El desconocido oasis en Valencia lleno de verde y entre dos zonas de playa: es perfecto para la primavera
Un invernadero subterráneo con forma de anfiteatro y más de 250 especies de plantas crasas completa la experiencia
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A medio camino entre la montaña y el mar, entre las localidades de Jávea y Denia, se encuentra uno de esos tesoros que pasan desapercibidos incluso para los más asiduos de la Costa Blanca. Un jardín secreto de 50.000 m² se esconde en el corazón de la Marina Alta, donde la vegetación mediterránea se despliega con elegancia y tranquilidad.
Este remanso verde, conocido como el Jardín de L’Albarda, es obra de Enrique Montoliu, un valenciano enamorado del entorno del Montgó que decidió crear, más que un simple jardín, un homenaje al Renacimiento italiano y a la biodiversidad autóctona. Cerca de 700 especies autóctonas conviven en armonía en este rincón natural que surgió de un antiguo bancal de limoneros.
Su diseño está pensado para que el visitante disfrute de un viaje sensorial: setos de boj, avenidas geométricas, templetes, fuentes inspiradas en la Alhambra y paseos entre cipreses y camelias crean un entorno de ensueño. Un invernadero subterráneo con forma de anfiteatro y más de 250 especies de plantas crasas completa la experiencia, todo ello sin romper la vista del Montgó, que siempre preside el horizonte.
La visita a L’Albarda es mucho más que pasear entre flores: es un ejemplo de compromiso medioambiental. Desde la Fundación Fundem, impulsada también por Montoliu, se trabaja activamente en la conservación de especies en peligro como la Silene hifacensis o el nenúfar blanco europeo. Un pulmón verde que protege no solo el paisaje, sino también la memoria botánica del Mediterráneo.
Un planazo estival
Además, durante los meses de julio y agosto, el jardín acoge conciertos al aire libre en su programa de “Atardeceres musicales”, donde guitarristas como Thierry Fouet ponen banda sonora a las puestas de sol. Una oportunidad perfecta para disfrutar del frescor al anochecer tras un día de calor levantino.
El Jardín de L’Albarda está abierto todos los días de 10h a 14h, y durante el verano también en horario de tarde, de 18h a 21h. El precio varía entre 7 y 9 euros para adultos según el día, y entre 4 y 5 euros para niños. Los menores de seis años y los socios entran gratis.
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Este rincón verde entre dos de las playas más visitadas del Mediterráneo es, sin duda, una escapada que a nadie le vendrá mal: uno de estos sitios, cada vez menos usuales, que se sienten como el cielo en la tierra.
A medio camino entre la montaña y el mar, entre las localidades de Jávea y Denia, se encuentra uno de esos tesoros que pasan desapercibidos incluso para los más asiduos de la Costa Blanca. Un jardín secreto de 50.000 m² se esconde en el corazón de la Marina Alta, donde la vegetación mediterránea se despliega con elegancia y tranquilidad.