La UCO destapa pagos con yates y aviones de un empresario para el que Zaplana medió

La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil apura la investigación en torno al exministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, con nuevas revelaciones con la que pretende apuntalar los indicios que lo sitúan como cabecilla de un entramado internacional de sociedades 'offshore' que se nutrieron de comisiones a cambio de contratos públicos. El último informe remitido al Juzgado de Instrucción número 8 de Valencia sostiene que el también expresidente de la Generalitat intermedió personalmente en las negociaciones con Bancaja, la antigua caja de ahorros luego integrada en Bankia, para refinanciar la deuda de un grupo empresarial denominado Provimola, comandado por el empresario Carlos Gutiérrez, y obtener, además, cerca de tres millones de euros de liquidez.

Como contraprestación, según los investigadores, Zaplana se benefició del uso de vuelos en 'jets privados' y cruceros financiados con fondos que salieron de las empresas de Gutiérrez. Además, una de las sociedades de este grupo, Nuevo Sol Granadella, trasfirió en mayo de 2009 a la empresa holandesa Natland 2,2 millones de euros. Esta mercantil fue receptora a su vez de fondos procedentes de Imison Internacional, la empresa creada por la familia Cotino en Luxemburgo y que, según los investigadores, se utilizó presuntamente por los testaferros de Zaplana para canalizar hasta seis millones de euros en comisiones por la adjudicación de parques eólicos y estaciones de ITV por la Generalitat cuando el expolítico del Partido Popular era presidente. Este ha negado siempre tener cualquier vinculación con esos fondos en el exterior y disponer de capacidad de control sobre la trama internacional de sociedades. Fuentes de su entorno niegan también que las transacciones con Provimola prueben ningún tipo de blanqueo de capitales.

Según la UCO, pese a que las sociedades intervinientes en la operación económica (Nuevo Sol) justifican la transacción de 2,2 millones en los servicios prestados por Natland para la negociación de esta refinanciación, de las diligencias practicadas no se evidencia la participación en las reuniones y negociaciones que tuvieron lugar de nadie por parte de esa sociedad. Por el contrario, Miguel Bastida, uno de los directivos de Bancaja, testificó ante los agentes haber recibido a Eduardo Zaplana en varias ocasiones en relación con esa refinanciación a instancias del que en ese momento era presidente de Bancaja, José Luis Olivas. "Todas estas reuniones las propiciaba el propio Zaplana y en todas ellas se interesaba por el estado de la operación de refinanciación del grupo Provimola". Según su relato, el que fue ministro con José María Aznar y alto cargo en Telefónica "le pedía que se hiciese un esfuerzo por parte de la entidad para materializar la operación".

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Europa Press

La inexistencia de gestiones reales por parte de Natland quedó también en cuestión al entrar en concurso voluntario de acreedores Nuevo Sol Granadella. El administrador concursal presentó en 2011 una demanda incidental por entender que el pago de los 2,2 millones de euros no se correspondía con servicios efectivamente prestados.

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De aquellas gestiones surgió un acuerdo de refinanciación que, según Bastida, fue bastante beneficioso para Provimola en comparación con otras situaciones similares de otros clientes. El grupo empresarial obtuvo alrededor de tres millones de euros de liquidez que fue a parar en gran parte a Netland, pero también a la consultora española de Zaplana, Decuria Consulting (casi 75.000 euros); a la firma de vuelos privados Transportes Aéreos del Sur; a la agencia de viajes Europa Travel, y una sociedad de otra persona muy cercana al exministro denominada Zarcar, que recibió 225.271 euros.

Viajes de lujo

Esta última empresa está ligada al empresario Francisco Pérez López, una de las personas del círculo cercano a Zaplana en Benidorm, conocido como Paco el Gasofa. Esta persona aparece relacionada con una serie de transacciones económicas en el Principado de Andorra. Una cuenta numerada vinculada a Francisco Pérez es destinataria de transferencias provenientes de Plaza Fountains por un importe conjunto de 309.000. Los investigadores también relacionan a este empresario con la pretensión de confeccionar facturación ficticia que permitiese la extracción de fondos de la mercantil Costera Del Glorio para ser destinados a Eduardo Zaplana.

Zarcar también se encargó de contratar entre el 11 y el 16 de agosto de 2009 un barco, el Iris, con origen y destino en el puerto de Falirou en Atenas (Grecia). El arrendamiento de la embarcación coincide con anotaciones en la agenda de Zaplana. Según el propio contrato, el cliente formal de dicho arrendamiento fue la sociedad Zarcar y el coste del mismo habría sido de 23.537,50 euros (18.287,50 euros correspondientes al alquiler y 5.250 euros como provisión de fondos para los gastos del viaje).

En su declaración en sede judicial, el propio Pérez reconoció que dicho crucero había sido gestionado por él y pagado por su empresa, pero que fue en beneficio del expresidente de la Generalitat, que supuestamente le habría devuelto el dinero en efectivo en varios pagos.

El sumario del caso Erial está evidenciando el gusto de Zaplana por los viajes de lujo, los vuelos privados y las embarcaciones de recreo. En el último informe de la UCO se recoge que empresas de Carlos Gutiérrez, un empresario que fue detenido en Ibiza en el marco de las diligencias, no solamente realizaron trasferencias a Natland o a Decuria Consulting. También sufragaron "en aparente beneficio" del expolítico la embarcación Franjack entre el 1 y el 9 de agosto de 2009 (80.759,89 euros) y la embarcación Ladyship entre el 29 de julio y el 7 de agosto de 2010 (130.000 euros) por un importe conjunto de 210.759,89 euros.

Zaplana realizó cruceros de lujo por Croacia, Italia o la Costa Azul con amigos, entre ellos la actual diputada del Partido Popular por Alicante y vocal del comité organizador del congreso nacional de los populares, Macarena Montesinos. La UCO también sostiene que Gutiérrez asumió el coste de vuelos en 'jet' privados de Zaplana a varias ciudades suizas, Cannes, Praga o Marrakech. El entorno del exministro sostiene que ni Provimola ni Nuevo Sol Granadella ni Carlos Gutierrez son adjudicatarios de contratación pública, por lo que no es posible que tales pagos o invitaciones en barco puedan considerarse cohecho. Y que, además, en esas fechas (2008-2010) Eduardo Zaplana ya estaba en el sector privado.