Puig desafía a Sánchez y eleva a Ferraz una propuesta de pacto al Senado con Podemos

Los socialistas valencianos siguen dispuestos a tratar de forzar un acuerdo de candidatura conjunta al Senado con Podemos y Compromís al margen de la opinión de Ferraz. La ejecutiva del PSPV-PSOE aprobó este martes por la tarde una resolución con el objetivo de tratar de cerrar un acuerdo de Entesa que garantice al PSOE mantener sus dos actas actuales en la Comunidad Valenciana (Alicante y Castellón) y tratar de recuperar la tercera por Valencia, que perdió el pasado 20 de diciembre. El temor a que el acuerdo entre los podemitas, la formación de Mònica Oltra y Esquerra Unida pudiera poner en riesgo más escaños, explica que Ximo Puig haya optado por forzar la máquina y desafiar incluso a la dirección federal de Pedro Sanchez, que hoy mismo rechazaba de forma contundente el acuerdo global para la Cámara Alta ofrecido por Pablo Iglesias.

Ximo Puig quiere hacer valer el factor territorial en una candidatura que considera ligada a cuestiones que tienen que ver con la relación de las autonomías con el Estado. "Buscamos que de forma conjunta podamos defender la viabilidad de nuestro autogobierno y el futuro de la Comunidad Valenciana", señala el escrito aprobado hoy [aquí en PDF] y elevado a Ferraz. "Desde la autonomía de cada partido político, desde el espíritu de diálogo y entendimiento, pero también desde el convencimiento de que la situación de la Comunitat Valenciana lo necesita, la ejecutiva plenaria del PSPV-PSOE reunida el 10 de mayo de 2016 propone negociar con Compromís y Podemos para alcanzar de cara a las próximas elecciones generales del 26 de junio un 'acord valencià'. Un 'acord valencià' en el Senado, que es la Cámara territorial, donde de forma conjunta podamos defender la viabilidad de nuestro autogobierno y el futuro de la Comunitat Valenciana", insiste la resolución.

Ferraz vetará la candidatura

Hasta ahora, Sánchez y su secretario de Organización, César Luena, habían hecho vista gorda y no habían intervenido para frenar ese acercamiento a Podemos, porque se trataba de una cuestión puntual y territorial, pero la oferta trampa de Iglesias va a obligar a tomar una decisión comprometida. Si se acepta la propuesta que llega desde Valencia, se entrará en contradicción con la negativa de hoy. Si se rechaza, se pondrá en cuestión y se desautorizará la figura de uno de los barones del partido. Sin embargo, esta noche del martes desde Ferraz ya se manifestaba de forma oficial que la respuesta será negativa y que el barón valenciano no puede desentenderse de la doctrina que ha marcado Pedro Sánchez. De ser así será difícil que el Acord Valencià salga adelante porque la competencia de la candidatura al Senado es federal y depende de la dirección en Madrid. Está previsto que el viernes la comisión federal de listas tire para atrás la lista unitaria si finalmente llega o si llega incompleta, porque otra salida es que la candidatura a la Cámara Alta sólo contenga un nombre socialista por provincia, a fin de que Compromís y Podemos pongan a los otros dos aspirantes en sus respectivas planchas.

La postura del PSPV-PSOE ha generado mucho malestar en Ferraz. Esta tarde Luena y Alfred Boix, secretario de Organización de los socialistas valencianos, se pusieron en contacto telefónicamente (ya lo habían hecho por la mañana). El primero, según el relato del aparato del PSPV, advirtió al segundo que la comisión de listas vetará la iniciativa y que no entendía las razones que han llevado a Puig a manter el pulso cuando Sánchez ya había dicho por la mañana "no" a un pacto al Senado con Podemos. Por su parte Boix informó a Luena de que se trata de una posición de convencimiento del presidente valenciano por razones de autonomía territorial y que defenderá su resolución el viernes. Desde el entorno de Sánchez no muestran dudas: la iniciativa decaerá y punto.

El conflicto con Sánchez, con quien la relación es fría, por no decir gélida, no parece amedrentar a Puig. Esta mañana, en un acto en Valencia, insistía en que los valencianos "tienen que tener clara una agenda propia en el Senado y en el conjunto de las instituciones españoles, si es posible, en dos o tres cuestiones fundamentales”. Estas cuestiones son la financiación, las inversiones y la deuda histórica, según Puig, quien destacó que lo que hay que hacer, "de una vez por todas", es "visibilizar el problema valenciano y encontrarle solución" porque, según remarcó, "nos estamos jugando el futuro”, recoge Efe. Estas reivindicaciones son las mismas que el consejo ciudadano autonómico de Podemos planteó como programa común básico para negociar una candidatura conjunta, por lo que en realidad los hipotéticos socios están alineados.

Los críticos ni aparecen: Romeu se borra

La iniciativa, aunque no figuraba en el orden del día y fue defendida por el propio Puig, no recibió excesiva oposición en el seno de la ejecutiva nacional de esta tarde del martes. Hubo intervenciones, pero en favor del presidente. De hecho, el vicesecretario, Francec Romeu, que amenazaba con mostrar su posición crítica si salía el tema en la reunión, ni siquiera apareció. El escrito salió respaldado por unanimidad del plenario.

En paralelo, Podemos convocó a Puig y Mònica Oltra a iniciar las conversaciones con una reunión mañana por la tarde. Su secretario general, Antonio Montiel, quiere negociar directamente con el presidente de la Generalitat y la vicepresidenta en lo que cada vez más se escenifica como una repetición del Pacte del Botànic pero en clave de candidatura conjunta a la Cámara territorial del Parlamento español.