Temor en los partidos catalanes por un posible sorpasso de Aliança Catalana a Junts
Encuestas internas muestran un crecimiento exponencial de la formación de Silvia Orriols. En algunos casos pasaría de los dos diputados actuales en el Parlament a 15
Silvia Orriols en el Parlament de Catalunya (EP).–
Un temor se está extendiendo en los partidos catalanes por un posible sorpasso de los ultraderechistas de Aliança Catalana a Junts, un fenómeno inédito que está empezando a aflorar en algunas encuestas internas, según los datos que manejan algunas formaciones. Junts se ha convertido en una organización agarrotada por la parálisis, mientras que Silvia Orriols sigue ganando adeptos con un discurso que cada vez habla más de inmigración, especialmente contra la que proviene del mundo musulmán, y menos de independencia.
Un sondeo de una formación mayoritaria muestra el auge de Orriols, por encima ya del PP o de Vox y muy cerca de los de Carles Puigdemont. El PSC, según este estudio, obtendría 39 escaños; mientras que ERC y Junts conseguirían 21. Justo ahí aparece Aliança Catalana, con 15 y por delante de PP (14), Vox (12), Comuns (9) y la CUP (4). En la práctica todos los grupos se quedarían más o menos igual, pero Aliança multiplicaría sus dos diputados actuales.
El Centro d’Estudis d’Opinió (CEO), el equivalente al CIS catalán, en su último barómetro ya advertía que los de Silvia Orriols se estaban disparando y que podían llegar a alcanzar los diez asientos. La cuestión es que se trata de una tendencia que recogen todas las encuestas y que si ahora está así y quedan tres años para el final de la legislatura, que Salvador Illa ha insistido una y otra vez que está dispuesto a agotar, es más que probable que Aliança se convierta en una fuerza más relevante que Junts.
Pero no son los únicos. El CIS también ha detectado, por otras vías, que Orriols parece aupada por una fuerza demoscópica imparable, impulsada por factores diversos: el contexto internacional con Donald Trump al frente, la frustración de las bases independentistas después del procés y el desgaste de los partidos soberanistas tradicionales, que han optado por seguir con los mismos líderes que había en 2017: Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, lo cual lastra sus opciones electorales.
Ante eso, Silvia Orriols ofrece una cara nueva, un discurso que encaja con tendencias del nuevo conservadurismo dominante en todo el mundo y una forma de captar el malestar latente en las sociedades modernas. De seguir a este ritmo al final de la legislatura, Aliança Catalana superaría a Junts en escaños.
En el partido de Puigdemont son conscientes de ello, a lo que se añaden problemas internos, como la falta de relevo de Puigdemont o la imposibilidad de que el expresidente pueda volver en otoño a gracias a la amnistía. Puigdemont cargó a finales de julio contra Aliança sin nombrarlos, denominándolos “arquitectos del caos”. Pero en realidad, Junts cada vez compra más la agenda política de Orriols: seguridad, inmigración, catalán en peligro de desaparecer...
Parlament ingobernable
Si se cumplen estas perspectivas, con dos formaciones de ultraderecha tan fuertes –Vox sigue estabilizado en los doce escaños en el Parlament–, la Cámara catalana sería uno de los parlamentos europeos con más peso de la ultraderecha: 27 diputados, que suponen el 20% del hemiciclo, una cifra para convertir Cataluña en ingobernable, por mucho que Illa ganase las elecciones con comodidad, como indican todas las encuestas.
En el Parlament empiezan a verse signos de esta situación y Vox es el mejor ejemplo. Durante este año de legislatura en Cataluña los de Ignacio Garriga están votando a favor de la mayoría de iniciativas y mociones de Aliança Catalana. No pasa lo mismo en sentido contrario, porque la formación liderada por Santiago Abascal usa el castellano en la Cámara catalana, aunque se detecta cierta convergencia ideológica entre ambas formaciones.
Aliança está marcando la agenda en Cataluña, a pesar de centrarse en temas menores
Aliança Catalana sigue marcando la agenda catalana. Este verano ha sido con el burkini. No son temas que tengan la relevancia para el futuro de Cataluña como lo serían la ampliación del aeropuerto o la continuidad de la vida útil de las nucleares, por poner sólo dos ejemplos de política real. Pero le sirve para ir construyendo una base social al margen del independentismo tradicional, que está sufriendo para movilizar a los catalanes contra temas como el traslado de las pinturas románicas de Sijena o la Diada.
Un temor se está extendiendo en los partidos catalanes por un posible sorpasso de los ultraderechistas de Aliança Catalana a Junts, un fenómeno inédito que está empezando a aflorar en algunas encuestas internas, según los datos que manejan algunas formaciones. Junts se ha convertido en una organización agarrotada por la parálisis, mientras que Silvia Orriols sigue ganando adeptos con un discurso que cada vez habla más de inmigración, especialmente contra la que proviene del mundo musulmán, y menos de independencia.