontevedra, acusado de homicidio por imprudencia.

La explosión se produjo en la vivienda de una hija del propietario de una empresa pirotécnica de Baldráns que fue precintada hace unos años por orden judicial, según informó Enrique Cabaleiro, alcalde de Tui hasta el pasado mes de octubre. Cabaleiro señaló que el pasado año la empresa, ubicada a pocos kilómetros del lugar de los hechos, cerró por orden judicial, después del contencioso emprendido por un vecino de la zona. Según su relato, todo indica que el dueño empezó a utilizar la casa de su hija para el almacenamiento clandestino de grandes cantidades de material pirotécnico. El excalcalde también aseguró que durante su mandato no se registró ninguna petición de licencia para el almacenamiento en el lugar donde se produjo la explosión.

“Todo parece indicar que el responsable de la empresa, una vez que esta quedó precintada, trasladó a esa vivienda particular de un familiar o bien la actividad o, al menos, el almacenamiento del material pirotécnico”, denunció el exalcalde, que también subrayó que, al no reunir esa casa las condiciones exigidas para el almacenamiento de material explosivo, los daños han sido mucho mayores. “Por eso se ha llevado por delante todo un barrio, unas 10 o 15 casas”, lamentó.

De acuerdo con la información del 112 Galicia y varios testigos, la explosión se produjo a las 16:25. Fueron alertados los Bomberos de Baixo Miño y de Vigo, Guardia Civil y Policía Local de O Porriño, así como equipos desplazados desde Portugal. También se informó a Urxencias Médicas, que ha desplazado al lugar seis ambulancias y dos helicópteros medicalizados, el H3 y el H4.

El desconcierto en la zona es total. El estallido causó desperfectos en las casas del entorno, algunas de las cuales han ardido por completo. Los vecinos han sido desalojados ante el riesgo de que se produzcan derrumbes. La onda expansiva alcanzó tales dimensiones que provocó la rotura de cristales en un radio de cuatro kilómetros. El temblor se notó en localidades como Cangas o Sanxenxo, situada hasta a 70 kilómetros del lugar del suceso.

El accidente se produjo en la zona de A Torre, en la parroquia tudense de Paramos. Una gran columna de humo es visible en toda la comarca del Baixo Miño, en la frontera con Portugal. La zona quedó sembrada de cañas de las que se utilizan para el lanzamiento de las bombas de palenque.

Una vecina de una casa muy próxima al lugar del suceso llamada Sonia relató a la Radio Galega que cerca de las 4:30 se produjo la gran explosión. “Fue horrible. Estábamos viendo la tele y de repente se escuchó como un trueno grandísimo. Se nos cayo la casa encima. No sabía qué hacer, si atender al niño, a la niña… Luego vi que a la niña le estaba ardiendo el pelo y la camisa, todo…”. Una vez que lograron salir de la casa, auxiliaron a una mujer con problemas de movilidad a la que ayudan y que vive en una casa próxima, a la que pudieron evacuar minutos antes de que ardiera su casa, y a continuación lograron desatrancar la puerta de otro vecino al que le cayo la placa de toda la planta encima, y que salió con una brecha en la cabeza.

Según este testimonio, el lugar de la explosión no es un almacén oficial de artefactos pirotécnicos, sino una casa particular “donde se guardaban fuegos de artificio”. “Se sabía que guardaban algo, pero no que podía pasar algo como esto”, señaló la vecina.