La Comunidad Valenciana impone nuevas restricciones: toque de queda, confinamiento y reuniones

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"Ni Nochevieja ni 'tardevieja'". Así se expresó el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, al pedir prudencia a los valencianos en Nochevieja dadas las cifras "muy duras" que se estaban registrando a nivel epidemiológico en el actual curso de la pandemia del covid-19. la última semana del año. A pesar de que entonces decidió mantener las mismas medidas restrictivas en la región, ahora, de cara al Día de Reyes, el ejecutivo autonómico no ha querido arriesgarse a que la cifra de contagios se dispare y ha optado por endurecer las medidas aún más.

La Comunidad Valenciana sigue siendo la única región que ha estipulado que no estarán permitidos los desplazamientos de familiares o allegados en su territorio durante las Navidades, una medida que finalmente no se ha replicado en el resto de la geografía española, aunque algunas comunidades como Castilla y León, la Región de Murcia o Extremadura sí que han decidido vetar la entrada de allegados, permitiendo los movimientos de familiares. De acuerdo con lo anunciado por la Generalitat valenciana, el confinamiento perimetral que ya impedía entradas y salidas del territorio que no estuviesen motivadas por las causas de fuerza mayor recogidas en el decreto del estado de alarma se prorroga hasta el 31 de enero, superadas las fiestas navideñas.

Uno de los principales cambios que ha introducido la Generalitat tras los últimos contagios se refiere al toque de queda, que, a partir de este jueves será hasta las 22:00 horas de la noche, una medida que también afectará a los establecimientos, que a partir de ese mismo día tendrán que cerrar a las 17:00 horas de la tarde, se prohíbe fumar en las terrazas y se reduce al 30% el aforo permitido en todos los comercios. Aunque sí se permitió cierta flexibilización horaria durante la noche de Fin de Año (hasta la medianoche), el Gobierno regional no ha repetido en esta ocasión.

Pero esas no son las únicas restricciones que este mismo martes ha anunciado la Comunidad Valenciana. Además del adelanto del toque de queda y de la prórroga del cierre perimetral, Puig ha informado que también se restringirá el número de personas por grupo a cuatro en las mesas de los locales de hostelería, mientras que en el resto de reuniones sociales el número máximo permitido seguirá siendo de seis.

Asimismo, desde esta semana pasarán a estar confinados otros 26 municipios valencianos durante 14 días: en la provincia de Castellón: Borriol, Atzeneta del Maestrat, Soneja y Jérica; en Alicante: Alcoi, Castalla y Polop y en Valencia: Llíria, Massanassa, Ayora, Utiel, Sedaví, Sollana, Guadassuar, Oliva, Daimús, Xàtiva, Ontinyent, Sinarcas, Quatretonda, Canals, Benigàmin, Cheste, Moixent, Anna y Bonrepós i Mirambel; todos ellos confinados junto a los municipios de Alfafar, Llocnou de la Coronay Benetússer, que serán confinados junto a Sedaví y Massanasa. Pero el límite de la movilidad no será lo único que impongan en el total de 29 localidades restringidas, ya que, además, en ellos se cerrarán bares, restaurantes y otros locales salvo que presten servicio de comida para llevar, así como gimnasios, parques o jardines, centros sociales y casinos.

Así lo ha anunciado tras una reunión de la Comisión Interdepartamental, y ante las últimas cifras de evolución que reflejan una situación "grave y preocupante", con un aumento de la incidencia de un 17% en dos semanas, un crecimiento de la hospitalización del 52% y con 196 muertos en una semana. El president ha justificado las nuevas restricciones en que la situación de la pandemia en la Comunitat es "grave" y "difícil" y la transmisión crece "de manera exponencial", lo que exige una respuesta "contundente, ponderada e inmediata" por parte del Consell.