"¡Seguir, seguir y seguir!": el primer mitin virtual de Puigdemont abre la campaña
El lugar de la presentación no es inocente. Allí mismo, junto al pabellón deportivo de esta localidad gerundense, fue donde intentó votar el 1-O el 'expresident'
Y, finalmente, cuando parecía que todo el mundo perecería congelado, emergió Carles Puigdemont, "¡president!", a través de videoconferencia en la pantalla. Saludó con la mano en doble movimiento horizontal y preguntó a los asistentes si estaban bien. Todos corearon a la vez que sí, por supuesto, y dirigió un breve parlamento que abundaba en "democracia", "legitimidad, "lista de país y unidad", "humillación" y, sobre todo, "seguir, seguir y seguir". En definitiva, las ideas fuerza que ya habían desgranado los demás oradores del acto de presentación de las listas de Junts Per Catalunya en Sant Julià de Ramis.
Más concretamente, en la plaza 1 de octubre de Sant Julià de Ramis. En una candidatura que lo apuesta todo al simbolismo, el lugar no es inocente. Allí mismo, junto al pabellón deportivo de esta localidad gerundense, fue donde intentó votar el primer día de octubre, el del referéndum, el expresidente de la Generalitat. Ahora, esa especie de pequeño anfiteatro que desemboca en el edificio donde se practica deporte recuerda esa fecha "de violencia insoportable por parte del Estado Español", según Marta Madrenas, la alcaldesa de Girona, que abrió la ronda de intervenciones.
"El espíritu del 1-O es el espíritu que puede doblegar el autoritarismo y que ha obligado al Estado a asumir que el futuro de los pueblos no se decide en un consejo de ministros ni en un tribunal, sino que el futuro de los pueblos se juega en las urnas" ha sentenciado el presidente cesado. Acerca de las elecciones autonómicas del 21-D, Puigdemont las ha calificado como "una segunda vuelta del 1-O" con la esperanza de que "vuelva a haber otra victoria histórica para hacer de la vía pacífica y democrática el único camino para avanzar". "Tenemos que cambiar de Estado para conseguir cambiar de era, para pasar de un Estado que aún vive en el siglo XX o XIX, y cambiarlo por uno que hable con el mundo de los retos del siglo XXI", ha señalado Puigdemont.
Acerca del 21-D, Puigdemont lo ha calificado como "una segunda vuelta del 1-O" con la esperanza de que "vuelva a haber otra victoria histórica"
El expresidente de la Generalitat, que encabeza la lista de Junts per Catalunya, ha explicado desde Bruselas que "para cambiar el estado de miedo, de imposición y de autoritarismo" que vive Cataluña se deben "dejar de lado las pasiones del nacionalismo imperialista gastado del siglo XX que tanto daño han hecho en Europa".
Puigdemont también ha afirmado que la plaza donde se estaba celebrando el acto fue escenario, el pasado 1 de octubre, de "la agresividad, la rabia y la potencia policial que todo el mundo pudo ver", y ha denunciado "la impotencia política de los que solo se pudieron refugiar en el autoritarismo para hacer valer unas razones que la democracia y las urnas no les dieron". También se ha dirigido a los 'consellers' cesados que permanecen en prisión y ha pedido la retirada del artículo 155 de la Constitución y la rectificación de las políticas que, ha dicho, quieren "romper la cohesión social".
La carga emotiva
Antes, frente a algo más de un centenar de personas (de las que un tercio resultaron ser los propios candidatos del partido), se erigieron los maestros de ceremonias, entre ellos el actor de 'Dagoll Dagom', Joan Lluís Bozzo. Con unos tarjetones rojos iba leyendo uno a uno los nombres y un breve currículum de cada uno de ellos. El actor, con énfasis, como corresponde a su querencia profesional. Conforme leían los nombres, los citados que estaban en el lugar (que eran muchos), iban subiendo a un escenario. Uno de los momentos más emotivos fue la concatenación Rull, Turull (ambos 'exconsellers' y ambos en prisión), que levantó fuertes ovaciones del poco pero entusiasta público.
Los números uno por Lleida, Josep María Forné, por Tarragona, Eusebi Campdepadrós, y por Girona, Gemma Geis, lanzaron después sucesivos parlamentos. Todos ellos redundaron en que esa lista, la suya, es la que restituía al gobierno descabalgado por el 155 de manera antidemocrática e ilegítima. "Son unas elecciones especiales, en otra clave", explicó el regidor de Tarragona, que recordó su militancia en ERC "hasta hace dos días".
Gemma Geis, en su intervención se preguntó por qué España siente odio hacia Cataluña y expresó la gran tristeza que ello le produce
Pero la idea de la candidatura es la de que representa "una respuesta a la violencia ejercida física y judicialmente contra Cataluña" y, en consecuencia, que la de ERC no lo hace. Todos ellos, incluido el propio Puigdemont, concluyeron sus intervenciones con un sentido y sonoro: "¡Visca Catalunya!" que la concurrencia respondió con otro sonoro "¡Visca!". Geis, en su intervención, de fuerte carga emotiva, se preguntó por qué España siente odio hacia Cataluña y expresó la gran tristeza que ello le produce. En general todos los discursos se mantuvieron en esa línea sentimental que parece que va a ser la tónica general del Junts Per Catalunya.
Al concluir el acto, tras la brevísima y muy sonriente alocución de Puigdemont, los candidatos presentes se quedaron en un silencio solemne y comenzaron a cantar 'Els Segadors', lo que auguraba el final de la presentación, aunque antes de concluir mostraron las fotos de los presos implicados en el proceso. A pocos metros de allí, en el bar Germán, los parroquianos se preguntaban qué era eso, que qué frío, y que ellos sí que trabajan "como enanos" por Cataluña y nadie se acuerda de ellos.
Y, finalmente, cuando parecía que todo el mundo perecería congelado, emergió Carles Puigdemont, "¡president!", a través de videoconferencia en la pantalla. Saludó con la mano en doble movimiento horizontal y preguntó a los asistentes si estaban bien. Todos corearon a la vez que sí, por supuesto, y dirigió un breve parlamento que abundaba en "democracia", "legitimidad, "lista de país y unidad", "humillación" y, sobre todo, "seguir, seguir y seguir". En definitiva, las ideas fuerza que ya habían desgranado los demás oradores del acto de presentación de las listas de Junts Per Catalunya en Sant Julià de Ramis.