Aquelarre aznarista en Valencia: el sector anti-Rajoy reclama un nuevo proyecto

No soy del sector crítico, soy un crítico sin sector. Cayetana Álvarez de Toledo parafrasea una de las ideas de Eugenio Nasarre en su conferencia de clausura de las jornadas organizadas por Floridablanca bajo el título 'Globalización y responsabilidad: nuevos horizontes de la democracia liberal'. “Yo me identifico con eso, con tener una mirada con ganas de debatir y deliberar y no aceptar el 'statu quo' si creemos que el 'statu quo' no es bueno”. La periodista y política, exjefa de gabinete de Ángel Acebes, apartada de la primera línea del Partido Popular por sus discrepancias con Mariano Rajoy, es la estrella en el cierre del curso coordinado junto con la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIPM) que se ha celebrado desde el miércoles y hasta el viernes en Valencia.

Los asistentes plantean sus dudas sobre el alcance político e ideológico del próximo congreso del PP previsto para febrero

Una Esperanza Aguirre venida a menos políticamente le hace de telonera con una conferencia sobre el populismo en la que realiza una tímida defensa de Donald Trump, del que afirma que no comparte su visión proteccionista del comercio pero evita equiparar con Podemos en populismo: “Es popular, populachero y conoce bastante bien dónde les aprieta en el zapato a muchos norteamericanos”. Y sigue: “Es un entusiasta de los Estados Unidos (…) Algunos han recibido a Trump como a Ronald Reagan, considerado por algunos como populista. Pero Reagan ha sido el mejor presidente de los Estados Unidos y el mejor líder que ha tenido Occidente de todo el siglo XX”, asesta la expresidenta madrileña sobre uno de los impulsores de la llamada revolución conservadora, presidente entre 1981 y 1989.

Entre el público de este aquelarre neoconservador ni uno solo de los actuales responsables del PP en la Comunidad Valenciana y menos aún de la dirección nacional. La directora de este ‘think tank’, aspirante a ser referencia intelectual de la llamada “derecha sin complejos”, Isabel Benjumea, les ha invitado a todos, incluso a participar en alguna de las mesas. Nadie ha querido ir. Las distancias están muy marcadas. Antiguos altos cargos aznaristas como Gabriel Elorriaga o Eugenio Nasarre, muchos de ellos vinculados también a FAES, han ido desfilando durante los tres días del curso. El que fue jefe de gabinete de José María Aznar, Carlos Aragonés, se descabalga en el último momento pero figuraba también como moderador en una de las mesas.

“Si me preguntan cuál es el proyecto político para España a día de hoy en el PP, me siento incapaz de responder", dice Álvarez de Toledo

Ocho años después de que Mariano Rajoy lograse imponerse sobre Aguirre y el aznarismo en el congreso nacional del PP celebrado en Valencia, la élite intelectual de este grupo ha vuelto al lugar del crimen (por decirlo metafóricamente) para rearmarse ideológicamente y reivindicarse como sector crítico con la próxima cita congresual de febrero en el horizonte. Lo hacen con muy pocas opciones de recuperar su espacio pero sin pelos en la lengua, como queda demostrado por la intervención de Álvarez de Toledo: “Muchos votaron al PP pese a sus evidentes defectos y posibilidades de mejora. La gente se puso la pinza en la nariz ante la posibilidad de que Podemos alcanzara el poder, lo que era una amenaza real para nuestro país (…) Pero el PP ha resistido en base al miedo a lo ajeno porque tener miedo a Podemos era higiénico. Pero de miedo no se vive ni se hace política y no se saca adelante un país”. Y lanza la frase contundente: “Si me preguntan cuál es el proyecto político para España a día de hoy en el PP me siento incapaz de responder. La prueba es la formación del nuevo Gobierno. Lo único relevante es que a la vicepresidenta se le da el encargo de la negociación con el separatismo catalán. Y me inquieta en qué va a consistir esa negociación. Habrá que estar alerta”.

Miedo a ser etiquetado de derechas

Separatismo, populismo, nacionalismo… Álvarez de Toledo identifica los enemigos de la derecha que dice representar y defiende el régimen constitucional de 1978. Acusa también a Ciudadanos de timorato en sus planteamientos políticos. “Tenía la oportunidad de haber sustituido al PP como principal fuerza de centro-derecha. Pero les dio miedo que les llamaran de derechas, como a muchos chicos del PP”.

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“Es necesario poner en marcha un proyecto de recuperación política en España”, añade. Y duda de que la próxima convención del PP vaya a servir para ello. “Hay que fomentar la competencia. Una cosa es la eficacia y otra la bunkerización y el ensimismamiento. Va a ser un congreso de trámite. Lamento que no será de debate, de candidaturas diferentes”.

Isabel Benjumea lanza un resumen de las ideas claves del curso. Una de ellas apunta directamente al corazón ideológico del PP. “Desde el centroderecha no se está articulando un discurso. Este curso ha sido un ejemplo de políticos libres a pesar de la falta de libertad interna que suele haber en los partidos”.