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De cuándo viajar entre provincias a volar al extranjero: guía de las vacaciones de verano
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De cuándo viajar entre provincias a volar al extranjero: guía de las vacaciones de verano

España ya conoce las fechas de apertura de fronteras con el espacio Schengen: a pocos días de que arranque oficialmente el verano, este año las vacaciones se organizan contrarreloj

Foto: Playa de la Almadraba de Alicante, con el castillo de Santa Bárbara al fondo. (EFE)
Playa de la Almadraba de Alicante, con el castillo de Santa Bárbara al fondo. (EFE)

El calor parece ya haberse asentado en la península y el verano está oficialmente a la vuelta de la esquina; así que no es de extrañar que tan cerca del final de la primavera miles de españoles empiecen a hacer sus cálculos y cábalas para ver dónde pasarán las vacaciones del verano. Sin embargo, después de lo que ha sido una más que atípica Semana Santa, sin procesiones ni multitudes; de 'puentes' y festivos sin desplazamientos a pueblos o segundas residencias y, en definitiva, con todo un país completamente confinado, la desescalada ofrece un horizonte algo más halagüeño de lo que muchos esperaban, especialmente tras la llegada de los primeros turistas internacionales a Baleares.

Con una mayor libertad, son muchos los que empiezan a hacer búsquedas de ofertas para viajar durante las vacaciones de verano, o a planificar ideas de pequeños viajes con los que sacar partido al periodo más cálido del año. Todos los españoles se grabaron a fuego en su mente que hasta la denominada 'nueva normalidad' no se iba a poder viajar con total libertad por todo el país, y que esto iba a ocurrir una vez que todas las comunidades autónomas superaran la fase 3. Mientras un 70% del país se encuentra ya en esta última etapa, y Galicia en la 'nueva normalidad', Madrid y Barcelona la saltarán para pasar directamente a esa 'nueva normalidad'. ¿La razón? Que desde el 21 de junio no habrá más estado de alarma, por lo que ya serán las comunidades autónomas las que impondrán sus propias restricciones, en caso de ser necesario.

A partir de ese día, la libertad entre provincias por todo el país será total y absoluta, pero ¿qué ocurre si lo que uno está pensando es viajar al extranjero?

¿Viajar por España? Sí, pero...

Mientras en casi toda España ya se permiten ciertos movimientos en coche, los trayectos entre provincias de diferentes comunidades autónomas no estarán autorizados hasta el día 21 de junio. No obstante, en algunas, como Andalucía, País Vasco o Galicia, sí está permitido incluso antes de esa fecha moverse entre provincias sin salir de las fronteras de la comunidad; esto implica que muchos españoles ya podrían disfrutar de algo parecido a unas vacaciones, eso sí, sin salir de su comunidad; aunque pueda parecer nimio, lo cierto es que estos 'permisos' darán opciones a los residentes en provincias de interior a poder desplazarse a la costa y acudir, por ejemplo, a las playas en esta fase, sin necesidad de esperar a la 'nueva normalidad' siempre y cuando se sigan las normas establecidas para el acceso a las mismas.

Algunas ideas para vacaciones por la España desconfinada:

placeholder Una socorrista, en la playa de Gandía. (EFE)
Una socorrista, en la playa de Gandía. (EFE)

¿Para cuándo salir del país?

El inicio fue una reactivación paulatina en paralelo a la desescalada, aunque cuando se trata de desplazamientos al o desde el exterior por razones recreativas la situación ha sido diferente. Con muchos países con las fronteras cerradas al turismo internacional, el Gobierno de Pedro Sánchez estimó que las 'dificultades' a la hora de entrar al país estarían vigentes hasta, al menos, el 1 de julio, cuando se pone fin a las cuarentenas obligatorias (de 14 días) para todas las personas que entren en España desde otro país. Bruselas ya pidió el pasado mes de abril que los países de la UE aceleraran la apertura de las fronteras y acabaran con las restricciones de viajes lo antes posible para tratar de salvar la temporada estival, y del 1 de julio que estaba sobre la mesa, el Ejecutivo de Sánchez ha acabado adelantándolo al 21 de junio, mismo día en el que el país comienza su andadura por la 'nueva normalidad'. Así pues, las fronteras Schengen se abrirán ese día y las lindes con Portugal unos días más tarde, el 1 de julio.

No obstante, también depende lo de viajar al exterior de las decisiones que tome cada país. Por ejemplo, Grecia, que publicó recientemente una lista de países cuyos turistas podrían entrar en territorio heleno desde el 15 de junio, dejó fuera a España al menos hasta el 1 de julio, y entonces se verá si opta o no por abrir sus fronteras a los españoles. Entre los países del espacio Schengen existen una serie de criterios que se siguen para decidir la apertura o no de las fronteras, que van desde la situación epidemiológica —la principal condición para levantar las restricciones de viaje y los controles fronterizos—, hasta la situación social y económica del país, pasando por las medidas de contención que pueda aplicar el país (distanciamiento social, requisitos de seguridad sanitaria...), y todos ellos llevan a una desescalada en fases como la que tiene lugar en España: una fase 0 con fronteras bloqueadas; una fase 1 en la que se levantan ciertas restricciones y se retiran gradualmente los controles fronterizos y una fase 2, en la que se levantan también los controles internos, aunque la idea de la Comisión Europea es que se mantengan algunas medidas, como el distanciamiento social o la higiene continua, incluso pasada esta última etapa.

Foto: Un pasajero con mascarilla pasa un control en un aeropuerto. (EFE)

En cualquier caso, según la Organización Mundial del Turismo (UNWTO), las perspectivas para este año siguen siendo inciertas, y aunque todos los expertos coinciden en un fuerte declive del movimiento de turistas, todo depende del momento en el que se produzca la reapertura (aunque gradual) de las fronteras entre países. Así pues, si las fronteras comenzaran a abrirse a principios de julio, como se prevé que vaya a ocurrir, podríamos encontrarnos en un escenario donde las llegada de turistas internacionales cayera en torno a un 58% en 2020, lejos del 78% que disminuiría en caso de que la relajación de las medidas no tuviera lugar hasta finales de año.

Viajar o no viajar, esa es la cuestión

Lo cierto es que, sin certezas, todo apunta a que a partir de la 'nueva normalidad' se vayan abriendo rutas desde España a diferentes puntos del mundo —muchas aerolíneas recuperan sus vuelos a finales de este mes y otras, en julio también—, pero todavía no hay una fecha concreta en la que uno pueda garantizarse el movimiento desde el país hacia otros, especialmente hacia fuera de la Unión Europea. Incluso con la apertura de las fronteras, dependerá mucho del propio viajero: según una encuesta realizada por Bookinfax, solo un 18,8% de las agencias de viajes cree que los residentes viajarán al exterior en lo que queda de año, mientras que más del 81% consideran que habrá que esperar a 2021 para la reactivación de los viajes fuera del país. De otro estudio elaborado recientemente por Deloitte también se extrae que la reactivación total del turismo internacional no empezará hasta diciembre, después de haber pasado una etapa de estabilización donde mejore la sensación higiénica del turista de manera progresiva.

Otro estudio de Ey-Parthenon, publicado a mediados del mes pasado, arroja pocas esperanzas también sobre la situación: hasta un 41% de los encuestados sí mantenía la idea de hacer turismo, aunque la mayoría optaría por viajes nacionales. Solo el 3% de los castellano-manchegos tiene intención de viajar al extranjero, mientras que el 10% de los residentes en esta comunidad autónoma sí tenía pensado hacerlo pero ha cambiado de opinión; en el otro lado de la balanza se encuentran los catalanes y madrileños, con una tasa mayor de intención de volar fuera del país (un 12% en ambos casos).

placeholder Distancia física en el aeropuerto madrileño de Barajas. (Reuters)
Distancia física en el aeropuerto madrileño de Barajas. (Reuters)

Cuándo cogerse vacaciones: el problema del calendario

Otro añadido es el de la elección de las vacaciones: los trabajadores en activo se encuentran ahora con el problema de cuadrar las vacaciones con el resto de compañeros en un momento en el que pocos querrán disfrutar de estos días libres si no se pueden desplazar, al menos, por el país. Lo cierto es que la legislación vigente no está preparada para una situación de excepcionalidad como la actual, ya que la ley prevé, por ejemplo, que cada trabajador conozca las fechas de sus vacaciones con un mínimo de dos meses de antelación; si a esto se le suma que en determinados convenios colectivos sectoriales se especifica que al menos la mitad de las vacaciones se deben disfrutar durante los considerados 'meses de verano' (junio, julio y agosto), a estas alturas ya deberían estar repartidos los días libres del periodo estival.

[El reparto imposible de las vacaciones: "Nos vamos a pegar por la fase 3"]

Sea cual sea la situación en la que uno se encuentre, es imprescindible saber que en ningún caso la empresa puede decidir de manera unilateral el periodo de disfrute de las vacaciones de sus empleados, sino que este debe fijarse "de común acuerdo entre el empresario y el trabajador, de conformidad con lo establecido en su caso en los convenios colectivos sobre planificación anual de las vacaciones".

El calor parece ya haberse asentado en la península y el verano está oficialmente a la vuelta de la esquina; así que no es de extrañar que tan cerca del final de la primavera miles de españoles empiecen a hacer sus cálculos y cábalas para ver dónde pasarán las vacaciones del verano. Sin embargo, después de lo que ha sido una más que atípica Semana Santa, sin procesiones ni multitudes; de 'puentes' y festivos sin desplazamientos a pueblos o segundas residencias y, en definitiva, con todo un país completamente confinado, la desescalada ofrece un horizonte algo más halagüeño de lo que muchos esperaban, especialmente tras la llegada de los primeros turistas internacionales a Baleares.

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