Toni Cantó obliga a Ciudadanos a romper en Valencia el consenso en violencia de género

Toni Cantó ha desembarcado en Valencia como precandidato de Ciudadanos a la Generalitat convulsionando su propio grupo parlamentario autonómico y quebrando uno de los consensos alcanzados por todos los partidos con representación en las Cortes Valencianas. El congresista ha forzado al partido a desmarcarse de una proposición no de ley (PNL) firmada por los portavoces parlamentarios en la que se acuerda reforzar y poner en valor las medidas contra la violencia machista recogidas en el Pacto Valenciano contra la Violencia de Género suscrito por todas las fuerzas políticas en septiembre de 2017. La iniciativa legislativa partió hace unas semanas del grupo socialista y del 'president' Ximo Puig, después de que Vox condicionase el respaldo a Juanma Moreno como presidente de la Junta de Andalucía a la derogación de las leyes andaluzas sobre violencia de género y a la retirada de ayudas y subvenciones a organizaciones feministas y de apoyo a las víctimas.

El texto buscaba cerrar filas frente a Vox, al que las encuestas otorgan la posibilidad de obtener representación en las Cortes Valencianes tras las elecciones autonómicas de mayo, y obligar a retratarse a PP y a Ciudadanos. La respuesta de las dos formaciones de oposición en Valencia fue respaldar el texto sin matices y sus respectivas portavoces, la popular Isabel Bonig y la naranja Mari Carmen Sánchez, no dudaron en estampar su rúbrica en el documento, que tenía que votarse este jueves.

Toda marchaba según lo previsto, pero cuando tenía que realizarse la votación, Sánchez comunicó el cambio de criterio tras el aterrizaje en Valencia el precandidato Cantó para dar un giro de 180 grados al guion de su partido, forzar la enmienda de la PNL y propiciar la ruptura del consenso parlamentario.

La resolución pactada (vea el texto íntegro) por los grupos hace balance de los casos de violencia machista recogidos en la última macroencuesta elaborada por el Ministerio de Sanidad y destaca la Ley Orgánica de Protección Integral aprobada por el Congreso en 2004 y la norma autonómica de 2012 contra la violencia contra la mujer, reforzada por un pacto de ámbito regional suscrito por todos los grupos el 18 de septiembre de 2017, como "los dos instrumentos legales con los que nos hemos dotado para luchar contra la violencia machista que atenaza la libertad y la vida de las mujeres". La propuesta aprobada por la Cámara apuesta, entre otras cuestiones, por reforzar y poner en valor las medidas contenidas en ese pacto valenciano, en el que se hace referencia a la legislación estatal.

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Sin embargo, el hecho de que la redacción del texto no hiciera referencia al pacto de Estado aprobado por el Congreso en 2017, fue la excusa empleada por Cantó para desmarcarse de la propuesta que se votaba este jueves. Cantó, que ha propiciado cambios en el equipo de gestión interno del grupo parlamentario para controlar su funcionamiento, empujó a tramitar la enmienda (consúltela aquí) a la resolución. En el escrito modificativo, se afirma que se rechaza "cualquier tipo de acuerdo con aquellas formaciones no firmantes del pacto de Estado contra la violencia de género", en el que Podemos se abstuvo por considerar insuficientes las medidas. Con ello, Cantó pretendía marcar distancias con Podemos y justificar su rechazo a la proposición no de ley.

Alejamiento del pacto anti-Vox

La formación morada, en cambio, sí respaldó el pacto en la Comunidad Valenciana y estampó su firma en la PNL debatida este jueves, al igual que la portavoz de Ciudadanos, que este miércoles tuvo que hacer el papelón de defender la nueva posición de su grupo. Los diputados de Ciudadanos, de hecho, han abandonado el hemiciclo y no han participado en la votación. La rectificación ha sido interpretada como una escenificación del alejamiento de lo que era básicamente un pacto anti-Vox, formación a la que el también actor valenciano tendrá que recurrir si quiere optar a la presidencia de la Generalitat, a la vista de la ausencia de mayorías claras que auguran los sondeos.

La enmienda de Ciudadanos ni siquiera ha llegado a ser tramitada por la Mesa. No por su contenido político, sino por criterios técnicos, pues llegaba fuera de plazo, según explicó el presidente de las Cortes, Enric Morera. Aun así, Cantó no ha dudado en protagonizar una comparecencia en las jardines de la Cámara de la que no es todavía parlamentario para denunciar el bloqueo a la iniciativa naranja y atacar a Podemos, al PSPV-PSOE, a Compromís y, también, al Partido Popular, al que ha tildado de aliado de los otros tres. Cantó lamentó la negativa de la Mesa a dar cabida a una modificación cuyo objetivo, ha descrito, es “ampliar y mejorar la propuesta presentada” para “evitar que se convirtiera en una farsa”. “No podemos afirmar que queremos dejar fuera de cualquier acuerdo a quien no reconoce este problema, mientras el tripartito está sostenido por Podemos, que no ha firmado el pacto de Estado contra la violencia machista”, insistió.

"Lo peor que ha dicho Cantó es que el pacto estatal está por encima del autonómico. Debe desconocer que la mayoría de los acuerdos son competencias autonómicas", replicó el portavoz socialista, Manuel Mata.

No es la primera vez que Cantó contradice un acuerdo de sus compañeros en la Comunidad Valenciana con el resto de fuerzas parlamentarias. La última ocasión fue con motivo de la aprobación en el Congreso de los Diputados del nuevo Estatuto de Autonomía, que contaba con el respaldo inicial de la formación naranja, que llegó a firmar la ponencia. Finalmente, la cúpula del partido forzó el cambio de criterio y se abstuvo de la reforma que buscaba proteger la inversiones del Estado en la Comunidad Valenciana.